Vilagarcía rememora el 150 aniversario del ferrocarril con una exposición en el Gato Negro.

La muestra, que se inauguró con un coloquio a cargo de Carlos Abellán, se trasladará a continuación a Catoira

Hace 150 años, un ferrocarril recorrió por primera vez una línea regular en Galicia. Lo hizo desde la estación de Cornes, entonces perteneciente al extinto Concello de Conxo, para concluir su histórico viaje en Carril, que todavía poseía su propio Ayuntamiento. Aquel momento une para siempre a Santiago y a Vilagarcía, depositarios ambos de un legado que ayer sumó un lazo más, con la inauguración de la excelente exposición que acoge la sociedad Gato Negro, conformada por paneles repletos de fotografías irrepetibles y textos que las explican con rigor.

La apertura de la muestra, que concluyó con un coloquio a cargo de su comisario, Carlos Abellán, presidente de la Asociación Compostelana de Amigos do Ferrocarril, despertó un notable interés, a la vista del público que no quiso perderse la cita. Allí estuvieron, por ejemplo, los alcaldes de Vilagarcía, Alberto Varela, y Catoira, Xoán Castaño, municipio que también toca el legendario trazado por el que Rosalía de Castro hizo su último viaje en vida, y que recibirá la exposición, de carácter itinerante, en cuanto deje la capital arousana, donde acaba de ser reinaugurado el Museo do Ferrocarril.

La Voz de Galicia

El Museo do Ferrocarril reabre sus puertas y reactiva la demanda de un servicio de cercanías.

El Museo do Ferrocarril reabre sus puertas y reactiva la demanda de un servicio de cercanías
La alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, y el regidor de Vilagarcía, Alberto Varela, descubrieron la placa del Mufevi.

Vilagarcía ya tiene abiertas las puertas de su Museo do Ferrocarril, la huella histórica que demuestra la vinculación de la capital arousana con el “monstro de ferro”, que trajo el progreso a la ciudad hace ya 150 años. El entorno del Mufevi se vistió de gala con la presencia de personalidades políticas y otras vinculadas al mundo del tren. Carlos Abellán, que dirigió el Museo del Ferrocarril de Madrid, ejerció de maestro de ceremonias en el acto de inauguración. En él se quiso emular el primer viaje del tren en Galicia, que unió las localidades de Cornes y Carril en el año 1873. Es por ello que la alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, y la teniente alcalde de Padrón, Chus Campos viajaron en tren desde sus respectivas localidades para no perderse el acontecimiento. En el andén les esperaba el alcalde vilagarciano, Alberto Varela. 

Ya en el Mufevi Abellán hizo un pequeño repaso por los detalles históricos que motivaron en su día la puesta en marcha de esta línea férrea, con un relato plagado de nombres de intelectuales como Trulock o Domingo Fontán. En su intervención aprovechó para reclamar una parada “aínda que sexa facultativa e durante a tempada estival” para Carril, al entender que “é un auténtico luxo que o tren pare xusto ao lado da praia”. Abellán también reclamó una conexión directa con Portugal e incidió en la importancia de contar con una línea férrea de cercanías, demanda esta que también sonó en boca de Goretti Sanmartín y del propio Alberto Varela.

El regidor vilagarciano explicó que la capital arousana no sería tal y como la conocemos sin esa primera línea de ferrocarril. “O tren fixo posible que Vilagarcía contase cun porto do Estado co coñecido ‘muelle del hierro’ como símbolo. Tamén permitiu a unión nunha soa cidade de Carril, Vilagarcía e Vilaxoán”, manifestó. También hizo alusión a que fue precisamente ese progreso el que puso en pie el Balneario de A Compostela, en su día “paradigma do turismo en Galicia”. Varela aplaudió esa colaboración con Santiago, haciendo alusión a que Vilagarcía “é o inicio do Camiño e Compostela é o final”.

La regidora santiaguesa hizo referencia a que la línea Cornes-Vilagarcía supuso un antes y un después en el desarrollo de Galicia. “Trouxo progreso e benestar”, declaró. Recordó que en aquel primer viaje el tren salió de Cornes (en Conxo) a la una menos cuarto y que a su llegada a Vilagarcía un globo aerostático celebraba tan histórico momento adornado con motivos ferroviarios. En esta reinaguración –con el Mufevi recuperando el color blanco original– no hubo globo aerostático, pero sí personajes vestidos a modo de ferroviarios y una visita guiada al interior del espacio, que busca ser un elemento dinamizador para el turismo.

