Salva o Tren expone sus argumentos en Portas que colisionan con la Senda Verde.

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La plataforma «Salva o Tren» explicó ayer en Portas sus argumentos sobre la defensa del tren de cercanías y su rechazo a la Senda Verde que plantean los concellos de Vilagarcía, Caldas y Portas. Al acto, celebrado en la Casa da Cultura, acudieron una veintena de personas.

El portavoz del colectivo, Fernando Gómez, insistió en su tesis de mantener el transporte público a su paso por municipios pequeños como Portas por ser importante para colectivos como universitarios y personas mayores.

Asimismo, hizo hincapié en la importancia de mantener la viabilidad de la unión con Vilagarcía y recuperar el apeadero de Rubiáns, al encontrarse a unos trescientos metros del Hospital de O Salnés y por ser clave, a su juicio, en la comunicación con Vilagarcía y su puerto.

Salva o Tren mantiene que se podía ejecutar la unión con Pontevedra «a coste cero y sin ningún impedimento técnico» y considera que uniría la comarca de Caldas con la capital de la provincia».

Esta charla, apoyada en una proyección sobre las «ventajas» del mantenimiento del tren de cercanías, se produce días antes de que tenga lugar el pleno de Portas en el que la corporación municipal votará por el apoyo a la puesta en marcha de la Senda Verde en la vieja línea entre la estación de Portas y Vilagarcía.

Vía Verde

Este proyecto de Vía Verde choca frontalmente con la opción de recuperar el servicio de transporte ferroviario que se clausuró en 2008, de ahí que ahora los concellos apuestan más por el turismo medioambiental con el paseo para peatones y ciclistas, más que por la recuperación de la línea ferroviaria, ocho años después, a pesar de la insistencia de este colectivo y sus numerosas entrevistas con las administraciones.

Faro de Vigo

El Pontecesures busca 15.000 euros para no morir de sano crecimiento.

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El Náutico hace un llamamiento para cubrir las necesidades básicas de un club con más de 200 licencias, mientras apunta a otra temporada de dominio en el piragüismo base gallego ganando la primera prueba infantil.

El Náutico Pontecesures arrancaba el domingo la Liga Galega de Infantís como terminó su edición anterior. Imponiéndose en la clasificación masculina, en la que partía como defensor del título autonómico, con casi 700 puntos de ventaja sobre el segundo clasificado, el Ciudad de Pontevedra: 3.757 frente a 2.979. Y acabando segundo en el cuadro femenino -en el 2015 finalizó la temporada subcampeón- con 2.064 puntos, muy cerca del ganador Ciudad de Pontevedra, con 2.088, y el As Torres-Romaría Vikinga tercero en discordia a unos ya muy lejanos 1.333.

De regreso del embalse de Pontillón do Castro el club cesureño sufría un gravoso percance, al caérsele un K-1 de su convoy, destrozado sobre el asfalto en lo que supone un quebranto de unos 1.000 euros para las maltrechas arcas de la entidad. Su presidente, Ángel Barreiro, lanzaba ayer una petición de ayuda a quien quiera oírlo, ya sea desde las instituciones públicas o desde la empresa privada más allá de los muchos pequeños negocios locales que colaboran con el club con las pequeñas aportaciones que están en sus manos. «Hai pouco estropeóusenos un motor da lancha de adestramentos. Movémonos con furgonetas de dez anos, porque non temos sequera os 8.000 euros que nos tocaría poñer para poder acceder á liña de axuda para a compra de vehículos da Deputación. E estamos aproveitando barcos de hai 30 anos do antigo Universitario de Santiago, o que supón competir con entre 3 e 4 quilos máis respecto aos modelos modernos». Un estado de cosas convertido en el pan nuestro de cada día, que no impidió al Náutico Pontecesures los éxitos apuntados en categoría infantil a nivel autonómico antes apuntados, ni generar en su cantera las figuras de dos de las kayakistas con mayor futuro en el panorama español, y con alta probabilidad, internacional, las vigentes subcampeonas de Europa Júnior de K-2 1.000 Camila Aldana Morison y Raquel Dacosta. Un trabajo que ha reunido en la entidad del Baixo Ulla a una de las dos canteras más extensas del piragüismo gallego, con más de 200 licencias federativas la pasada temporada.

