El triple asesino de Valga llega a los juzgados de Caldas entre insultos y custodiado por numerosos agentes de la Guardia Civil.

José Luis Abet Lafuente entró en sede judicial con el rostro descubierto.

Insultos, agentes de la guardia civil, cinturón de seguridad con cordón policial y más insultos. Todo a las puertas del Juzgado número 2 de Caldas. La llegada de Jose Luis Abet Lafuente, que ayer apretó el gatillo para asesinar a tiros en Valga a Sandra Boquete Jamardo, su segunda exmujer, de 39 años; a la hermana de esta, Alba, de 27 años; y a la madre de ambas, María Elena Jamardo, de 58 años, estaba prevista para las 10 horas aunque finalmente se produjo a las 10.40 entre más improperios y gritos.

Crimen machista en Valga

El homicida confeso de Valga, un hombre con carácter brusco y dominante

Serxio González

El autor del triple crimen machista en Valga despacio en coche oficial y de paisano en la calle peatonal del juzgado, rodeado de agentes que custodiaron el utilitario negro hasta estacionarse a tres metros de la entrada. La distancia necesaria para que el rostro de Abet fuese público. El volumen de los insultos siguió subiendo, igual que las menciones a los hijos de acusados, que presenciaron el asesinato de su madre a manos de su padre.

Los niños que quedan huérfanos en Valga no podrán olvidar el drama, pero sí recuperarse, según los psicólogos

Abet sigue prestando declaración y no está previsto que se conozca la resolución judicial sobre su ingreso en prisión provisional hasta última hora de la mañana.

Conmoción en Valga

Tres mujeres muertas, dos niños huérfanos, varias familias rotas y océanos de desolada indignación. Este es el trágico legado que José Luis Abet Lafuente dejó ayer en Valga. El autor del triple crimen había compartido una vivienda en la aldea de Carracido, ubicada en la parroquia de Cordeiro (Valga), hasta su ruptura -se divorciaron en  enero del 2018-, momento en el que el individuo se fue a vivir con su madre al municipio coruñés de Ames.

El asesino de Valga, en el momento de salir de las dependencias judiciales de Milladoiro

Fue allí, en Carracido, a las puertas de la casa familiar, donde Abet perpetró el triple crimen ante los ojos de sus dos hijos, unos pequeños de 4 y 7 años que esperaban para ir al colegio y acabaron presenciando una inconcebible pesadilla.

El triple crimen de Valga deja dos huérfanos, de 4 y 7 años, que presenciaron lo ocurrido

s. gonzálezj. romero

Horas antes de ser asesinada, Sandra Boquete, la exmujer del homicida de Valga, había recibido un agresivo mensaje en Facebook. Un individuo acusó a la mujer de quererse apropiar de la vivienda familiar, de manchar su nombre y de «ir de víctima».

La Voz de Galicia

Hoy matar sale barato.

Horror. Es la palabra más repetida en Valga. Estamos horrorizadas por los tres asesinatos cometidos. ¡Cómo pudieron ocurrir! Desde la presidencia de la Asociación de Mulleres Rurais Albor, de Valga, que representa a más de cien mujeres de este municipio, pedimos una justicia más dura. Sí, hoy es blanda. Sale muy barato asesinar a madres, a hermanas, a hijos. Sí, sale muy barato asesinar. Sin más.

Consideramos imprescindible que los asesinos y los que son potencialmente asesinos tengan miedo de lo que a ellos les puede ocurrir si cometen una barbarie como la que sucedió ayer en nuestro municipio. Los medios de comunicación tienen también la responsabilidad de difundir las condenas dictadas por los jueces contra estos individuos. Con la publicación de estos datos, estos criminales se pensarán dos veces cometer actos despreciables y deleznables, impropios de la raza humana.

