Pontecesures aplica las franjas horarias a los niños, a pesar de tener solo 3.000 habitantes.

Los vecinos de Pontecesures están indignados. Enfadados con la interpretación que su alcalde, el popular José Manuel Vidal Seage, ha hecho del último Boletín Oficial del Estado. Porque el regidor sostiene que, interpretando lo que allí pone, los menores de 14 años tienen que someterse a las franjas horarias, esas que solo les permiten salir una hora al día entre las doce del mediodía y las siete de la tarde. Los vecinos, en cambio, alegan que son un pueblo de menos de cinco mil habitantes y que por lo tanto sus vástagos, al igual que el resto de los residentes, tienen libertad horaria. Sin embargo, desde el pasado jueves están siendo apercibidos por agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local si los menores salen de casa a horas que no son las permitidas. Para intentar aclarar la situación, el alcalde ha hecho una consulta a la Delegación del Gobierno con el fin de que esta determine si está pecando de exceso de celo.

«Pontecesures é un concello de menos de cinco mil habitantes e o BOE pon ben claro que non temos franxas horarias», explica una vecina. Ella misma ha enviado una consulta a la Xunta, para saber si los menores tenían que sufrir estas restricciones horarias, «e respondéronme que non», añade. Lo hizo después de que el jueves varias madres se le quejaran de que habían sido apercibidas por los agentes municipales, de que sus hijos no podían estar en la calle fuera del horario establecido. «O venres estaban diante do supermercado chamándolle a atención á xente e levan así toda a semana. Non multan, pero chaman a atención», lamenta. «Nos están llamando la atención e increpándonos constantemente. Me choca que si el decreto es para toda Galicia, aquí se lo salten a la torera», explica otra residente. «Los vecinos estamos indignados, el Concello no quiere entrar en razón. Esta mañana le llamaron la atención a mi hijo y le hicieron llorar», añade otro padre.

¿Y que dice el alcalde? «Hai moitas dúbidas sobre a interpretación do BOE, que cambia cada cinco minutos. A interpretación que fixo este Concello é que os nenos seguen a ter franxas horarias», explica el regidor. Porque asegura que el documento incluye dos órdenes diferentes, una de las cuales modifica a la otra.

Y ahí es donde, en su opinión, se establece que la libertad horaria no es para los menores, aunque residan en municipios de menos de cinco mil habitantes. Para salir de dudas, Vidal Seage ha recurrido a la Delegación del Gobierno, donde han planteado la cuestión por escrito, «e estamos á espera de que nos respondan», añade el alcalde de Pontecesures. «Moito me temo que nunca chegaremos a saber de verdade o que quixo dicir o Goberno con esta orde», concluye el regidor.

La Voz de Galicia

Unos 30.000 usuarios subieron gratis al tren en Pontecesures, Catoira y Padrón por la falta de interventores.

Según los datos facilitados por Renfe Comercial sobre los viajeros en 2019 en las tres estaciones, resulta que el número total de subidas y bajadas fue de 102.647. Las bajadas fueron 66.703 mientras que, sorprendentemente, las subidas computadas fueron solo de 35.994.

Obviamente, es imposible esta desproporción y el número real de subidas fue muy superior al facilitado. Como en las tres estaciones no se despachan billetes, la ausencia de interventores en muchos trenes motiva que, en muchas ocasiones, los usuarios que subieron al tren lo hicieron gratis. Además hay que añadir que tampoco se computaron las bajadas en Pontecesures, Catoira y Padrón de viajeros procedentes de otras estaciones del trayecto A Coruña/Vigo en las que no se expiden billetes (Cerceda, Órdenes, Arcade…) ni tampoco las subidas y bajadas de los usuarios que circulan entre las tres poblaciones cuando el tren no trae interventor.

Por ejemplo: Es imposible que en en Pontecesures bajen procedentes de Vilagarcía 4.574 viajeros y solo suban para dicha ciudad 2.073. Tampoco es posible que bajen procedentes de Santiago 9.687 viajeros y sólo suban para la capital de Galicia 3.439.

