El noveno tanatorio del sur de la ría de Arousa abrirá al lado de la sala de fiestas Chanteclair.
Una compañía de Val do Dubra invierte en Pontecesures 560.000 euros en su primer proyecto fuera de la provincia de A Coruña, en el que ofrecerá también la celebración de funerales civiles. Al frente, la cuarta generación de una familia con una emprendedora capaz de dirigir una funeraria, regentar un ultramarinos y conducir un taxi en tiempos nada fáciles para ello
Dos meses. Este es el plazo que, semana arriba, semana abajo, maneja Víctor Iglesias, propietario de Ágora Servicios Funerarios, para la apertura del primer tanatorio de Pontecesures.
A alcaldesa non se enterou da festa universitaria que trouxo á Chanteclair a milleiros de universitarios.?? Esta rúa está chea de bolsas e merda… O Concello Pontecesures conta con servizo de limpeza viaria os sábados,. Mellor día para empregalo non podían ter buscado.
El evento no se ensombreció ni siquiera por el pequeño incidente que tuvieron con el transporte que se contrató para trasladar a los asistentes desde Compostela a la localidad arousana
Tal como estaba previsto, la celebración de fin de curso que reunió a los estudiantes de Santiago la noche del viernes se convirtió en una auténtica macrofiesta. Y es que el tamaño del lugar era una de las claves de este año puesto que los locales de Santiago como mucho llegan a albergar a «unas 500 o 700 personas», lo que motivó que la fiesta no se celebrará en Compostela como es habitual, sino que se trasladara a Pontecesures, concretamente en la discoteca Chanteclair, cuyo aforo ronda las 3.000 personas de capacidad y donde finalmente se congregaron más de 2.500.
Según relató a La Voz el organizador, @salseo_usc, la inmensa mayoría de los asistentes era de Santiago, aunque se sumaron también algunas personas de la localidad arousana y sus alrededores.
Las imágenes no dejan lugar a dudas. El ambiente fue espectacular y el evento no se ensombreció ni siquiera por el pequeño incidente que tuvieron con el transporte que se contrató para trasladar a los asistentes desde Santiago a Pontecesures. Uno de los seis buses que estaban programados se averió y tuvo que venir otro vehículo de última hora para sustituirlo en medio de «la faena» del traslado.
Hasta el lugar se desplazó también una food truck especializada en pizzas para atender la demanda de cientos de jóvenes hambrientos. La gente «se lo pasó bomba» y así se lo hicieron saber a través de decenas de mensajes al organizador, que se mostró sorprendido por esta reacción: «esto nunca me había pasado».
Para la gran fiesta fueron contratados destacados DJs como Dumore, Tiger Fighter, Iván Ortuño, la pareja MRJ, Rubén Rey y S.T. Now. «La gente se lo pasó estupendamente porque los dj’s iban cambiando de estilo de música a medida que pasaba la noche» y, además, contaron con la presencia de Champimuros, un cómico muradano y estrella emergente de las redes que suma más 140.000 seguidores en su perfil de Instagram. Los asistentes se lo pasaron muy bien con el humorista que no dudó en hablar y tomarse foto con los estudiantes.
Los coordinadores del evento tenían todo bien atado desde las primeras horas. Estaba previsto celebrar una reunión en el parking de la discoteca a partir de las 21.00 horas para que los estudiantes, cuyo presupuesto para las copas no es que sea muy boyante, tuvieran la oportunidad de realizar un botellón para ponerse a punto antes de la gran fiesta que empezaría a medianoche, pero la lluvia estropeó los calculados planes. Sin embargo, «los de la discoteca se portaron y nos abrieron la parte de arriba de la sala para poder hacer ahí el botellón hasta las 23.30 que fue cuando se tuvo que hacer el cambio de salir todos para volver a acceder, ahora sí con la entrada».
La siguiente macroquedada podría caer para inaugurar el próximo curso: «Me gustaría mucho volver a hacer una fiesta así en septiembre, sólo habría que mejorar el tema de los autobuses porque hubo algo de descontento, pero nada grave».
El organizador, @salseo_usc, cuenta cómo la elección de la discoteca Chanteclair estuvo condicionada por su capacidad: «En Compostela no hay nada así»
Este año, la fiesta por el fin de exámenes en la USC no se celebra en Santiago. Organizados por el perfil de Instagram de @salseo_usc y el DJ Dumore y buscando la novedad, grupos y grupos de universitarios se trasladarán la noche del 7 de junio a Chanteclair, discoteca situada en Pontecesures, en un camino de ida y otro de vuelta que ronda los veinte minutos por carretera. «Saldrán desde el centro unos diez o doce autobuses», anticipa a La Voz la persona que hay detrás de la cuenta, anónima desde sus inicios. Las entradas, que oscilan en un rango de precios que va desde los ocho hasta los doce euros, ya se pueden reservar respondiendo a sus historias. Si el aforo de la sala ronda las 3.000 personas de capacidad, el administrador piensa que «es muy probable que se complete». De hecho, se atreve a calificar la demanda como un «récord» en los años que lleva organizando eventos. «En menos de un día, entre mensajes y reacciones han interactuado cientos de estudiantes», explica.
El cartel de la fiesta organizada por @salseo_usc para el fin de exámenes en Chanteclair, con ocho DJ’s diferentes. @salseo_usc
Por eso, el tamaño de la sala jugó un papel fundamental en la decisión de mover la quedada de Santiago hasta otro lugar próximo. «Es una discoteca mucho más grande en comparación a las que hay aquí, que no hay nada así. Como mucho llegan a 500 o 700 personas, que no es ni la mitad de la capacidad a la que puede llegar Chanteclair», explica. El organizador prevé hacer sold out, es decir, que en la quedada del 7 de junio el lugar se llene con unas 2.500 o 3.000 personas. Explica que desde la sala contrataron un servicio de buses de Santiago a Pontecesures para la ida y otro para la vuelta. Además, recalca que a la localización se puede llegar en tren y que hay párkings próximos por si alguno prefiere desplazarse en coche.
«Hacer una fiesta en Santiago está muy bien, pero termina siendo siempre lo mismo. En este caso, Chanteclair permite muchas cosas. Por ejemplo, hay pantallas para hacer animación y, al ser más personas, tienes más margen de inversión», continúa el organizador, que contrató a un total de ocho DJs —Dumore, Tiger Fighter, Iván Ortuño, la pareja MRJ, Rubén Rey y S.T. Now— para que se turnen durante la noche. La celebración, además de ponerle punto y final a un curso académico, marca un antes y un después en su manera de concebir la organización de eventos. Le gustaría centrarse más en la celebración de fiestas «especiales». «El plan es cambiar ese rollo de hacer eventos por hacerlos en Santiago. Igual es mejor organizar solo cinco eventos al año, pero que la gente se quede con la fecha», sentencia.