Y todo ello, «cunhas condición económicas de supervivencia», manejando un presupuesto anual de unos 40.000 euros cuando «necesitariamos uns 15.000 euros máis para funcionar minimamente», dice el presidente del Náutico Pontecesures. Barreiro considera «irrisorias» las ayudas recibidas de las administraciones públicas, y exclama que «é preciso que dunha vez se apoie economicamente a este club, para dignificar o enorme traballo que fai cada día con medios moi precarios».

La Voz de Galicia

Carreteras limitará la carga de los camiones que circulan por Padrón.

Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia estudia limitar la carga de los camiones y otros vehículos pesados que circulan por el centro de Padrón y que serían desviados por la nueva variante. Así lo explica el alcalde padronés, Antonio Fernández, quien asegura que el Concello solicitó en distintas reuniones con responsables del organismo de Fomento la restricción de circulación de vehículos pesados por el casco urbano que, casi un año después de la apertura de la variante, se sigue produciendo.

Así, Carreteras se plantea no dejar pasar por el centro de la villa los vehículos de cuatro ejes y si otros camiones de reparto como pueden ser los de supermercados, suministro de gas butano y similares. No obstante, después de Semana Santa habrá una reunión con representantes del organismo de Fomento, del Concello de Padrón y de la Dirección General de Tráfico, a la que también se recabará su opinión, para adoptar cualquier medida de forma coordinada.

La próxima semana se cumple un año de la apertura al tráfico de la llamada variante de Padrón, una vía de algo más de tres kilómetros diseñada para sacar el intenso tráfico de la carretera N-550 a su paso por el centro de la villa.

Así ha sucedido, pero en menor medida de lo esperado, sobre todo en lo que se refiere a vehículos pesados, muchos de los cuales siguen circulando por el casco urbano y por otros núcleos próximos como el de Iria-Flavia, tal y como denuncian los vecinos de uno y otro punto.

El hecho de que para acceder a la variante en Pazos haya que circular por una rotonda y subir un tramo de cuesta muy empinada es la razón que apuntan algunos para explicar la razón por la cual camiones y tráileres siguen optando por pasar por el casco urbano, sobre todo en sentido Pontevedra.

Otros apuntan el hecho de que, para circular por la variante, hay que tomar un desvío y, en cambio, para seguir por la vía N-550 hay que ir recto y de ahí la comodidad para muchos conductores de no dejar esta carretera para desviarse a una segunda.

La Voz de Galicia

La aventura de repostar de noche.

Solo siete gasolineras abren las 24 horas; algunas lo hacen para que no les roben.

Ojo con quedarse en la reserva cerca de la noche. Si un vecino de la comarca de Pontevedra o de Arousa tiene que salir disparado de madrugada y a su vehículo no le queda combustible las pasará canutas para poder repostar. Salvo siete estaciones de servicio, el resto actúan cual Cenicienta; a partir de la medianoche -muchas incluso antes, a las once o las diez- desaparecen por completo del mapa. Dicen desde el sector que no es rentable abrir. Lo afirman incluso quienes dan ese servicio. ¿Por qué lo hacen, entonces? Por dos motivos: para mantener las gasolineras con personal en las horas sin luz y evitar robos y porque consideran que es una prestación que, aunque deficitaria en algunas ocasiones, es de recibo que exista. «Somos un pouco como as farmacias, eu penso que debemos abrir», dice un empresario del ramo de Pontecesures.

Empecemos por Pontevedra. ¿Dónde se puede repostar? Si uno vive en la ciudad puede respirar más o menos tranquilo. Tiene dos opciones relativamente cercanas. Están abiertas tanto la gasolinera ubicada en la Avenida de Lugo -en la salida hacia Ourense- o el área de servicio de Placeres. Eso sí, desde esta última recuerdan que están en una situación precaria, en concurso de acreedores y, por lo tanto, no saben hasta qué momento darán servicio. De momento, sí atienden. La de Placeres es la única de toda la zona en la que, en horario nocturno, hay un trabajador que sirve el combustible.