Con todo, los usuarios crecen. En 2018 hubo un total de 97.286 subidas y bajadas (35.448 y 61.838, respectivamente). Resaltamos el número de bajadas por ser el más representativo. En Pontecesures pasamos de 18.355 a 19.047; en Catoira de 21.554 a 24.355 y en Padrón de 21.929 a 23.301. No obstante, el dato reflejado de las subidas nos perjudica desde el punto de vista estadístico y por eso es necesario recordarlo siempre ante la opinión pública.

Podemos concluir que los usuarios crecen día a a día (habría que añadir los bonos mensuales y los bonos 10 tambien utilizados por viajeros de estas villas) y que la potenciación del ferrocarril por la vía convencional es fundamental. Todo ello a pesar de contar con deficiencias en los andenes, que motivan incomodidades a los usuarios, y de la ausencia de paneles informativos en Catoira y en Pontecesures.

Consideramos que desde las administraciones se debe apoyar con decisión el uso del tren de proximidad por razones económicas, ecológicas y se seguridad. Esperemos que la anunciada electrificación de este tramo de vía convencional, fundamental para la continuidad del servicio, no se quede solo en buenas palabras.

Por último, decir que esperamos que, a medida que se va superando la situación que sufrimos por la pandemia del COVID-19, vuelvan a circular TODOS los trenes que circulaban pora la vía convencional antes de la declaración del estado de alarma.

Luis Ángel Sabariz Rolán
Exconcejal de Pontecesures

Propostas dos socialistas ceureños pola crise da pandemia.

O grupo municipal socialista de Pontecesures ven de rexistrar no concello unha serie de medidas para paliar os efectos da crise provocada polo COVID-Q19:

✅ Incentivos económicos para os establecementos que tiveron que pechar durante o confinamento, ou ben viron moi reducida a súa facturación.
✅ Adquisición de equipos de desinfección portátiles por ozono para a súa utilización en vehículos e instalacións municipais, taxis e negocios locais que así o requerirán.
✅ Suspensión durante un ano da taxa de terrazas, e paralelamente permitir o aumento dos espazos públicos para a súa colocación sen custe adicional.
✅ Creación dunha páxina web con información dos establecementos, así como promover a venda online.
✅ Adquisición de e-bonos para as familias máis desfavorecidas sin acceso a internet.
✅ Campañas de dinamización do comercio e hostelería locais. Pódese contemplar dar a coñecer os seus servizos, ou no caso do comercio, palntexar unha feria de stocks cando se poida levar a cabo.
✅ Dotación a todos os establecementos de xel hidroalcohólico.
✅ Actividades de formación dixital para a poboación.
✅ Incrementar a capacidade da rede wifi.

Consideramos que estas medidas e outras que se puideran levar a cabo, deberían ser discutidas e consensuadas entre as forzas políticas e outros representantes sociais, na procura dun plan que permita sair a Pontecesures canto antes da grave situación económica provocada pola pandemia.

Socialistas de Pontecesures.

A Xunta enviou 3.391 máscaras ao Concello de Pontecesures.

A Xunta, a través da Delegación Territorial de Pontevedra, leva entregadas aos quince concellos das comarca de Deza, Tabeirós e Caldas 65. 900 unidades de protección individual nos distintos envíos que se veñen de efectuar dende a plataforma loxística dende o inicio do decreto do estado de alarma. Desde esa data, en total, a Xunta repartiu entre os concellos da provincia máis de 419.324 unidades de protección para loitar contra a pandemia.

Segundo informou o delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, José Manuel Cores Tourís, a comarca de Caldas enviáronse un total de 20.020 luvas, 14.200 máscaras, 776 batas e traxes de protección e 298 produtos de desinfección, entre outros elementos.

Por concellos os envíos feitos nesta comarca foron como sigue: Caldas recibiu un total de 4.984 unidades; Catoira 3.831; Cuntis 3.413; Moraña 4.166; Portas, 3.682; Pontecesures 3.931, e Valga un total de 5.686.

Por su parte, en las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes, se han recibido de 21.460 luvas, 13.65 máscaras, 774 batas e traxes de protección e 298 produtos de desinfección, entre outros elementos. Por concellos, os envíos totales de unidades de protección son: Agolada recibiu 3.879; Dozón 2.213; Lalín 5.798; Rodeiro 3.883; Silleda 4.658; Vila de Cruces, 4.868; A Estrada 6.990 e Forcarei que recibiu 3.932.

