Con un presupuesto de más de 18 millones de euros, la carretera tiene un plazo de construcción de 20 meses
El Ministerio de Fomento adjudicó de forma definitiva las obras de construcción de la variante de Padrón, una vía diseñada para sacar el intenso tráfico de la N-550 a su paso por el casco urbano padronés. La Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre publicó el pasado sábado el anuncio de la adjudicación en el Boletín Oficial del Estado y, ayer, el delegado del Gobierno en Galicia, dio a conocer la noticia.
Antón Louro mostró su satisfacción por esta gestión de Fomento que, en su opinión, «demostra unha vez máis o firme compromiso do Ministerio con Galicia e coa mellora das súas infraestructuras». Louro destacó las ventajas que esta obra conllevará en materia de ordenación del tráfico y mejora de la seguridad en el casco urbano de Padrón, al tiempo que subrayó que, con esta actuación, Fomento da respuesta a una vieja demanda de los habitantes de este municipio.
De acuerdo con la información facilitada ayer por el delegado del Gobierno en Galicia, las obras de construcción de la variante de Padrón fueron adjudicadas por un presupuesto de 18.176.550,45 euros a la empresa Obras, Caminos y Asfaltos (Ocasa). Tienen un plazo de ejecución de 20 meses.
La actuación consiste en la construcción de 3,2 kilómetros de nueva carretera. El origen de la misma se encuentra en el punto kilométrico 80,7 de la N-550 para acabar en el ramal del enlace de Padrón de la autopista AP-9. La vía constará de dos carriles de circulación de 3,50 metros de ancho, arcenes de 1,50 metros más un carril para vehículos lento con ancho variable. La actuación incluye la construcción de un paso superior y cuatro inferiores, así como 19 obras de drenaje transversal (incluyendo caños y marcos). Además, se construirán los elementos necesarios para el drenaje longitudinal, la señalización, el balizamiento y las defensas de una carretera de estas características.
La adjudicación definitiva de esta obra es una noticia muy esperada, sobre todo por los conductores que a diario tienen que cruzar el casco urbano padronés en el que el tráfico es muy lento debido a los semáforos. De hecho, en un tramo urbano de exactamente un kilómetro, comprendido entre el cuartel de la Guardia Civil, en Iria, y hasta el campo de fútbol, hay exactamente seis semáforos además de un paso de peatones a la altura del Jardín Botánico, lo que condiciona la fluidez del tráfico.
Si a ello sumamos el dato de que cada día circulan por la N-550 más de 20.000 vehículos diarios, según las estimaciones más bajas, el tramo padronés de la vía acaba con la paciencia de muchos conductores que, en muchos casos, optan por tomar atajos (como pueden ser las pistas de canal de derivación del río Sar) para evitar los semáforos de la nacional y las pequeñas retenciones que provocan, sobre todo en horas puntas como pueden ser la una de la tarde o las ocho.
La noticia de la adjudicación de la variante también es muy esperada porque hace años que está anunciada la obra y muchos ya se temían si, debido al actual momento de crisis, se quedaría sin hacer o se pospondría.
LA VOZ DE GALICIA, 02/02/10