El deportista de Valga Eloy Iglesias, invidente de 53 años, tomará la salida este domingo en la media maratón que une Vigo con Baiona.

«Da noite á mañá, aos doce anos, quedei cego. ? fodido, pero había que levantarse e plantar cara á vida». Eloy Iglesias, vecino de Valga de 53 años, encontró en el deporte la manera de hacer frente a las consecuencias de un accidente con una bengala en su infancia: pérdida total de la visión, amputación de una mano y de un dedo de la otra. Primero fue el ciclismo y ahora el atletismo. El domingo tomará la salida en la Vig-Bay.

Asegura que el deporte siempre le ha ayudado a superar la tragedia que le tocó vivir de niño. «Penso que de non ser por iso tería sido deportista igual, pero si que é certo que me axudou moito, é unha forma de despexar a cabeza e sentirte ben», comenta. Durante muchos años encontró ese impulso para seguir adelante en el ciclismo. Compitió en la modalidad de tándem e incluso estuvo a las puertas de acudir a los Juegos de Atlanta 1996. Poco después de esa cita lo dejó y hace un año comenzó a ir a carreras.

Llevaba corriendo más tiempo, pero para los fines de semana tenía otra distracción. «Gustábame máis ir a pescar, pero facíao cun amigo que morreu dun cancro e deixeino», relata con tristeza. Tuvo claro, no obstante, que tenía que buscar otro quehacer para seguir con la actividad incesante que siempre le ha caracterizado. Y entendió que era el momento de las carreras. «Hai moito tempo que saio cos meus cuñados e un amigo e eles xa competían. De feito os dous que se van turnar para facerme de guía xa correron antes a Vig-Bay», indica.

El hecho de necesitar guías lo afronta con naturalidad: «? o que toca», acepta. Partiendo de que es un requisito que siempre tiene que estar presente, Iglesias asegura que cuando corre se siente uno más. «Imos agarrados, como de ganchete, e xa está. Hai que estar moi agradecidos á xente que che axuda e unha vez que contas con eles, non hai ningún impedimento para facer deporte polo feito de ser cego, eu podo correr como calquera», reivindica.

Para Iglesias va a ser su segunda media maratón tras haber corrido meses atrás la de Vilagarcía. Es la única referencia que tiene en cuanto a tiempo, si bien confía en poder rebajar aquel registro. «Fixemos un 1.36, pero José ?uno de los guías? non tivo un bo día. El teno feito en 1.28 e por aí esperamos andar», comenta. También es consciente de que la dureza de la Vig-Bay es mayor. «Aquela era bastante plana e teño entendido que está é máis complexa. Aparte de que seica vai chover e vai ir moito vento».

Durante las últimas semanas, Eloy se ha preparado a conciencia para llegar en las mejores condiciones posibles, entrenando duro y más horas de lo que acostumbra. «Se normalmente adestro unha horiña catro días á semana, nestas últimas foron moitos días dúas horas», revela. Habla de «moito sacrificio», pero mucho menos que el que hacía cuando se dedicaba al tándem. «Aínda o collo de vez en cando, pero agora estou máis centrado en correr», añade.

Pese a que su idea es hacer el mejor papel posible y mejorar su marca, el atleta tiene una prioridad perfectamente definida: pasarlo bien. «O reto é primeiro rematala e logo facer un bo papel, pero sobre todo disfrutar», valora. Siempre que va a correr es habitual que la gente se interese por su participación y le pregunte al respecto. «Fálase moito entre os participantes e que o que pasa ao lado veña e che diga que é un pracer correr ao lado de xente coma ti é un orgullo». Por eso anima a todos los invidentes a hacer deporte: «Que non teñan medo».

La Voz de Galicia

Usuarios del tren se quejan de la falta de revisores en la línea A Coruña-Vigo.

Consideran que se está causando un grave perjuicio a las pequeñas estaciones y apeaderos al no computarse sus billetes y el uso del servicio.

Pese a las reiteradas quejas sobre la ausencia de revisores en el tren en la línea que une A Coruña con Vigo, la situación se mantiene. Así lo constató esta misma semana un vecino de Pontecesures que, los días 2, 3 y 4 de abril se subió al ferrocarril a la 6.37 horas, encontrándose con que no había ningún interventor, lo que permitió a los viajeros que subieron en Padrón, Pontecesures y Catoira, cubrir el recorrido totalmente gratis.

Los usuarios consideran que a estos pequeños apeaderos y estaciones se les está causando un perjuicio «enorme a efecto de computar los viajeros». Además de las consecuencias recaudatorias negativas para Renfe, los usuarios apuntan que «no se tiene en cuenta en las estadísticas el número de viajeros que suben o bajan en los apeaderos, lo que puede acabar provocando la supresión del servicio». Insisten en que «de poco vale tener más y más usuarios si viajan gratis y no consta en ningún sitio».