¿Qué ocurre con los alrededores pontevedreses? Ahí la cosa está peor. Las únicas gasolineras abiertas 24 horas están en Caldas, una en Godos y la otra en Carracedo -esta última lo hace con una máquina dispensadora, sin personal que cobre-. Ni siquiera funcionan las de la autopista AP-9. Tampoco hay servicio en municipios como Poio, Marín, Bueu, Cuntis, Moraña, Portas, A Lama, Cotobade, Barro, Campo Lameiro, Ponte Caldelas o Vilaboa. En Sanxenxo sí hay una, llamada Anduriña y ubicada en Vinquiño, que abre por la noche. Pero lo hace únicamente en los meses de verano. «En xullo, agosto e setembro si que hai movemento e compensa abrir. Pero o resto do ano non merece a pena, así que pechamos ás once da noite», señalan desde el negocio.

El caso vilagarciano

¿Y en Arousa? La situación es curiosa, sobre todo, en Vilagarcía. Con casi 37.500 habitantes y siendo la octava ciudad gallega, no tiene ni una sola estación de servicio abierta por la noche. Si un vilagarciano necesita repostar a deshora no le queda más remedio que conducir, si es que le queda algo en el tanque, hasta Cambados o Godos. Pongamos un ejemplo: un vecino que viva en plena zona de Ravella, en el centro de la urbe, tendrá que peregrinar con su coche, como mínimo, cinco kilómetros hasta el lugar caldense de Godos.

Por raro que suene, están mejor otros concellos arousanos que Vilagarcía. Por ejemplo, Cambados sí tiene gasolineras abiertas. Dos nada menos. Permiten repostar de noche tanto la de Corvillón como la que está ubicada en la vía rápida a su paso por el término cambadés. Encima, también se mantiene abierta la otra estación de este mismo vial, ubicada en Meis. Los que sí o sí deben cambiar de municipio para repostar son los de Ribadumia, Meaño, O Grove, A Illa o Vilanova. Y en la misma situación están los de Catoira y Valga. Se salvan los de Pontecesures. En el caso de Cambados, hay algo llamativo. La estación de Corbillón, además de ser punto de referencia para repostar de noche, es un mítico lugar de compra de bebidas y comida para después de las noches de fiesta. En la localidad cambadesa son muchos los que cuentan las colas que hicieron para coger un bocata de madrugada en este local o para comprar pan fresco el día de primero de año. La estación cambió de dueños hace un año. Y el nuevo gerente señalaba ayer lo siguiente: «Imos abrir de noite ata o verán, despois botaremos números e quizais cerremos. Non o sabemos de momento».

Más allá de las dos de Pontevedra, el otro par de Caldas y Cambados, hay una séptima gasolinera abierta en Arousa y Pontevedra. Está a orillas de la N-550, en Pontecesures. Desde ella, llamada A Palmeira, habla Rubén García, su gerente: «Non merece a pena abrir, claro que non. Poden venderse entre 500 e 600 litros nunha noite e iso é moi pouco. Pero temos que dar o servizo, eu creo que si. Ademais, é a única forma de que non nos rouben».

Sus palabras, el hecho de que abrir y tener personal en el interior de las instalaciones -atienden por ventanilla- sea un escudo antirrobos lo repiten en más sitios. Lo dicen en Cambados. Y lo certifica Silvia Charlín, desde la gasolinera CKM de Godos, en Caldas: «Abrimos por la noche no por el trabajo que hay, que es muy poco, sino por la seguridad. Si esto se queda vacío entran y te rompen todo. Lo vemos en gasolineras que cierran», dice. Por rentabilidad, señalan desde todos lados, no habría ni un solo surtidor disponible por las noches.

La Voz de Galicia

Solo Vilanova y A Illa ofrecen Wifi gratuito y en abierto a los vecinos.

Hoy en día es casi imposible vivir sin conexión a Internet. En el trabajo, en casa y en la calle, las obligaciones y el ocio obligan a estar permanentemente conectados, y el acceso libre y gratuito a la red todavía sigue siendo una quimera en la mayor parte de la comarca.

