El asfalto cuarteado y los numerosos baches llaman la atención en un vial que jamás presentó unas deficiencias que en la actualidad ocasionan un riesgo para vehículos y conductores.
Pero es que además esta situación no solo afecta a Pontecesures. En los términos municipales de Valga y Caldas de Reis ocurre lo mismo e incluso se aprecia que la señalización horizontal está despareciendo influyendo negativamente, sobre todo, en la conducción nocturna.
Es hora que desde la Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia se adopten las medidas oportunas para el inmediato mejorado del firme.
Luis Ángel Sabariz Rolán. Exconcejal de Pontecesures.
Las tres primeras fotografías fueron tomadas en Pontecesures, mientras la última fue tomada en Caldas de Reis.
La borrasca Herminia obligó a suspender la semana pasada todo lo relacionado con las actividades exteriores debido a la complicada situación climatológica por lo que la XXVI Carreira Popular de Pontecesures tuvo que aplazarse hasta este domingo. En el día de ayer más de 800 participantes tomaron la salida en las diferentes categorías que ofrecía la carrera, la cual comenzó a las once de la mañana desde la Plazuela de la localidad pontevedresa. Esta competición tuvo carácter solidario yen esta ocasión se destinó la la Asociación pala la Defensa Ecológica de Galicia todo lo recaudado en inscripciones y patrocinios de la carrera.
Desde las 11 horas se fueron sucediendo las carreras. En la prueba de ocho kilómetros, la más larga, Manuel Lorenzo López, del Club Deportivo Pinarium fue el primero en superar loa meta con un tiempo de 24 minutos 40 segundos, acompañado en el podio por Andrés Cendán del Club Triatlón Compostela y por Martín Lestido del Club Atletismo Sar.
Las atletas más rápidas de la prueba fueron Ana María Santiso del Club Atletismo Ría de Foz, con 29 minutos 54 segundos, seguida por Inés Ramos, del Club Atletismo Sar y por Vanesa Blanco, del Club Atletismo Noia.
El Club Deportivo Pinarium repitió en la pureba de los cuatro kilómetros, con Gustavo Santiago Fernández como ganador de la categoría y Nuria Mejuto Fernández, del SD Compostela Atletismo como la más rápida, aunque fue el Club Atletismo Sar el que se llevó el premio al Mejor Equipo al sumar los resultados de ambas competiciones.
Vilar acogió la singular procesión, que contó con un buen número de ejemplares.
Devoción y tradición se unieron esta mañana en la parroquia valguesa de Cordeiro para celebrar el Día de la Candelaria con la tradicional Procesión dos Lacóns, una de la más multitudinarias que se recuerda y en la que procesionaron un total de doce ofrendas. Desde Vilar salieron diez patas de cerco, a las que se unieron otras dos en Vilarello. Algunos de ellos fueron donados por entidades y asociaciones de Valga, como el Concello, Amigos del Belén o el Baixo Ulla y otros por particulares.
Los lacones fueron portados por vecinos, principalmente mujeres (aunque también por algún hombre) y, las más veteranas, con las cestas sobre sus cabezas, ofreciendo la singular imagen de esta celebración en honor a San Paio, San Roque y San Antón.
Así, los festejos arrancaron a las diez de la mañana en la capilla de Vilar, donde Manuel López Castro se encargó de bendecir las velas y oficiar una misa tras la que arrancó el recorrido por siete aldeas de la parroquia. Una larga salva de bombas anunciaba la llegada de la procesión en cada aldea y, como es costumbre, en algunas, los vecinos engalanaron los altares con camelias, mimosas o naranjas. En Ferreirós, la comitiva, conformada por varios cientos de personas, incluso pudo reponer fuerzas con galletas y dulces acompañados de vino dulce y otras bebidas.
A La llegada a la iglesia de Santa Comba, la procesión rodeó el templo antes de iniciarse una misa en su interior, en este caso oficiada por el párroco Arturo Lores. A su conclusión llegaba otro acto álgido de la jornada, la Poxa dos Lacóns, que se vendieron por precios entre los 40 y los 80 euros, alcanzando una recaudación total de 740 euros.
