La proliferación de especies invasoras en el Ulla preocupa a pescadores y mariscadores.

Un cangrejo con un ejemplar de "black bass".

Pescadores y mariscadores que operan en el Ulla, ya sea capturando anguila, lamprea o solla entre Carril y Pontecesures, o bien extrayendo almeja y berberecho en Os Lombos do Ulla, alertan nuevamente de la proliferación de especies foráneas que son una amenaza.

Se trata de especies exóticas, como se denomina a las que se establecen fuera de su rango de distribución nativo o autóctono, y de especies invasoras, que es como se las considera cuando inciden negativamente sobre la zona en la que se asientan.

Ya se advirtió de esta circunstancia en ocasiones anteriores, pero la preocupación no deja de crecer. Sobre todo ahora que, con la desescalada tras el confinamiento por el coronavirus, parece constatarse que esa amenaza foránea sigue en aumento, tal y como atestiguan los pescadores de río.

La almeja asiática ( Corbicula fluminea) y el cangrejo rojo americano ( Procambarus clarkii) son dos de esas especies que acechan a la flora y la fauna del principal aporte fluvial de la ría de Arousa.

En el primer caso, se trata de un bivalvo que empieza a colonizar el curso bajo del Ulla. Y si no hace mucho el investigador Fernando Cobo, director de la Estación de Hidrobioloxía Encoro do Con (Vilagarcía), daba cuenta de su presencia entre la playa fluvial de Vilarello (Valga) y Pontecesures, ahora los pescadores deportivos resaltan que empiezan a verse importantes poblaciones aguas arriba, muy significativas a la altura de Herbón.

En cuanto al cangrejo rojo americano, durante la pasada campaña de la lamprea los valeiros que opera en aguas de Pontecesures ya informaron de su nutrida presencia. Y ahora los pescadores deportivos recogen el testigo de las quejas y lamentaciones, tras detectar nuevos ejemplares en las últimas semanas.

Puede recordarse que la almeja asiática llegó al estuario del río Miño a finales de los años ochenta y se instaló con rapidez y facilidad en dicho cauce fluvial. Pudo haberse introducido en el Ulla cuando, hace unos años, la Xunta de Galicia acometió trabajos de regeneración de bancos marisqueros en este río arousano aportando arena extraída en el estuario del Miño.

A juicio de Fernando Cobo, aquello propició la expansión de este bivalvo asiático de agua dulce, capaz de formar densas poblaciones de individuos como las detectadas en Herbón, y capaz, también, de modificar el lecho fluvial, cubriéndolo de conchas como las detectadas por los pescadores en las últimas semanas.

El cangrejo rojo americano, también conocido como cangrejo de las marismas, es una especie oriunda del Noroeste de México y la zona central y sur de Estados Unidos que ha logrado extenderse por amplias zonas de América, África, Asia y Europa.

Por su resistencia y su impacto en los hábitats que ocupa, figura en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras del Ministerio de Medio Ambiente, donde se hace constar que «tolera un amplio rango de condiciones ambientales, incluyendo aguas salinas y llegando a soportar periodos temporales de desecación en los que permanece en cuevas que excava como refugio y que también utiliza cuando hace frío».

Llegado en 1974

Parece que llegó a España en 1974, cuando se introdujo en las Marismas del Guadalquivir con fines comerciales. Más tarde se destinó al comercio, el consumo local y se usó como cebo. En 1978 se localizaba ya en la Albufera de Valencia y un año después en el Delta del Ebro. En Medio Ambiente apuntan que «su expansión se ha debido, además de a las sueltas ilegales, a su capacidad de dispersión por las cuencas, llegando a recorrer hasta 3 kilómetros diarios».

Respecto a su expansión por Galicia, puede recordarse que en 2010 ya se sabía de su presencia en los ríos Xallas y Umia; mientras que cinco años después se localizaba en la laguna de una antigua cantera en Barro.

Faro de Vigo

El mayor empleador de la zona, el Grupo Quintá, tras buena parte del subidón de la regulación temporal

El enorme crecimiento de la cifra de trabajadores afectados por expedientes de regulación temporal de empleo en la comarca al cierre de mayo, 763, un +13,9 % respecto al mes de abril, encuentra su origen en Valga. La entrada en ERTE de las firmas que constituyen el Grupo Quitá, matriz de Extrugasa, explica esos 605 nuevos asalariados del municipio del Baixo Ulla que han pasado a percibir parte o la totalidad de su remuneración del Estado en espera de que la actividad económica recupere el pulso. No en vano, más de la mitad del volumen de negocio del principal grupo empresarial por número de empleados de la comarca se sustenta en la exportación a más de 30 países.

La Voz de Galicia

El PP y Valga Viva aprueban el plan parcial para la ampliación de Extrugasa.

El asunto fue debatido en un pleno telemático celebrado el viernes.

