Siguiendo la senda del pimiento de Herbón.

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Una imagen de toda la vida: las pementeiras vendiendo en la paredilla del Souto.

La temporada empezó de forma tardía en junio debido al mal tiempo y cada vez son menos las ventas que tienen

Las pementeiras de Herbón hablan de sequía. ??El mal tiempo este año nos jugó una mala pasada y la gente también compra menos?, es la opinión general de todas las mujeres que diariamente se disponen a vender sus productos en los alrededores de Padrón.

La temporada este año empezó de manera tardía, en junio, y las trabajadoras esperan que dure como mínimo hasta septiembre.

Malos tiempos sí, pero como viene demostrando la tradición, las mujeres de Herbón son las que siguen dando ??el callo? dentro de este gremio tan duro. ??En verano estamos aquí con la sombrilla, tanto si llueve como si hace mucho calor, hasta que acabemos el cultivo que se recogió ese día?, afirma Fina, de Herbón.

Los pimientos tienen que tener un cuidado especial, a unas altas temperaturas y con una buena claridad. Cándida explica que es importante no dejar que los pimientos crezcan mucho, ??si no pican más?. Como el resto de sus compañeras, se encarga personalmente de plantar las semillas, cuidarlas y recogerlas para después venderlas.

Alrededor de una docena se concentran con sus puestos ambulantes todos los días de la semana, después del mercado, en el Souto, de 14.00 a 21.00 horas. Sus clientes: los habituales y ??también los que van a la playa o vienen los domingos al mercado, que paran y compran los mejores pimientos del país?, afirma orgullosa Milagros Boga, trabajadora del producto desde niña.

Se conocen todas, sus plantaciones están unidas y la cercanía personal que mantienen ??hace que las tardes sean más amenas?, reconocen. Algunas de ellas se desplazan a Santiago, Ribeira o cercanías algún día de la semana, aunque su puesto habitual se encuentra en Padrón.

Fina y Cándida, que están situadas más cerca de Pontecesures, concluyen diciendo que ??ahora estamos vendiendo lo que dan nuestras semillas, no compramos mucho más. No es posible vivir solo de este negocio y mucho menos estos últimos años. Para eso trabajamos en otras cosas?.

TIERRAS DE SANTIAGO, 05/08/08

Espinosa jura defender el pimiento de Herbón.

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La ministra alaba el producto y se convierte en uno de los cinco nuevos miembros de la Orden padronesa ··La degustación de los casi tres mil kilos atrae a medios de comunicación procedentes de Corea y de Alemania

Miles de personas se acercaron el pasado sábado a la carballeira de los padres franciscanos en Herbón (Padrón) para secundar la tradicional degustación del pimiento de Herbón. En esta ocasión, la exaltación gastronómica tuvo a una pregonera de excepción, la ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa (pese a que los carteles anunciaban al conselleiro de Traballo, Ricardo Varela, hasta el último día).

Espinosa alabó el producto de las tierras de Herbón y la calificó de ??joya gastronómica?, autoproclamándose al final de su discurso como embajadora del pimiento de Herbón. También juró defender este producto cuando el regidor, Camilo Forján, le impuso la capa de la Orden de Cabaleiros e Dama do Pemento de Herbón, junto a otros cuatro candidatos: los directores xerais de Turismo y de Produción, Rubén Lois y Antonio Oca; el director del Centro Superior de Hostalería de Galicia, Xosé Paz; y el jefe de Extensión Agraria de Padrón, José Ramón Torreira.

La comisión también entregó los pimientos de Plata al restaurante Reina Lupa, representado por Manuel Martínez, y a Radio Valga. La sabia pementeira recayó en M.ª Carmen Miguéns, y el Xove Pementeiro en Xosé Ramón Dopazo. También se premió el ingenio de las carrozas de la procesión motorizada.

La exaltación atrajo a numerosos medios de comunicación, entre los que destacaban dos televisiones, una de Corea y otra de Alemania. El pimiento salió triunfante y más internacional que en cualquier celebración. Y van ya treinta.

TIERRAS DE SANTIAGO, 05/08/08

Espinosa, embajadora del pimiento.

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Espinosa y Forján probando una ración de pimientos.