Las mujeres, por nuestra parte, hemos de exigir que nos valoren. No podemos ser «cosas» al servicio de los maridos, de los novios, de las parejas de hecho. La sociedad debe ser consciente de que «cosificar» a la mujer genera una interpretación errónea de un derecho que solo son capaces de atribuirse hombres con maldad, que disponen de nosotras precisamente porque para ellos no somos más que una silla o un jarrón. La «cosificación» no entiende de responsabilidades. Da igual que trabajemos en casa las 24 horas del día o seamos autónomas, empresarias o empleadas. Los homicidas no distinguen nada. Solo buscan saciar su instinto. Las mujeres también hemos de protegernos entre nosotras, porque, aunque sea muy doloroso decirlo, a veces no nos ayudamos ni valoramos.

Todo Valga está hoy en estado de shock. Creo que también Galicia. La gravedad de lo acontecido no entiende de fronteras. Si es así, esperemos que las autoridades tomen conciencia (a veces no la tienen) y adopten medidas, duras medidas, contra el maltrato y la violencia de género.

La Voz de Galicia

El autor de la barbarie de Valga entra en los juzgados de Caldas entre gritos de «asesino» y «desgraciado».

José Luis Abet llegó fuertemente escoltado.

El autor confeso del triple asesinato machista de Valga pasó la noche en los calabozos de la Guardia Civil de Pontevedra tras confesar que mató a tiros a su exmujer, a su exsuegra y a su cuñada. Un triple asesinato machista que conmociona a toda España.

Un centenar de personas le esperaban esta mañana a las puertas de la sede judicial de Caldas de Reis y lo recibieron a gritos de «asesino» y «desgraciado».

Por el juzgado, especializado en Violencia sobre la Mujer, han pasado ya desde primeras horas testigos del atroz crimen, que han declarado ante la jueza. En los próximos minutos, también pasará a disposición judicial el triple asesino.

Los hechos

Un divorcio de mutuo acuerdo en enero de 2018 acabó ayer en tragedia con un triple asesinato machista en la localidad pontevedresa de Valga. José Luis Abet Lafuente, de 45 años, acabó a tiros con la vida de su exmujer, Sandra Boquete Jamardo, de 39, en presencia de los dos hijos menores de ambos. El asesino confeso aprovechó que su exmujer abría el portalón para salir con el coche, ya que los menores se iban al colegio, y se introdujo en la finca. Allí la mató, al igual que hizo con su excuñada Alba Boquete, de 27, que llegó a la finca entonces y María Elena Jamardo Figueroa, de 58 años y madre de ambas.

El hombre realizó varios disparos con un revólver contra cada una de las víctimas y será la autopsia la que concrete cuántos, si bien algunos vecinos afirman que escucharon «varias ráfagas».

Tras asesinar a las tres mujeres, abandonó el lugar y se desplazó a Bertamiráns, en el Concello de Ames -cerca de Santiago-, donde residía con sus padres tras el divorcio. Fue allí donde este hombre, padre de otro hijo -fruto de una relación anterior-, contactó con la Guardia Civil para confesar el triple crimen, aunque posteriormente se habría acogido a su derecho a no declarar.

Faro de Vigo

La sinrazón de la violencia machista siega la vida y trunca los planes de futuro de tres mujeres.

José Luis Abet Lafuente disparó su revólver a bocajarro contra su expareja Sandra, su exsuegra María Elena y su excuñada Alba. Truncó la vida de tres mujeres queridas en su entorno de amistades y de trabajo.

Sandra Boquete, exmujer del asesino, (a la izquierda) y su hermana Alba (en la derecha).