Todo este material de protección está sendo repartido por persoal dos distintos municipios entre profesionais, locais, empresas e as distintas veciñanzas.

A medida que se apliquen as distintas etapas da desescalada irán recibiendo máis material, informan.

El Correo Gallego

El rey gallego de la tumbona tiene su ejército de hamacas parado en Canarias.

Corrían los años sesenta cuando, con 18 años, Carlos Castaño puso los pies en las playas de Torremolinos. Era la primera vez que salía de su Padrón natal y estaba fascinado. Pero ni los bikinis de las extranjeras, ni los edificios, ni las paellas lograron deslumbrarlo tanto como el que en aquel momento le pareció el invento del siglo: las tumbonas a pie de playa. Volvió a Padrón con la imagen de aquellas hamacas en la cabeza y, aunque nunca había pisado la playa de A Lanzada, se imaginaba montando unas así en ese arenal del que tanto hablaban sus vecinos. En 1988, por fin, decidió ir más allá de su oficio de hostelero, construir con sus manos y madera reciclada de la construcción unas tumbonas y plantarse con ellas en el arenal de O Grove, donde, por cierto, tuvo que explicarle a la alcaldesa para qué eran aquellos asientos. Fue el primero en montar hamacas en Galicia. Así inició su emporio turístico y así se ganó ser el rey de la tumbona. Treinta años después, con un pie en la jubilación, sigue imbatible e imparable, aunque el coronavirus quiera fastidiarle.

Durante años, Carlos Castaño centró su actividad empresarial en Galicia. En sus tumbonas se tomaba el sol en los arenales más visitados de las Rías Baixas, desde el sanxenxino Silgar a la playa América, el litoral de Baiona y, por supuesto, A Lanzada. Su empresa ofrecía hamacas, sombrillas, hidropedales y también se encargaba de los chiringuitos. Hubo veranos en los que contrató a 120 personas. Pero llegó un momento en el que Castaño y los suyos decidieron dar un paso atrás en Galicia -aunque siguen regentando chiringuitos en Silgar y A Lanzada-. Querían probar suerte en algún sitio donde la temporada fuese más larga. Así, hace seis años, dieron el salto a Canarias, donde hasta la llegada del coronavirus todo fueron buenas noticias.

Carlos Castaño estaba trabajando tanto en cuatro playas del centro de Lanzarote como en tres arenales del sur de Tenerife. En total, tenía desplegadas 1.300 hamacas y 700 sombrillas, que se quedaron allí paradas tras el estado de alarma. En marzo, estaban registrando una ocupación del 60 %, aunque a estas alturas sería del 75 %. Teniendo en cuenta que cobran cuatro euros por el alquiler diario de cada hamaca y otros tantos por el de la sombrilla, las cuentas de lo que dejaron de ganar están claras.

El futuro, optimista pese a todo

Pero Castaño tiene claro que lo peor no son estos meses, sino el futuro: «Penso que a recuperación en Canarias vai ser máis lenta, porque o seu turismo é en grandísima parte estranxeiro. Sei de cadeas de hoteis que xa non prevén abrir ata 2021», dice.

El parón en la actividad ha llevado a Castaño a solicitar dos ERTE para sus empresas. Y, actualmente, sus esperanzas empresariales residen bastante más en el verano gallego que en el canario. Aquí ,el pasado año, regentó tanto los chiringuitos y servicios de A Lanzada como los de Silgar. Este año, en teoría, tocaría volver a concursar para ver si se los adjudican o no. Pero de momento no hay noticias de esas convocatorias. Si se le pregunta a Castaño, cree que en Galicia el verano de las Rías Baixas seguirá rugiendo, aunque sea bajo mínimos. «En Silgar, por exemplo, vai seguir habendo xente porque aquí moitos veraneantes teñen a súa casa e van vir. Creo que os servizos se poden adaptar para traballar con seguridade. Toca ser optimistas», indica mientras, aprovechando el confinamiento, le da retoques al museo de la tumbona que construye en su casa a imagen y semejanza de todo lo que hizo en su vida: con su imaginación, sus ganas y sus propias manos.

La Voz de Galicia