Comitiva multidunaria
Lo cierto es que Cordeiro vivió una de sus citas más multitudinarias. La coincidencia en domingo, el buen tiempo y la apuesta cada vez más decidida por mantener esta muestra del patrimonio local, hicieron que una gran cantidad de vecinos y familias enteras se decidieran a realizar los cerca de cuatro kilómetros de recorrido y cumplir con tradiciones como pasar por debajo de los tres santos. Fueron algo más de dos horas las que tardaron en completarlo y, en medio, siete paradas en los lugares de Vilar, Vilarello, Moldes, As Eiras, Outeiro, Ferreirós en Beiro. Así, la comitiva, que escoltó a los lacones y los tres santos, estuvo formada por varios cientos de personas —entre ellas el alcalde, José María Bello Maneiro, y los concejales de Cultura y Turismo, Pedro Calvo y Malena Isorna—. Tampoco faltó la música de gaita para amenizar el paso, con el grupo Los Mercenarios.
Tradición del siglo XIX
Valga celebró así una nueva jornada de una de sus fiestas más singulares y que conforman parte de su patrimonio cultural. Fue una grande mortandad entre el ganado, provocado por una peste en el siglo XIX, lo que motivó que los vecinos de este entorno comenzaran a realizar ofrendas a los santos —uno de ellos San Antón, patrón de los animales— en busca de la intercesión divina. Una tradición que perdura en la actualidad.
Tanto es así que el Concello persigue que esta fiesta —organizada por los vecinos de Vilarello y Vilar— sea nombrada Ben de Interese Cultural inmaterial y Festa de Interese Galego, según la Corporación aprobó a través de una moción presentada en una sesión plenaria de marzo del año pasado.
Onte celebrouse a primeira das actividades co gallo do 𝐂𝐞𝐧𝐭𝐞𝐧𝐚𝐫𝐢𝐨 𝐝𝐨 𝐂𝐨𝐧𝐜𝐞𝐥𝐥𝐨 𝐝𝐞 𝐏𝐨𝐧𝐭𝐞𝐜𝐞𝐬𝐮𝐫𝐞𝐬. Numeroso público acudeu á que foi a primeira Casa Consistorial da nosa vila, para escoitar e falar do que é un dos 𝐬𝐢𝐠𝐧𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐢𝐝𝐞𝐧𝐭𝐢𝐝𝐚𝐝𝐞 𝐝𝐚 𝐧𝐨𝐬𝐚 𝐯𝐢𝐥𝐚, a Cerámica Celta e a vinculación coa mesma de Castelao.
A alcaldesa de Pontecesures, 𝐌𝐚𝐢𝐭𝐞 𝐓𝐨𝐜𝐢𝐧𝐨, abreu o acto incidindo na necesidade de poñer en valor a nosa identidade como vila, recuperando a nosa historia e os fitos que nos definen como cesureñas e cesureños.
𝐄𝐥𝐞𝐧𝐚 𝐕𝐢𝐝𝐚𝐥, destacada artista cesureña, falounos da súa experiencia na pintura e como a arte pode mudar as nosas vidas.
𝐅𝐢𝐧𝐚 𝐃𝐢é𝐠𝐮𝐞𝐳, Presidenta da Fundación Ramón Diéguez e neta do fundador, falounos dun soño, o da Universidade Plástica de Galicia (Borobó), no que plasmáronse as inquietudes culturais e políticas da época da man de recoñecidos artistas e magníficos artesáns.Tamén de cómo ese soño sigue en pé grazas ó empeño dos descendentes de Ramón Diéguez.
𝐀𝐥𝐞𝐣𝐚𝐧𝐝𝐫𝐨 𝐏𝐚𝐥𝐢𝐜𝐢𝐨 fixo un exhaustivo percorrido pola orixe, as telleiras, o barro de Dena, a materia prima que acabaría, tamén, formando parte da historia da Calera.