El asesinato de Sandra Boquete, de su hermana y de su madre a manos de su expareja José Luis Abet Lafuente conmocionó ayer al tranquilo lugar de Carracido, en Cordeiro (Valga). Las tres mujeres eran muy queridas tanto en su entorno familiar y de amistades como en sus trabajos. Sandra se casó hace diez años con José Luis y con él tuvo dos hijos que ahora tienen 4 y 7 años. El proceso de separación se inició hace dos años y el divorcio se consolidó el pasado mes de enero. Sin embargo las relaciones con su ex nunca fueron buenas en los últimos tiempos. Sandra ejercía de auxiliar administrativo desde hace más de diez años en la empresa padronesa Stac. Algunos de sus compañeros de trabajo la defendían como una persona “amable e bondadosa”. La firma, tras conocerse el trágico suceso, emitía ayer un comunicado de rechazo absoluto a lo acontecido y de apoyo y petición de respeto a los allegados de las víctimas. Un mensaje en el contestador de Stac, así como un comunicado, anunciaban que las oficinas permanecían cerradas durante todo el día en señal de duelo por su compañera asesinada.

Tres vidas truncadas

Sandra mantenía una íntima relación con su hermana Alba, a la que llevaba doce años y que vivía con sus padres en el lugar de A Devesa, en Campaña, a pocos minutos en coche de su casa de Carracido. Alba, al igual que Sandra, era muy conocida. De hecho ambas participaron durante tiempo en las actividades culturales que se realizan en la parroquia en momentos señalados. La joven de 27 años era logopeda de profesión y era la titular de un gabinete de esta especialidad ubicado en el vecino municipio de Pontecesures. Además trabajaba activamente con la asociación vilagarciana Amencer-Aspace. Familiares de los niños a los que ella atendía la recuerdan como una “chica muy jovial y encantadora” con un “tratamiento exquisito” con todos los pequeños. De hecho la propia asociación vilagarciana emitía un comunicado tras conocerse el suceso de condena. “La violencia machista golpea a la familia de Amencer-Aspace. No hay palabras para decir la gran persona y profesional que se va”, reproducía el colectivo en sus redes.

La tercera víctima de José Luis Abet Lafuente era su exsuegra, María Elena Jamardo. Ella vivía con su marido y su hija en su casa de campaña y mantenía una relación fluida con Sandra a la que visitaba prácticamente todos los días. Su marido, que ahora se queda sin su mujer y sin sus dos hijas, es muy conocido en la localidad porque trabaja en el departamento de Obras del Concello. Así lo confirmó el propio alcalde, Bello Maneiro, que apuntó que él al asesino nunca lo había tratado, pero sí conocía a las víctimas.

Diario de Arousa

Valga decreta tres días de luto oficial y se convocan actos de repulsa en toda Arousa.

Cientos de personas se concentraron ayer a las puertas del Concello en repulsa al triple crimen de Cordeiro.

Con evidente angustia e incluso lágrimas entre los asistentes la Corporación Municipal de Valga celebró ayer por la tarde una sesión extraordinaria en la que se decretaron tres días de luto oficial por el asesinato de sus tres vecinas: Sandra, Alba y María Elena. Un pleno triste que recordaba al vivido este mismo año, en el mes de marzo, cuando la víctima fue María José Aboy Guimarey asesinada a tiros por su marido, también de Valga.

La edila de Igualdade de la localidad, Begoña Piñeiro, fue la encargada de leer el texto consensuado por los tres grupos políticos presentes en la Corporación y ante un salón de plenos abarrotado de vecinos consternados.

Su intervención empezó, de hecho, recordando el asesinato de María José, y durante la misma enfatizó “a máxima condena a este asasinato machista e a todas as formas de violencia contra as mulleres, xa sexa psicolóxica, económica, física ou sexual, e que supoñen un atentado contra a dignidade e integridade das mulleres”.

En el comunicado apelaron al “traballo conxunto entre institucións e cidadanía para erradicar a barbarie que representa a violencia machista, unha lacra que afecta de xeito dramático á nosa sociedade e expresión máxima da desigualdade de xénero”. El Pleno también puso a disposición de todos los valgueses los servicios del CIM y animó a denunciar a todas aquellas mujeres que se sientan víctimas de violencia machista.

Diferentes puntos de Arousa y de Galicia, instituciones y asociaciones, han convocado para la jornada de hoy y también de mañana concentraciones de repulsa a un crimen que engrosa las largas cifras de asesinatos por violencia machista en 2019.

Diario de Arousa