Solo los concellos de Vilanova y A Illa ofrecen este servicio, aunque está lejos de ser perfecto. En los demás municipios hay Wifi gratuito en instalaciones públicas, pero fuera de allí son contados los lugares donde se puede captar la señal. Por ejemplo, en la plaza del Campo da Feira de Mosteiro (Meis) la antena instalada en la casa de la cultura permite acceder a una web que, previa inserción de usuario y contraseña, da opción a navegar gratis por Internet durante una hora. Así que no es raro encontrarse a gente dentro del coche con un portátil o, si el tiempo lo permite, en un banco de la plaza para coger la señal pública.

Los alrededores del consistorio de Vilagarcía en Ravella o el paseo marítimo de A Compostela son otros de los puntos en los que puede saltar la señal de los «edificios municipales» en los dispositivos móviles, pero el éxito de la navegación no está garantizado.

Un operador público

En este terreno, Vilanova se lleva la palma. Fue el primer concello, hace ya casi nueve años, que apostó claramente por esta tecnología y hoy, prácticamente, da cobertura a sus 34 kilómetros cuadrados. El Concello funciona como un operador autónomo que cuenta con 86 antenas distribuidas desde Baión a San Miguel y desde Tremoedo a Corón, sin olvidar el casco urbano. Su señal en abierto ofrece cuatro megas simétricos por usuario, que utilizan una media de once mil máquinas durante las mañanas de un día laborable, tantas como habitantes tiene el ayuntamiento.

Pero en este cómputo no solo caben usuarios de Vilanova. Con esta señal tienen Internet vecinos de A Illa, Vilagarcía, Cambados, Meis, O Grove y hasta alguno de Ribeira y de Caldas, según informan desde el centro de procesado de datos, situado en A Pantrigueira (San Miguel).

Los servicios municipales reconocen que «todo es mejorable» y que puede haber puntos en los que falla la conexión, pero sostienen que la calidad y la cobertura del servicio es más que óptima.

Su dinero le ha costado al Concello. La inversión inicial para instalar Wifi en Vilanova rondó el medio millón de euros y la intención del gobierno local es seguir mejorando el servicio mediante la implantación de fibra óptica «que ya la tenemos en el pueblo, en el polígono de Tremoedo y en Corón», según explicaba ayer el alcalde, Gonzalo Durán.

En el Ayuntamiento han recurrido a subvenciones para sufragar la infraestructura y, a mayores, debe afrontar unos gastos fijos de mantenimiento anuales. Por el uso de la señal, le paga a la compañía R 2.500 euros al mes. Además de la conexión libre y gratuita, Vilanova también ofrece Wifi cerrada, con clave y cifrada, solo para vecinos de la localidad que cumplan una serie de requisitos.

Para espacios abiertos

A Illa es otro de los concellos que ofrece Wifi gratuito, aunque las características son distintas. Inicialmente para poder conectarse era necesaria una clave que facilitaban en el Concello, pero ahora ya no es necesario. El sistema de «Wifi Plazas públicas» funciona gracia a diez antenas distribuidas por el término municipal. La señal está concebida para espacios abiertos aunque, con suerte, también se puede captar bajo techo. El gobierno local va a continuar con esta apuesta en el 2016. Con cargo a 4.000 euros del presupuesto municipal se van a instalar nuevas antenas con el fin de cubrir las zonas oscuras que todavía quedan en el territorio insular, según informa el alcalde, Carlos Iglesias.

11.160

Usuarios

Ayer a las 10 horas. En verano se alcanzan los 18.000

2.500 ?

Canon mensual

Que paga el Concello de Vilanova a la operadora R

86

Antenas

Distribuidas por todo el término municipal
Vilagarcía, en 35 puntos y con escasa potencia, y en Cambados estudian ampliar la cobertura

Vilagarcía, la cabecera de la comarca en población, está lejos de universalizar el servicio. El Concello dotó de Wifi gratuito a todos sus centros públicos, pero la potencia se queda corta en cuanto hay una concentración de gente, caso del pabellón de deportes los días de partido o el auditorio cuando hay una actuación que atrae mucho público. Según la relación que facilita Ravella, hay Wifi libre y gratuito en los dieciséis centros culturales y en otras diecinueve instalaciones municipales como el consistorio, la escuela de música, las bibliotecas, el museo del ferrocarril, la plaza de abastos de Vilaxoán, las escuela taller y otras. En el recinto de Fexdega también existe infraestructura disponible durante los eventos.