Un pleno extraordinario celebrado de forma telemática ha servido para aprobar de forma definitiva el plan parcial de suelo urbanizable S-104, un documento que «ordea unha bolsa de solo industrial emprazada na zona de O Forno-A Torre» a fin de permitir «a ampliación das instalacións da empresa Extrugasa». Es esta, recuerda el gobierno municipal, «a maior industria de Valga tanto en superficie como en número de empregados, e un dos motores económicos de toda a comarca». Esta modificación urbanística contó con los votos a favor del gobierno municipal (PP) y del concejal de Valga Viva. 

Según explica el ejecutivo que encabeza Bello Maneiro, «o PXOM aprobado en 2010 xa clasificaba como solo urbanizable delimitado de uso industrial esta bolsa de terreo, lindeira coas actuais instalacións de Extrugasa, co obxectivo de posibilitar a súa expansión». Con este plan, «establécese unha ordenación compatible coas necesidades da empresa, delimintado o solo industrial así como un aparcadoiro, un novo sistema viario e espazos libres e zonas verdes, que exercerán como pantalla visual e acústica entre a actividade industrial e a zona residencial» más inmediata.

El alcalde, Bello Maneiro, explicó en el pleno que es obligación del Concello «favorecer e non poñer paus nas rodas» de las empresas que apuestan por la localidad. En ese sentido, insistió en que en estos momentos «Valga ten cero metros de terreo industrial público», por lo que en los últimos años «dúas empresas que estaban ubicadas aquí marcharon fóra do noso Concello». «Un concello sen un polígono empresarial non é un concello con futuro. Valga necesita un parque empresarial e vai telo para favorecer que os empresarios invistan no municipio e creen emprego», sentenció.

El PSOE se abstuvo.
La aprobación de este plan parcial salió adelante con la mayoría absoluta del gobierno del PP y el voto a favor de Valga Viva. El PSOE se abstuvo. Su portavoz, María Ferreirós, explicaba ayer que la ampliación del área industrial “podería ser mellor plantexada, máis ambiciosa, máis sostible e con menor impacto sobre as familias que alí teñen vivendas e parcelas. Seguramente incluso con máis metros cuadrados de superficie ampliable que a que se acaba de aprobar”. La abstención de los socialistas se debe a que consideran que el plan “pode impactar de xeito negativo á zona do Forono, deixando a moitas vivendas  nun contorno extremadamente cercano á área industrial”. Además, Ferreirós califica el desarrollo urbanístico de los últimos 25 años de “caótico” y “exemplo de mala xestión”. Esta es la primera de las cuatro ampliaciones planteadas.

La Voz de Galicia y Diario de Arousa

El lamento de una vecina de Pontecesures: «Podo ir a Tui, pero non a Padrón a ver a meu pai».

Padrón y Pontecesures, municipios limítrofes entre las provincias de A Coruña y Pontevedra, están pendientes del levantamiento de restricciones para que sus vecinos puedan moverse libremente de un lado a otro del puente sobre el río Ulla, como hacen de toda la vida. Son muchos los de Pontecesures, e incluso Valga, que se desplazan a la capital del Sar a realizar gestiones, desde comprar en los establecimientos comerciales locales hasta ir al banco, dentista o notario, entre muchas otras. Y también desde Padrón se mueven al otro lado del río para hacer compras en la localidad de Cesures.

Cuando quede sin efecto esa restricción de moverse entre provincias, sea primero o no entre municipios limítrofes, «vai ser un alivio moi grande», según opina María del Carmen Magán Pérez, vecina de 47 años de la aldea de Infesta, en Pontecesures. «Non ten ningún sentido o que está pasando», añade. «Eu podo ir a Tui, pero non podo ir a Pazos, en Padrón, que está ao lado, a ver a meu pai», lamenta.

Controles policiales

En su caso, habitualmente se desplaza a Padrón a comprar en la plaza de abastos y en tiendas del pueblo, pero también va al dentista y al fisioterapeuta. «Pese a estar todo a un paso, non podo ir nin a comprar nin a ver a familiares», cuenta. Lo mismo le pasa y le seguirá pasando a su hermano mientras no se levante la restricción de moverse entre provincias. Él reside en Rois y, en todo este tiempo, no pudo ir a Cesures a ver a su madre, con la que reside María del Carmen Magán.

«Está mal feito e será un alivio que o cambien», asegura la vecina de Pontecesures, que está deseando poder ir a Padrón sin problemas, como muchos otros vecinos.

En su caso, también acaba de acompañar a su hijo a recoger sus pertenencias en la residencia universitaria de A Coruña, ciudad en la que estudia, para lo que se movió con un justificante.

La vecina también está yendo con su madre una vez al mes a una consulta médica en Santiago, pero siempre con justificante e «así vas máis tranquila», dice María del Carmen Magán, que recuerda que levantar la prohibición de cambiar de provincia en municipios limítrofes será necesario para que los jóvenes de Pontecesures y Valga que estudian en Padrón puedan acudir mañana al instituto, en el caso de los cursos que están autorizados.

Durante el tiempo de prohibición de cambiar de provincia, el puente de Cesures está siendo objeto de controles policiales, en los que se está parando a conductores y preguntándoles el motivo del desplazamiento.

