Dos gasolineras en Pontecesures.

Cuando hablamos de gasolineras de repostaje de vehículos terrestres la oferta en la banda sur de la Ría de Arousa se dibuja escasa, y demasiado concentrada. Especialmente en el Baixo Ulla, con una única estación de servicio en Catoira (Baiuca, Repsol), inaugurada en 1968, y dos en Pontecesures, al pie del puente hacia Padrón, también de la década de los 60 y con bandera de Repsol, y la independiente abierta en 1996 en el límite con Valga. Este último, el único de los once concellos de la zona sin punto de repostaje comercial, si bien con tres muy cerca rodeándolo en sus municipios vecinos.

La Voz de Galicia

Valga critica que el CODI no sea prioritario ni para la Diputación, ni para el PSOE.

El equipo de gobierno de Valga valoró ayer la sentencia que da la razón a la Diputación de Pontevedra en el conflicto abierto con este Concello por la financiación del centro ocupacional para discapacitados, más conocido como CODI. Argumenta que acata esa decisión judicial, aunque no la comparte, y recuerda que esta no es firme. «Coñecemos as leis, pero estas son interpretables e por iso imos seguir loitando para que o CODI non quede sen financiación», argumenta el equipo que preside el popular José María Bello Maneiro.

Para el gobierno local, lo único que deja claro la sentencia del TSXG es que hubo «un cambio de criterio na Deputación dende que pasou a estar gobernada polos socialistas». Sostiene, además, que el hecho de que este centro estuviera financiado durante años por la entidad provincial no era una ilegalidad y que la sentencia argumenta «que a Deputación pode seguir financiando o CODI se o considera prioritario». Claro que, argumentan en el Concello, «está claro que para a señora Carmela Silva e para os socialistas de Valga nin o CODI, nin os seus usuarios, nin o persoal que os atende son prioritarios».

El gobierno local acusa al PSOE de mentir cuando dice que financiar el CODI sería injusto y discriminatorio para el resto de concellos de la provincia porque «ningún Concello xestiona outro centro das características do CODI». Y critica que siempre se hable de discriminación positiva y de mejorar la vida de los grupos que sufrieron discriminación, «¿acaso as persoas usuarias do CODI de Valga non o precisan?».

En el Concello de Valga tienen claro que «non nos renderemos» y que seguirán trabajando y luchando por los intereses de los vecinos. «Se temos que reclamar á Xunta, reclamaremos, porque para nós por enriba das cores políticas están as persoas», concluyen.

La Voz de Galicia

Comuneros de Padrón convierten un basurero del monte Lapido en mirador.

La Comunidade de Montes Veciñais en Man Común de Lapido, en Padrón, está adecentando en sus terrenos un mirador con vistas al río Ulla y al monte Castro Valente. La entidad, integrada por 75 comuneros de seis aldeas de la parroquia de Carcacía, quiere convertir un espacio que estaba siendo usando de forma no autorizada como basurero en un área de ocio para vecinos y foráneos, una vez que el mirador está ubicado a un margen de la carretera AC-242.

Los trabajos están financiados con una subvención de la Consellería de Medio Ambiente, así como con fondos europeos del programa Feder. Tienen un coste de 12.000 euros y, por ahora, llevan invertidos unos 6.000, en la limpieza y preparación del terreno, incluido el depósito de tierra negra; colocación de bancos y mesas, además de toda una valla perimetral. De esa inversión total, los comuneros tienen que pagar el 21 % de IVA.

Queda pendiente sembrar césped y plantar algunos árboles, como roble autóctono y abedul, e instalar papeleras y un cartel informativo sobre las vistas al río Ulla y al monte Castro Valente, según explican desde la directiva de la comunidad de montes de las aldeas de Cruxeiras, Sobrerrivas, Casal, Lamas, A Igrexa y Xoane, todas ellas en Carcacía.

«Cando empezamos a mover o terreo, todo era lixo», cuenta la presidenta de la entidad, Ana Belén Castro, quien habla de que «é importante que a xente respecte este espazo, sobre todo que non se tire lixo». Incide en ello porque, en plenas obras para el mirador, ya hubo quien dejó basura depositada en el espacio que ocupa y que está situado de lado de una carretera lo que, sin duda, contribuye a que se dé este mala práctica.

La presidenta de los comuneros explica que para la entidad «é un esforzo facer este tipo de actuación», teniendo en cuenta además que no dispone de medios para mantener el área en buenas condiciones. Por ello, la comunidad ya contactó con el Concello de Padrón para que colabore en este sentido y se ocupe, por ejemplo, de vaciar las papeleras. Incluso se plantean instalar un contenedor de basura, para todos los restos que puedan quedar para quien decida comer o merendar en el espacio.

Por otra parte, la entidad está con los trabajos de limpieza de una franja de seguridad en el entorno de las aldeas y con la recuperación de otros espacios de monte ya que, como explica la presidenta, «hai que aproveitar o que hai». En esta línea, otro de sus proyectos futuros es adecentar un camino que, desde el mirador, baja hasta el río Ulla, para recuperar y poner en valor toda una zona de gran belleza natural.

La Voz de Galicia

Los Diéguez, fuerza familiar en la verbena.

El padre y dos hijos gemelos triunfan desde Padrón con su trío musical, al que se sumará otro hermano.