En Cambados el abanico de posibilidades para acceder a Internet de forma gratuita es más pequeño. Solo es posible en la biblioteca municipal Luis Rei, en las casas de la cultura y en el centro social de A Mercede. El gobierno local está estudiando la posibilidad de ampliar la cobertura, pero todo va a depender del coste económico, según explica el portavoz, Xurxo Charlín.

Zonas rurales

En O Grove se cuentan con los dedos de una mano los edificios que dispone de Wifi, una cobertura mucho peor que otros concellos menores en población, caso de Ribadumia. Allí también hicieron hace años un intento por llevar la señal a todas las parroquias, pero el proyecto se quedó a medias. Hoy solo da cobertura al núcleo de Barrantes y a la casa de la cultura de Ribadumia y el Concello está en fase de revisión del servicio dadas las anomalías que se han detectado en el sistema, según informan desde el gobierno local.

En programa Repoblar impulsado por la Diputación de Pontevedra posibilitó implantar el Wifi en algunos núcleos rurales de la comarca, caso de Armenteira (Meis). Y en Meaño disponen de red gratuita en el centro social de Dena, en la casa de cultura de Meaño, en la plaza de abastos, en el centro de mayores y en las escuelas infantil y de música.

En los concellos situados al norte de la comarca, el escenario es similar. En Pontecesures intentaron extender la señal aprovechando la ventaja que ofrece su distribución geográfica y poblacional. Se colocaron varias antenas pero acabaron estropeándose. Las maltrechas instalaciones todavía permiten conectarse a Internet gratis en la plaza del coche de piedra.

La Voz de Galicia

Rueda aparca posibles mociones de censura en los concellos para activar la renovación del PP.

Según explica el nuevo líder de los populares de Pontevedra, cambiará los equipos en aquellos municipios que obtuvieron un mal resultado electoral.

Sin perder casi un minuto, apenas 24 horas después de ser elegido nuevo presidente provincial del PP de Pontevedra, Alfonso Rueda citó ayer en la sede del partido a su comité de dirección, integrado por 13 personas, con el objetivo de activar cuanto antes la «renovación» del partido, especialmente en aquellos lugares en los que se consiguió un mal resultado en anteriores elecciones y en donde es «urgente» engrasar y reparar la maquinaria electoral de los populares.

Ante la celebración de las próximas elecciones autonómicas (y a la espera de lo que pueda pasar con las generales), Rueda explicó que su objetivo es «que el partido esté preparado» para la cita con las urnas. «Tenemos que empezar cuanto antes la renovación territorial, establecer un calendario de actos, un sistema de trabajo, no queremos perder el ritmo», añadió.

Rueda también dejó en un segundo plano las posibles mociones de censura que auguraba su antecesor, Rafael Louzán, en algún concello de la provincia, priorizando esta renovación del partido. Aunque no las descartó por completo, dado que reconoce que «la situación de desgobierno en algunos concellos parece clara», Rueda insistió en que prefiere analizar primero la situación del partido con su comité de dirección, los coordinadores comarcales y el propio Louzán; antes de entrar a valorar posibles mociones en los ayuntamientos. Adelantó que el trabajo de dirección del partido se desarrollará muy a menudo fuera de la sede provincial, con visitas y reuniones a las diferentes comarcas.

Además de Rueda, el comité de dirección lo integran el secretario general Cores Tourís; la vicepresidenta, Nidia Arévalo; la vicesecretaria, Elena Muñoz, siendo los coordinadores de área Luisa Piñeiro en Organización, Jorge Cubela en Participación y Nuevo Canales de Comunicación; Acción Electoral, José Juan Durán; Mar, Luis Aragunde; Medio Rural, Miguel Dubois; Política local, Marián García, Economía y Empleo, Nava Castro; y Relación con los Afiliados, José Benito Suárez Costa.

Faro de Vigo