En el interior del Mufevi puede conocerse la historia del ferrocarril y su incidencia en Vilagarcía, así como descubrir lo que él supuso para el desarrollo turístico de todo su entorno. También hay decenas de maquetas de locomotoras y vagones, así como una mucho más grande y en movimiento. La reinauguración del Museo do Ferrocarril de Vilagarcía se enmarca dentro de los actos del 150 aniversario de esta primera línea de tren. Estos continúan el próximo viernes a las siete de la tarde con la inauguración de una exposición y una charla en el Gato Negro de Carril. 

Diario de Arousa

ADIF adjudica por 10 millones la mejora de la vía entre Vilagarcía y Padrón.

ADIF adjudica por 10 millones la mejora de la vía entre Vilagarcía y Padrón
Imagen de archivo de la estación de tren de Pontecesures.

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) invertirá 10 millones de euros en la mejora de las instalaciones de control de tráfico, comunicaciones y seguridad en el tramo Vilagarcía de Arousa a A Escravitude. La entidad adjudicó el proyecto a la UTE de las compañías Alstom Transporte e instalaciones y Técnicas Eléctricas Asturianas. El contrato incluye la redacción de la actuación y la ejecución de las obras de adecuación de las instalaciones de seguridad del ámbito de Pontecesures y los bloqueos en el trayecto de la línea a lo largo de 27,7 kilómetros.

El objetivo es aumentar la fiabilidad y capacidad del tramo, incrementando la regularidad de las circulaciones y potenciando también el tráfico de mercancías, en el marco del Corredor Atlántico ferroviario, según explica ADIF mediante un comunicado. El trayecto, que parte de Vilagarcía y bordea la costa y el río Ulla, incluye las estaciones de Catoira, Pontecesures, Padrón y A Escravitude, aunque esta última actualmente no cuenta con paradas en la localidad en los trenes regionales.


Los trabajos incluirán actuaciones en enclavamientos, contadores de ejes, sistema Asfa Digital, señalización fija y luminosa, sistemas de telecomunicaciones fijas, videovigilancia y control de accesos, sistema de energía, edificación técnica y obra civil auxiliar.

Entre las principales actuaciones que se abordarán figuran la instalación de un nuevo enclavamiento electrónico en la estación de Pontecesures y adecuación de los existentes en Vilagarcía, Catoira, Padrón y A Escravitude; elevación de nivel del sistema de bloqueos (herramienta para el control automatizado del tráfico) en las estaciones del tramo Vilagarcía-A Escravitude; instalación de focos y señales de tecnología LED; instalación de nuevas señales y contadores de ejes; nuevos equipos de telefonía; renovaciones de cableado de telecomunicaciones y energía. Finalizadas las actuaciones, la línea quedará lista para su futura electrificación a 25 kilovatios.

De igual modo, ADIF-Alta Velocidad recuerda que las obras serán compatibles con el mantenimiento del servicio ferroviario con normalidad, por lo que no se alterarán el funcionamiento de las líneas. Además, la entidad señala que este proyecto contribuye al Objetivo de Desarrollo Sostenible ODS 9, en especial a sus metas de desarrollar infraestructuras fiables y de modernizar la infraestructura, y que podrá ser cofinanciada por el Mecanismo “Conectar Europa” de la Unión Europea (CEF). 

Diario de Arousa

Identificados cinco jóvenes por una pelea en las puertas de una discoteca de Cesures hace un año.

Se trata de chicos de entre 20 y 23 años residentes en Ribeira

El equipo EBIO de la Guardia Civil de Vilagarcía en colaboración con la Guardia Civil de Valga investigan a cinco jóvenes entre 20 y 23 años como supuestos autores de dos delitos de lesiones cometidos en los exteriores de una famosa discoteca de Pontecesures. Los hechos tuvieron lugar a finales del mes de octubre de 2022, cuando tras la actuación de un famoso artista se produjo una multitudinaria pelea en los exteriores del local.

Como consecuencia de las agresiones que se produjeron en la misma, resultaron lesionadas de consideración dos personas, las cuales fueron atendidas en diferentes centros de salud, llegando incluso una de ellas a tener que ser derivada al Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela para ser atendido de las lesiones sufridas.

Ambas personas, una vez recibieron el alta hospitalaria, interpusieron denuncias en el acuartelamiento de la Guardia Civil de Valga. A partir de ese momento se inicia una investigación para dar con la identidad de sus agresores, según informa el instituto armado.

Después de recopilar diferentes testimonios y de rastrear perfiles e información de diferentes redes sociales, los agentes consiguieron identificar a cinco de ellos, tres varones y dos mujeres de entre 20 y 23 años de edad y residentes en Ribeira.