Los vecinos de Pontecesures que critican este tipo de acciones de Renfe, esperan que «se tenga en cuenta esta ausencia de interventores en el cómputo anual de viajeros y que tengamos este personal en todos los trenes que pasan por nuestra estación». Mantienen que desde «muchos sectores de la sociedad se defiende la potenciación del tren de proximidad por razones económicas, medioambientales y de seguridad; para ello, hay que corregir esta deficiencia de inmediato».

Las críticas hacia este tipo de situaciones que se registran con demasiada frecuencia llevan denunciándose sin éxito desde hace tiempo.

Faro de Vigo

Cientos de peregrinos desafían a la lluvia y avanzan por el Ullán camino de Santiago.

Los albergues de Valga, Pontecesures y Padrón experimentan un repunte de usuarios.

A pesar de las inclemencias meteorológicas el número de caminantes se dispara.


Un grupo de peregrinos avanza entre Valga y Pontecesures.

A medida que avance la primavera el número de peregrinos en el Camiño Portugués irá en aumento. Pero el momento álgido que indica la finalización del invierno y el comienzo de la temporada alta para los caminantes llega precisamente ahora, en Semana Santa, cuando se dispara la cifra de usuarios de ese itinerario religioso y cultural que atraviesa el territorio del Ullán y que el año pasado emplearon más de 60.000 personas.

Ayer, sin ir más lejos, a media mañana era fácil comprobar el avance de un centenar de peregrinos por el Ayuntamiento de Valga, y eso en un periodo de apenas una hora.

Los había portugueses y españoles, pero también rusos y franceses, entre otras nacionalidades. Avanzaban tanto a pie como a caballo, solos o acompañados.

Con sus perros

Algunos hacen el Camino junto a sus perros, como unos franceses que salieron de Lisboa con un can -un labrador negro- y unos toledanos que comenzaron viaje en Tui acompañados de su fiel escudero.

Un tipo de viaje, por cierto, que cobra un protagonismo especial ahora que por iniciativa de la Asociación Protectora de Animais do Camiño (Apaca) es posible obtener también una credencial para las mascotas.

En Protección Civil de Valga, que suele ayudar a los peregrinos mientras avanzan por la localidad, confirman que esta semana aumentó considerablemente el número de caminantes.

Al igual que se constata el incremento de usuarios en los albergues, tanto en el del municipio valgués como en los de Pontecesures y Padrón.

El primero de ellos, en el lugar de O Pino, goza de gran importancia para quienes avanzan hacia Santiago. Prueba de ello es que el año pasado fueron 4.578 los caminantes que hicieron noche allí, lo que supuso mil estancias más que en el ejercicio precedente.

El albergue de Valga está dotado de tres dormitorios con 78 plazas -en el de Pontecesures son 54- y dispone de servicios como los de cocina, comedor, ducha de agua caliente, almacén de bicicletas, botiquín, calefacción central, sala de reuniones, lavandería con lavadora, secadora, tendedero y jardín con terraza. Tiene un precio de 6 euros y funciona en horario de 13.00 a 22.00 horas.

Puede recordarse que abrió sus puertas hace siete años y desde entonces no dejó de incrementar el número de usuarios.

En la Oficina del Peregrino también han comprobado el sensible aumento de viajeros. No cabe duda de que en cuanto se conozcan los registros oficiales de este mes mejorarán notablemente los datos de febrero, cuando en este órgano acreditaron a 2.181 peregrinos; 849 mujeres y 1.332 hombres.

Fueron 2.081 los que alcanzaron Santiago a pie, 95 lo hicieron en bicicleta y cuatro peregrinaron a caballo.

Faro de Vigo

Los valgueses más veteranos tienen hasta el 30 de abril para anotarse en su multitudinaria fiesta anual.

Un momento de la fiesta del año pasado.

El 6 de mayo se celebra en el Concello de Valga el «XXI Encontro cos Nosos Maiores»; un acontecimiento anual que siempre resulta multitudinario y reúne a los vecinos de más de 65 años. Los interesados deben inscribirse antes del 30 de abril para asistir a esta esperada fiesta. En el programa, como de costumbre, se incluye una misa, que se oficiará desde las 13.00 horas en el Auditorio Municipal de Cordeiro. Una vez finalizada se trasladará a los asistentes en autobuses al pabellón polideportivo de Beiro, donde se desarrollará el tradicional almuerzo de confraternidad y se procederá al sorteo de regalos, además de rendirse homenaje al hombre y la mujer presentes de más edad. Evidentemente, no van a faltar la música ni el baile.

Faro de Vigo