O 𝐏𝐫𝐞𝐬𝐢𝐝𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐝𝐚 𝐅𝐮𝐧𝐝𝐚𝐜𝐢ó𝐧 𝐂𝐚𝐬𝐭𝐞𝐥𝐚𝐨, 𝐌𝐢𝐠𝐮𝐞𝐥 𝐀𝐧𝐱𝐨 𝐒𝐞𝐢𝐱𝐚𝐬, dou unha lección maxistral de como a historia, o arte e a sociedade foron plasmados ó longo dos tempos a través da cerámica e da aposta de Diéguez por plasmar nela unha iconografía galega.
En una imagen de archivo, la sala de vistas de la Audiencia Provincial en Santiago.
La acusada entró en el centro, dijo a la docente «a ti te tengo ganas yo» y después la empujó haciendo que cayese al suelo
La ley reconoció a los profesores —entre otros colectivos— como autoridad para protegerles de los no infrecuentes ataques que sufrían por parte de los padres de sus alumnos. Casos como el ocurrido en un colegio público de Padrón el 1 de junio del 2021 son buen ejemplo de las situaciones que muchos docentes tienen que afrontar en sus trabajos. Ese día, la madre de un alumno entró a las 9.30 horas en el centro educativo y «con ánimo de menoscabar y atentar contra el principio de autoridad representado por la vicedirectora», según recogen los hechos probados de la sentencia, se dirigió hacia la docente y le dijo «a ti te tengo ganas yo», al tiempo que le propinó un fuerte empujón que hizo que la víctima cayese al suelo.
Las consecuencias de la caída no fueron menores, ya que la profesora sufrió lesiones en el hueso sacro y en el glúteo derecho, aunque no fue necesario que se sometiese a tratamiento médico quirúrgico. Eso sí, tardó 35 días en sanar, de los que 14 fueron de perjuicio moderado y otros 21 básico. No le quedaron secuelas.
La agresión fue investigada por el Juzgado de Instrucción número 1 de Padrón y el asunto acabó en un juicio que se celebró en el Juzgado de lo Penal número 2 de Santiago, que condenó a la madre del alumno a un año y tres meses de prisión por un delito de atentado, así como a una multa de 900 euros por otro delito leve de lesiones. Además, la sentencia fija una indemnización por responsabilidad civil por la que la acusada deberá abonar a la profesora 1.900 euros, más los intereses legales.
En aquella primera sentencia no solo se condenó a la madre, sino también a su esposo, que estaba con ella el día que se produjo la agresión a la docente. La sentencia estima como hecho probado que el hombre intentó provocar al director del colegio padronés diciéndole «pégame, vamos pégame», al tiempo que le daba dos o tres veces con la mano en el pecho «sin fuerza» y «sin causarle lesiones ni daño o dolor y sin que conste un propósito de causárselos».
A él lo condenaron en primera instancia a un año de prisión por un delito de atentado, pero la sección sexta de la Audiencia Provincial, la que tiene su sede en Santiago, le ha absuelto a la hora de resolver el recurso de apelación que interpuso el matrimonio condenado. Y es que los magistrados han entendido que el acusado no impidió ningún acto que pudiera estar realizando o que pretendiera llevar a cabo el director del colegio y que tampoco lo agredió, por lo que no cometió atentado.
No se presentaron al juicio y dijeron no saber quién era la víctima
Cuando presentaron el recurso de apelación ante la Audiencia, el matrimonio pidió que se les absolviese alegando que no habían podido acudir al juicio por carecer de recursos económicos para viajar a Santiago y la mujer dijo también que aquel día estaba nerviosa y que desconocía que la docente a la que empujó fuese la vicedirectora del colegio.
Los magistrados rechazan sus argumentos. En cuanto a que estuviese nerviosa, explican que eso podría atenuar su pena, pero no llevar a la absolución. Y, en todo caso, recuerdan que la condena impuesta está en la mitad inferior a la que prevé el Código Penal, por lo que la ven proporcionada. Respecto a que no supiese quién era la víctima, la resolución del tribunal provincial señala que la frase que le dijo a la profesora, «a ti te tengo ganas yo», «permite deducir que conocía a quién se dirigía» y que, además, el hecho de que se presentase en el centro educativo para pedir explicaciones por la sanción que había recibido su hijo indica que pretendía hablar con el personal y que actuó contra la vicedirectora como represalia y sabiendo que era docente y, por tanto, autoridad.