Las diligencias instruidas, han sido entregadas en el Juzgado de primera Instancia e Instrucción de Guardia de Caldas de Reis, donde deberán comparecer cuando sean requeridos por la autoridad judicial.

La Voz de Galicia

Manuel García Cambón, el gallego que revolucionó la industria maderera con su sueño: Finsa.

En 2019, un equipo de arqueólogos realizaba un extraordinario descubrimiento en un yacimiento en Zambia: la estructura de madera más antigua jamás encontrada. Datar estas piezas de madera no fue sencillo, teniendo que emplear una técnica para medir la radiactividad natural de los minerales que la cubrían, para determinar cuándo había estado expuesta a la luz solar por última vez. Así fue como dataron la estructura en 476.000 años. Si tenemos en cuenta que los primeros fósiles de Homo Sapiens datan de hace 300.000 años, este descubrimiento sugiere que una especie más antigua comenzó a utilizar herramientas mucho antes de lo que se creía, usándolas para dar forma y unir dos grandes troncos formando una estructura que, probablemente, componía los cimientos de una vivienda. Desde tiempos muy remotos, la madera es y ha sido vital para nuestra civilización, ya que nos ha permitido resolver múltiples necesidades, desde darnos abrigo, a permitirnos construir vehculos u obtener energía. Por este motivo la industria maderera es clave para cualquier país y por eso, hace más de un siglo, un hombre decidió crear una industria que no existía en Galicia y que revolucionaría el sector. Aquel hombre era Manuel García Cambón y su sueño se llamaba Financiera Maderera SA, FINSA.

Momento del descubrimiento de las maderas en Zambia.

Manuel nacía en Santa Baia de Logrosa, una parroquia del municipio coruñés de Negreira, y era el segundo de siete hermanos. Debido a las dificultades propias de la época, Manuel permaneció poco tiempo formándose en la escuela y con 14 años comienza a trabajar, sin sueldo, como aprendiz de carpintero con un vecino.

Un año después conseguía su primer empleo junto a un trabajador de origen portugués, con el que se dedicó a recorrer los montes cercanos serrando madera, hasta que cumplió 21 años, momento en que se casa con Sara Baliña Pérez, hija del propietario de un pequeño aserradero que se dedicaba a trabajar la madera que le llevaban los vecinos.

Manuel, con el permiso de su suegro, comenzó a introducir mejoras en el negocio y a adquirir nueva maquinaria para poder introducirse en el mercado y dejar de trabajar de manera intermitente dependiendo de encargos esporádicos.

Como el sector le gustaba y además se le daba bien decidió, en 1931, crear una nueva sociedad junto a un médico de Negreira: Rubira y García Cambón, SL, un aserradero en Portanxil, Ames, donde comenzaron a producir tablas y tablillas, muy demandadas para fabricar cajas. El negocio funcionaba maravillosamente bien, ya que fabricaban productos con mayor valor añadido que sus competidores y habían implementado medidas que permitían el ahorro en costes y el aumento en los márgenes. Además, Manuel tenía una visión única para calcular con gran exactitud los metros cúbicos de madera que tenía que pagar a la hora de comprar el material.

Estado actual en ruinas del aserradero de Portanxil.

Su crecimiento era tan grande que fue necesaria la construcción de un segundo aserradero en la zona de Negreira y siguieron ampliándolos hasta cinco.

Con la Guerra Civil, la empresa no se vio afectada, ya que sus aserraderos fueron militarizados por el ejército golpista para abastecer al bando sublevado. A su fin, debido a que la demanda de madera no paraba de crecer en un país que necesitaba ser reconstruido, el negocio tampoco se resintió, llegando a constituirse una empresa naviera con dos pequeños mercantes, que comunicaban el puerto de Vilagarcía de Arousa con el resto de España

Mientras los negocios marchaban bien, una cantidad considerable de los beneficios que estaban obteniendo se dedicaron a la compra de unos terrenos en Pontecesures, un lugar que tenía buenas comunicaciones y que estaba rodeado de bosques de pinos de extraordinaria calidad.

En 1944, Rubira abandona la empresa y Manuel se hace con sus acciones. La compañía ya contaba en aquel momento con dos almacenes y tres fábricas, pero si quería crecer más, tendría que crear una nueva sociedad con mayor capital, que fundaría el 12 de junio de 1946, y a la que llamó Financiera Maderera SA, más conocida por sus siglas: FINSA.

Publicidad de FINSA.

Esta denominación tenía todo el sentido, ya que era una sociedad especializada en adelantar dinero a los propietarios de montes que querían plantar sus árboles para madera. Debido a que estos tardan entre 15 y 20 años en poder ser cortados, los dueños de los bosques se pasaban media vida esperando y sin ver ni un euro. Lo que hacía FINSA era, mediante planes de financiación anuales, adelantarles el dinero cuando plantaban los árboles, con la única condición de que FINSA se quedaría con la madera cuando ya se pudieran cortar.