La ministra sustituye a Varela en el pregón de la fiesta culinaria de Herbón ·· Cientos de personas degustaron cerca de tres mil kilos de este producto ·· Medios de comunicación coreanos y alemanes se hacen eco de la fiesta

Nadie duda ya de la internacionalización del pimiento de Herbón, esa «joya gastronómica», como la definió ayer la ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa, que «practica la tolerancia» y la igualdad», en alusión a los acompañamientos gastronómicos con los que convive («el buen vino, el pan, la sal y el aceite de oliva», dijo Espinosa). Y ayer más que nunca, cuando se cumplían treinta años de la exaltación culinaria en Herbón (Padrón), su cuna de adopción, su fama atrajo la atención de ojos extranjeros, amén de los propios. Entre las miles de personas presentes en la carballeira de los padres franciscanos, había un grupo muy singular: el de los medios de comunicación. Junto a los gallegos que ya dan amplia fe del evento anual, se encontraban cámaras y periodistas televisivos de Corea y de Alemania que no se perdieron nada de la celebración: desde la puesta en escena del recinto festivo, pasando por el encendido de las sartenes donde se freirían en abundante aceite los pimientos, hasta el desfile de los tractores y carrozas con temas made in Herbón, discursos oficiales, nombramientos de nuevos Cabaleiros y Damas de la Orden do Pemento de Herbón, y el punto álgido de la fiesta: la degustación.

Pese a que los programas festivos anunciaban la presencia de Carlos Varela, el conselleiro de Traballo, como pregonero de la degustación gastronómica, fue la ministra de Medio Ambiente, la que oficiaría tal cargo ayer . Su confirmación a última hora llevaría a la organización a hacer un replanteamiento de cartel. Espinosa estuvo sembrada. Su discurso fue una alabanza poética y metafórica hacia el pimiento de Herbón, producto que sigue pendiente de la Denominación de Origen Protegida. Se autoconfesó una amante de los pimientos y selló con Herbón un pacto, convirtiéndose en embajadora de este «producto senlleiro».

Espinosa ingresaría momentos después en la Orden de Damas e Cabaleiros do Pemento, junto a los directores xerales de Turismo y de Producción, Industrias e Calidade Agroalimentraria, Rubén Lois y Antonio Oca, respectivamente; el director do Centro Superior de Hostalería de Galicia, Xosé Paz, y José Ramón Torreira, jefe de la oficina de Extensión Agraria de Padrón. Los pimientos de plata serían en esta ocasión para el restaurante Reina Lupa y Radio Valga, mientras que la sabia y el xoven pementeiros recayeron en Mª Carmen Miguéns y Xosé Ramón Dopazo.

Al precio de 2,50 ? los comensales podían adquirir un plato de barro conmemorativo para degustar unos pimientos, que comenzaron a hacerse a las 8.30. «Son os mellores das nosas hortas, recollidos o día anterior. Algúns picarán e outros non», recalcó uno de los cocineros (todos hombres ayer). Y para los comensales que les supieron a poco, en la carballeira se desplegaba un abanico de menús a base de pulpo, churrasco, empanada, rosquillas y criollos.

EL CORREO GALLEGO, 03/08/08

El primer pimiento de Padrón que no pica.

Un grupo de investigadores de la Consellería de Medio Rural han registrado la variedad «Entenza», de pimientos no picantes.

Investigadores de la Consellería de Medio Rural han registrado la variedad «Entenza», el primer pimiento de Padrón que no pica, informó el departamento de la Xunta.
Esta selección se ha conseguido dentro de un estudio de los niveles de capsicionoides, las substancias responsables del picor, que permitirá en el futuro disponer de métodos que indiquen al agricultor con anticipación el desarrollo del fruto y si sus plantas van a generar o no pimientos picantes.
Ello permitirá corregir este factor, mediante riego, ventilación, abonado o evitando una excesiva maduración.
A pesar de que los más conocidos son los de Padrón, Galicia cuenta con numerosas variedades de pimientos, lo que justifica que, según fuentes de las distintas cooperativas, en el 2006 el 90% de la producción de pimientos en Galicia estaba conformada por variedades autóctonas, muy valoradas en el mercado, lo que permite precios superiores.
Como apoyo a esta realidad y para la mejora de la variabilidad genética de la especie, la Consellería realiza en la actualidad los trámites para el reconocimiento de la Denominación de Origen Protegida (DOP) de cuatro de las variedades, Herbón, Couto, Oímbra y Arnoia.
Los investigadores de Medio Rural trabajan también en la actualidad en el combate de la denominada «enfermedad de la tristeza», que se manifiesta por la languidez de las hojas y que, en ese momento, ya es tarde para salvar la planta.
La línea de investigación desarrollada se basa en el cruce de variedades gallegas con el «Serrano Criollo Morelo», un tipo de chile mexicano.

LA VOZ DE GALICIA, 02/08/08