El BNG pidió en Madrid que esa limitación de movimientos se levantara ya en municipios limítrofes de distintas provincias, algo que también tiene solicitado el Concello de Padrón.

La Voz de Galicia

AGRADECEMENTOS O «SHOW DE LOS PAYASOS»

Dende o Concello de Pontecesures queremos agradecer o xesto solidario de «El show de los Payasos», que da man de Elias realizou unha vez mais, e xusto nestes tempos mais complicados que estamos pasando, o reparto de 91 lotes de alimentos para paliar na medida do posible as carencias das familias mais necesitadas de pontecesures, Padron e Valga. tampoucopodemos esquecernos deses 11 empresarios, unidos ós outros 16 que fixeran posible o reparto anterior, que co seu donativo contribuen á solidaridade tan necesaria nestes tempos. ¡¡¡ Graciñas de corazón !!!

La Casa Consistorial de Pontecesures sigue cerrada al público.

La Administración local se va incorporando poco a poco a la nueva normalidad. Después de dos meses con los consistorios cerradas a cal y canto, desde esta semana ya empezaron a levantarse las restricciones y a partir de este lunes volverá a haber atención al público en la mitad de los ayuntamientos de la comarca, aunque con limitaciones como la cita previa y dándole prioridad a las gestiones telemáticas.

El más madrugador fue Ravella, que ya abrió sus oficinas de forma presencial el 27 de abril: lo hizo sin el sistema de cita, pero no se descarta recurrir a esta modalidad con el fin de mejorar la operatividad interna. Desde el punto de vista de la movilidad, se habilitó una única entrada al consistorio por la puerta principal del edificio y la salida está en un lateral, a través de la puerta de la policía local; además, en el patio central de la zona de oficinas se organizaron pasillos con vallas y señalización en el suelo para facilitar el distanciamiento social a la hora de guardar turno y se colocaron mamparas y dispensadores de gel hidroalcohólico para desinfectar las manos.

En Cambados, la atención al público se retomó el pasado lunes, aunque de forma muy limitada. La oficina del registro y recepción situada en la planta baja actúa de barrera de contención para evitar que los ciudadanos accedan de forma libre a la planta superior. Solo pueden hacerlo aquellos que tienen cita previa en algún departamento ya que se da prioridad a las consultas telefónicas y telemáticas, por cuestiones de seguridad y porque buena parte del personal sigue teletrabajando. Se han instalado dispensadores de gel, mamparas y se están reordenando espacios para evitar aglomeraciones.

El de Vilanova es otro de los concellos en los que ya hay personal trabajando in situ y se atiende al público, como ocurre también en Ribadumia, A Illa y Catoira. Los isleños son atendidos tras un mostrador protegido por una mampara que corta el paso a la zona de oficinas y no pueden hacer uso de asientos ni otras zonas comunes. En Catoira es necesaria cita previa para acceder al edificio, al menos hasta el día 25; allí también se han instalado dispensadores de gel, mamparas y, como en todos los espacios públicos, se han intensificado los protocolos de limpieza.

Otros ayuntamientos han decidido esperar un poco más para avanzar en la fase de desescalada y hasta mañana no retomarán la atención presencial. Es el caso de Meaño, donde lo harán en horario de 8.30 a 14.30 horas, estableciendo una franja de 12 a 13.30 horas de atención preferente a las personas mayores, y la atención al público estará limitada a una persona por puesto, salvo excepciones. El gobierno local aconseja utilizar el sistema de cita previa para evitar aglomeraciones y esperas en el exterior del consistorio.

En Meis, los funcionarios regresan a sus puestos, pero solo atenderán al público mediante el sistema de cita previa. Para el resto de las gestiones, los vecinos deberán recurrir a la vía telemática.

Mañana también seguirán cerradas hasta nuevo aviso las puertas en las casas consistoriales de O Grove, Valga y Pontecesures. El ejecutivo grovense tiene previsto organizar a lo largo de esta semana el sistema de cita previa para, a partir del lunes 25, poder iniciar la atención al público de forma presencial y escalonada, empezando por la apertura del registro. Entre tanto, los vecinos deberán limitarse a las vías telemáticas para hacer sus gestiones. En Valga no ponen fecha para la reapertura y recuerdan que el servicio presencial solo se ofrece para cuestiones urgentes e inaplazables, mediante cita previa y sin poder acceder al interior del consistorio.

Estas restricciones obligan a los funcionarios y a los administrados a reciclarse a marchas forzadas para poder adaptarse a la nueva situación, pero de todo se puede sacar una lectura positiva. Al menos así lo plantea el alcalde de Pontecesures, Juan Manuel Vidal Seage, quien afronta la coyuntura derivada del estado de alarma como una oportunidad para modernizar la Administración local.

«Isto vai servir para darlle un pulo á revolución tecnolóxica dos concellos, e vai mellorar a axilidade na relación cos cidadáns, porque a un golpe de clic pódese facer calquera trámite. É un acicate, é un cambio de paradigma no traballo: o virus fixo meter o turbo na Administración electrónica», apunta el regidor.

La Voz de Galicia