Durante la década de 1950, Manuel decide tomar medidas para mejorar y modernizar la producción, cerrando las fábricas más antiguas y concentrando la actividad en las más vanguardistas y pensó que era el momento de construir una nueva fábrica en los terrenos de Pontecesures. Además, inició un proceso de apertura al exterior, ampliando su mercado a países como Israel, Marruecos o Irak, puesto que el europeo, que a priori podría parecer más “sencillo”, estaba completamente saturado y con una gran competencia.

La fábrica de Pontecesures en 1955.

En la década de 1960, llegó la crisis, pero Manuel no se quedó con los brazos cruzados. Creía que, para sobrevivir, había que dar una vuelta de tuerca a sus productos para que fueran de mayor calidad y con mayor valor añadido, así que viajó por Europa para buscar nuevas técnicas e ideas. En varias industrias madereras descubrió que se empleaban los subproductos de la propia actividad transformadora, considerados residuos por muchos, para elaborar tableros de aglomerado, así que volvió a Galicia con la idea de implementarla en FINSA.

Por ese motivo realizó una ampliación de capital, la sede social se trasladó a Santiago y amplió la fábrica de Pontecesures, con la intención de fabricar en masa esos nuevos tableros que había visto por Europa, unos tableros de 3 capas con una calidad muy superior a todo lo que fabricaba la competencia y que comenzó a comercializarse bajo la marca comercial “Fimapán”.

La fábrica de Pontecesures en 2009.

Su nuevo producto fue un rotundo éxito, ya que era ampliamente demandado en una España que estaba en pleno desarrollo en el sector de la construcción que, con su gran crecimiento necesitaba tableros como el suyo, convirtiendo a la empresa en el buque insignia de la fabricación de tablero de aglomerado.

Tablero ”Fimapán”.

El negocio creía a tal ritmo que, en 1969, se ponía en marcha la factoría de Formarís, en los alrededores de Santiago de Compostela, una ubicación con magníficas comunicaciones para abastecerse de materia prima y donde se podrían realizar futuras ampliaciones. Manuel incorporó a sus dos hijos en la fábrica e instaló, entre otras muchas innovaciones, un aserradero automático, una nueva línea de fabricación de tableros y una instalación para plastificarlos, lo que hacían de esta, la fábrica la más vanguardista de España y una de las más innovadoras de toda Europa.

Instalaciones de FINSA.

La importancia e influencia de estas nuevas instalaciones era tan grande que se decidió trasladar la sede social desde Santiago a Formarís de manera permanente, donde en la actualidad todavía permanece. Pero a pesar de las mareante cifras que movía la compañía y de que muy pocas empresas gallegas, salvo algunas vinculadas al Banco Pastor, tenían tal dimensión en la década de 1970, siempre mantuvo siempre su carácter familiar.

Camión de FINSA, los más famosos de las carreteras gallegas.

A partir de esa época y, a pesar de multitud de crisis, FINSA nunca ha dejado de crecer e innovar. En la actualidad es el quinto grupo empresarial con mayor facturación y empleados de Galicia, además de ser uno de los principales actores de la madera tanto en la comunidad como en España y Europa.

Fábrica de Santiago de Compostela.

Manuel García Cambón fallecía en 1990, con 82 años. En el momento de su muerte, el sector forestal gallego producía tanta madera como Dinamarca, Grecia e Irlanda juntas y la misma que toda Italia o Gran Bretaña. Hoy, la tercera generación de la familia está al frente de este gigante que reina en España y que lidera su sector en Europa y el resto del mundo, un imperio de la madera que soñó, hace un siglo, su abuelo: FINSA.

Edificio de oficinas en la fábrica de Santiago de Compostela.

Iván Fernández Amil. Historias de la Historia.

Monbus refuerza el servicio de tarde de Vilagarcía a Santiago el domingo.

Habrá dos autocares a las 18.20 horas, uno de los cuales circulará por la autopista

Aunque el medio de transporte colectivo más empleado para viajar entre Vilagarcía y Santiago es, sin duda, el ferrocarril, la línea de autocares que une ambas ciudades ha experimentado un importante incremento de usuarios en los últimos meses. Dos factores fundamentales explican este fenómeno: los usuarios del tren que no encuentran plaza en unos servicios más que saturados, y buscan en el autobús una alternativa, y la política de descuentos que la Administración también está aplicando en el transporte de viajeros por carretera. Así, si el Gobierno central mantiene, al menos hasta final de año, su bonificación íntegra para los regionales y los media distancia, la Xunta conserva igualmente la inyección económica que permite reducir el precio de los trayectos en bus a la mitad. Por lo pronto, Monbus, la compañía que opera la línea entre la capital arousana y Compostela, ha decidido reforzar uno de los viajes que cuentan con mayor demanda: el de los domingos por la tarde en dirección a Santiago.