Los Diéguez de Herbón, en Padrón, son una familia de verbena. Moncho Diéguez y sus hijos gemelos Samuel y Valdo son músicos y cantantes del trío Unión y Fuerza y el hermano mayor, Danny, del dúo Salsa. El padre, de 60 años, lleva desde los 17 vinculado a grupos de música, una pasión que transmitió a sus hijos. Con los gemelos de 23 años formó hace seis el trío Unión y Fuerza, que este verano triunfó en las verbenas gallegas y que espera seguir haciéndolo y más con la incorporación del hermano mayor, Danny Diéguez, de 28 años, que deja el grupo Salsa para unirse a su familia.

El germen musical es Moncho, que a los 17 años era el cantante del grupo original de Unión y Fuerza. Desde ese primero hubo muchos más, como la orquesta Finisterre o Los Españoles, antes de retirarse en Capitol. Fue la primera de las tres retiradas de las que habla Moncho, que luego formó el dúo Óbice Capital, en el que estuvo 14 años antes de fundar el trío, que se convirtió en toda una revelación en el mundo de las verbenas.

«Os comezos foron bos, pero duros; empezamos pouco a pouco e fomos subindo e subindo», asegura el padre. Su hijo Valdo añade que «sentímonos aceptados polo público moi rápido», a lo que su hermano Samuel precisa que «cando montamos o grupo nunca pensamos que íamos chegar a onde chegamos e que nos sentiríamos tan queridos polo público», algo que agradecen.

De hecho, hay verbenas a las que asisten todos los años desde que empezaron, como en Muxía; otras que hasta cambiaron el día de la fiesta para poder contar con su presencia, como en Ribadumia y hasta hay novios le consultan la agenda antes de poner la fecha de la boda.

Este verano estuvieron en numerosas verbenas de la comarca, después de actuar en las fiestas de Pascua de Padrón. «Todos pensan que a Pascua é unha gran promoción pero a mellor publicidade é o traballo de cada día e en calquera sitio», asegura el padre. Los gemelos reconocen que estar en la Pascua fue «especial».

Moncho se considera «autodidacta» mientras que sus hijos estudiaron canto y piano y, en un caso, también trombón. «Eu non quixen estudar un instrumento para non estar ata os 60 anos no escenario», dice el padre que, en cambio, ahí está con esa edad.

Vivir encima del escenario

Al trío musical aún le quedan actuaciones este año pero, de cara a la próxima temporada, harán una incorporación muy especial: Danny Diéguez deja el grupo Salsa y entra en la familia de Unión y Fuerza aunque, realmente, «sempre estivo vinculado ao grupo», explican sus hermanos.

Viven encima del escenario una parte del año (en 2017 el trío tuvo 140 fechas) y el resto, trabajan. Danny lo hace todo el año en una cerrajería de Padrón y Samuel y Valdo en empresas de la comarca, de seis a ocho meses, al tiempo que cumplen con sus compromisos y preparan la nueva temporada. «É duro, pero se te organizas chegas a todo», aseguran.

«Os meus fillos en canto ven xente diante non hai quen os pare», afirma el padre en alusión a la pasión que le ponen a su trabajo sobre los escenarios. Así lo deben ver también sus fans, que hasta crearon grupos de wasap. «Cando imos a unha festa, nós somos uns máis do pobo», aseguran.

En cuanto a trabajar en familia, está claro que les encanta. «Eu teño subido ao escenario enfadado con meu irmá pero na segunda ou terceira canción xa me pasou», cuenta Valdo. «Meu pai sempre quere ter a razón pero ás veces tamén se equivoca, aínda que leve toda a vida nesto», añade entre risas Samuel.

De cara al próximo año ya tienen cerrado casi la mitad del verano y, con uno más en el grupo, esperan que su espectáculo «siga funcionando como ata agora». Para ello, empezarán casi de cero con el escenario, de modo que lo ampliarán, cambiarán el equipo de sonido, repertorio… Todo para que el público perciba «frescura e non solo que enriba do escenario hai unha persoa máis da que había antes», explica Danny. Y para ser fieles a su máxima: «facer festa e que a xente o pase ben».

Y cuando los Diéguez se suben al escenario pueden decir bien alto que son una familia, como así lo afirman muchos grupos del sector, pero ellos lo son de sangre.El nombre se remonta a los orígenes de Moncho

La elección del nombre del trío musical que fundaron hace seis años no es una casualidad: Unión y Fuerza fue el grupo en el que debutó como cantante Moncho Diéguez con 16 o 17 años y en el que también estaban los hermanos Joaquín y Antonio Dopazo, Moncho (batería), José (teclista) y Manolo. La fotografía del grupo original fue tomada en las peñas del monte Santiaguiño de Padrón, el mismo lugar que eligió el actual trío de Unión y Fuerza, que la próxima temporada dejarán de ser tres con la esperada incorporación del hermano mayor, Danny.

La Voz de Galicia

Campaña acoge el memorial Xosé Ramón Santos

Un circuito habilitado edn los alrededores de las instalaciones deportivas de Campaña será el escenario este domingo de la 13ª edición del eslalom Memorial Xosé Ramón Santos, prueba que es puntuable para el campeonato gallego de la categoría.
Las verificaciones arrancan a las 9:00 h. de este domingo y a las tres de la tarde está perevisto que comiencen los entrenamientos previos a las dos mangas oficiales que se celebrarán. La organización repartirá 930 € en premios emre los seis primeros clasificados y habrá trofeos para los primeros de cada agrupación.