Dos servicios comunican Vilagarcía con Santiago los domingos, a las 9.50 y a las 18.20 horas. Ambos proceden de Sanxenxo (de donde salen a las 9.05 y a las 17.35 horas) y, tras recorrer buena parte de la comarca, desembocan en la estación de autobuses para continuar hacia Compostela por carretera. Ese refuerzo que anuncia Monbus consistirá en un segundo autocar para el viaje de la tarde. Con todo, probablemente la principal novedad estribe en el hecho de que uno de ellos, en lugar de proseguir por la PO-548 hacia Catoira Pontecesures, optará por la AP-9 para alcanzar Santiago directamente, lo que traerá bajo el brazo un ahorro sustancial de tiempo frente a la hora, más larga que corta, que requiere este trayecto.

Monbus explica que, en realidad, esta línea solo había exigido dos refuerzos, uno en cada sentido, desde el inicio del curso universitario, que multiplica la presión sobre el transporte colectivo. Los días clave son los viernes, desde Santiago a Vilagarcía, y los domingos, en sentido inverso. Se trató de acciones puntuales que respondían a picos en principio aislados. Sin embargo, el hecho de que los dos últimos domingos haya sido necesario doblar autobuses a las 18.20 hacia Compostela ha llevado a la compañía a establecer un refuerzo permanente, que se mantendrán en tanto en cuanto no disminuya ese plus en el flujo de viajeros. En otras palabras, si el repunte tuvo su origen en factores como la Festa do Marisco o el puente del Pilar, y el número de pasajeros vuelve a la normalidad en cuestión de semanas, ese segundo autocar se eliminará. En caso contrario, seguirá funcionando.

Lo cierto es que, entretanto, el ferrocarril continúa repleto. Para el próximo domingo ya no es posible adquirir billetes a partir de las 13.20 horas para viajar a Santiago. Y el horizonte del siguiente, el 29 de octubre, no es mucho mejor, ya que solo hay dos servicios que admiten todavía la venta, a las 17.05 y a las 18 horas. La ventaja de que uno de los buses vaya a circular por la autopista puede ejercer, además, como un gancho a la hora de decantarse por esta fórmula. El viaje normal incluye 17 paradas entre ambas ciudades y la influencia de un denso tráfico. Se comprenderá que la AP-9 mejorará el tiempo de viaje de forma notable.

Un trayecto con 17 paradas que exige una hora y cinco minutos y depende del tráfico

Esta conversación tuvo lugar pocos días antes de que la vieja estación de autobús de Santiago cayese bajo la piqueta para ver trasladada su actividad a la flamante intermodal compostelana, en la que autocares y ferrocarriles conviven separados por un túnel, una plaza elevada en construcción y las inevitables vías. «Xefe, o bus tardará ben tres cartos de hora en chegar a Vilagarcía, non?». «Si, ho, e unha hora e carto tamén. Aquí dependemos do tráfico». Pese al cambio de ubicación, cualquiera que haya recurrido al bus para viajar entre Compostela y la capital arousana sabrá que la duración del recorrido es prácticamente la misma. Entre otras cuestiones, porque el conductor del vehículo estaba en lo cierto: la densidad de la circulación rodada ejerce una influencia decisiva sobre los 55 minutos que, teóricamente, tarda el bus en cubrir la distancia entre ambas ciudades.

Entre las estaciones de Vilagarcía y Santiago median 17 paradas, que dan servicio a lugares como la avenida Rosalía de Castro, aún en Compostela, O Milladoiro, Faramello, A Picaraña, Escravitude, Padrón, Pontecesures, Campaña, Cordeiro, Catoira, Abalo, Bamio o Carril. Lugares que, con la excepción de Catoira, Cesures y A Escravitude, tocadas todavía por los trenes regionales, difícilmente encontrarían otro medio de transporte colectivo capaz de articular sus comunicaciones. La línea, además, se extiende a Sanxenxo a través de As Sinas, Caleiro, Castrelo, Corón, Dena o Vilalonga, con lo que sus prestaciones se multiplican. Un bus directo que circule por la autopista es una excelente noticia. Que no se descuiden el resto de poblaciones, incluso mejor.

La Voz de Galicia