Alcaldes y representantes de los concellos arousanos.
Diputados y representantes municipales del BNG participaron ayer en Pontecesures en un acto organizado para mostrar su “rotunda oposición” a la implantación de la macrofactoría de Altri en Palas de Rei, una instalación que consideran una “bomba medioambiental” que enciende las alarmas en los ayuntamientos que se nutren de la estación de tratamiento de agua potable (ETAP) del río Ulla, “tanto polos efectos que a celulosa terá na calidade das augas como polo risco de abastecemento que suporá”.
Junto a los diputados Luís Bará, Rosana Pérez, Montse Prado e Iria Carreira, participaron en el acto la senadora Carme da Silva, la alcaldesa de Pontecesures, Maite Tocino y el regidor de Catoira, Xoán Xosé Castro, junto a representantes del BNG en Ribeira, Pobra do Caramiñal, Rianxo, Padrón, Valga, Dodro, Boiro y Vilagarcía que se abastecen de la mencionada estación potabilizadora y que podrían verse “prexudicados gravemente” por la instalación de la celulosa.
El BNG sostiene que, de llevarse a cabo este proyecto supondrá un “empeoramiento da calidade da agua do río tanto polos verquidos cómo polo risco de eutrofización ao baixar o caudal nos tres embalses de Portodemouros, Brandariz y Touro”. “É evidente que todos estes efectos negativos serán trasladados augas abaixo causando un impacto no río Ulla moi severo, empeorando a calidade das súas augas e comprometendo o caudal en épocas de estiaxe”, apunta el BNG.
Control en el Senado
Asimismo, Carme da Silva avanzó que este martes, durante la sesión de control al Goberno del Estado en el Senado, el BNG preguntará al Ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, sobre la voluntad del ejecutivo de “incluír ou non” la macrocelulosa de Palas de Rei entre los proyectos que recibirán ayudas del Perte de descarbonización.
“Deberá dar a coñecer a posición do Goberno en relación a este proxecto e mesmo se existe algún tipo de compromiso por parte do executivo para que a macrocelulosa poida acceder a estes fondos” afirma. En este sentido, la senadora del BNG denuncia que el proyecto «incumpre» los requisitos estabelecidos para la percepción de estos fondos.
Vilagarcía, Catoira, Pontecesures y Valga son algunas de las localidades que se suministran de la potabilizadora de Padrón
El puerto de Pontecesures fue el lugar elegido por el BNG para realizar una llamada de atención sobre el proyecto de instalación en Palas de Reis, Ulla arriba, de Altri una factoría de celulosa que los nacionalistas consideran «unha bomba medioambiental no corazón de Galicia». Una bomba que —y en eso coinciden colectivos pesqueros y marisqueros arousanos— amenazaría también a la ría de Arousa. Y, por el camino, a los concellos por los que discurre el río, especialmente a aquellos que se nutren de la estación de tratamiento de agua potable del Ulla, que se verán afectados «tanto polos efectos que a celulosa terá na calidade das augas, como polo risco de abastecemento que suporá».
Para abordar esta cuestión, ayer se dieron cita en Pontecesures los diputados Luis Bará, Rosana Pérez, Montse Prado e Iria Carreira, además de la senadora Carme da Silva, la alcaldesa de Pontecesures Maite Tocino, el regidor de Catoira Xoán Castaño y representantes del BNG en localidades como Ribeira, Pobra, Rianxo, Padrón, Valga y Dodro, «os concellos que xunto a Boiro e Vilagarcía se abastecen da mencionada potabilizadora».
Desde el Bloque recuerdan, además, que Augas de Galicia acaba de adjudicar el proyecto para la ampliación de la estación de tratamiento de aguas de Padrón ante la «crecente demanda e a escaseza de auga nos períodos de seca, cada vez máis frecuentes».
Explican desde el Bloque que «segundo os plans feitos públicos por Altri, a macrofábrica de Palas consumirá directamente do Ulla 46.000 metros cúbicos ao día, o que supón máis do 10 % do volume de auga do encoro de Portodemouros e equivale ao consumo de auga humano de toda a provincia de Lugo». La factoría devolverá al río cada día 30.000 metros cúbicos «de augas industriais que incidirán aínda máis na contaminación do río», según explicó la diputada Rosana Pérez, que ya ha registrado en el Parlamento de Galicia una batería de iniciativas contra los planes de la empresa portuguesa.
Por lo demás, el BNG preguntará hoy en el Senado al ministro de Industria «sobre a vontade do executivo de incluír ou non a macrocelulosa entre os proxectos que recibirán axudas».
Más de mil propietarios ya han registrado sus gallineros de autoconsumo en Arousa: «Con tanto papel, o rural vaise»
Las explotaciones domésticas deben estar inscritas en el registro general de explotaciones ganaderas, un trámite que hace que en muchas casas se esté pensando «en deixar as galiñas»
Cualquier cosa que lleve el apellido «de casa» es, al menos en Galicia, garantía de calidad. Con los huevos y la carne de pollo ocurre exactamente eso: son miles los corrales que existen en nuestra tierra en los que se crían y alimentan aves con la única intención de disfrutar de productos sobre cuyo origen no hay misterios. Hasta ese mundo de corrales domésticos ha llegado la burocracia. El Real Decreto 637/2021, que publicó el Ministerio de Agricultura obliga a incluir los gallineros destinados a autoconsumo —ni la carne ni los huevos se venden— en el registro general de explotaciones ganaderas. Aunque hay muchos propietarios de este tipo de instalaciones que parecen decididos a tirar la toalla, lo cierto es que en el conjunto del territorio se han dado de alta ya 41.000 gallineros de autoconsumo. De ellos, 1.021 están ubicados en la zona sur de la ría de Arousa.
En este caso, la lista por localidades la encabeza Vilagarcía, con 251 corrales que han cumplimentado el trámite, seguida de Valga (162), Vilanova (134), Meis (124) y Cambados (102). Cierran la lista Pontecesures (28), junto a O Grove (24) y a una gran distancia A Illa, donde solo se han censado de momento siete corrales domésticos. Según los datos de Medio Rural, entre ambos extremos figuran Meaño (74), Catoira (61) y Ribadumia (54).
Hacer el trámite del registro echa para atrás a muchos particulares que hasta ahora criaban sus propias gallinas. En la solicitud es preciso especificar el número de aves, el emplazamiento del corral y el sistema de cría. Además, los gallineros están sujetos a posibles inspecciones y sus propietarios deben identificar «a un veterinario de referencia al que poder recurrir en caso de aparición de problemas sanitarios concretos» en los animales. Las sanciones por no estar dado de alta parten de los 600 euros.
Desde la Xunta se presentaron numerosas alegaciones a esta normativa estatal, pero no lograron frenar lo que en muchas casas rurales está generando un intenso debate sobre qué hacer con las gallinas.
En la tienda agraria: las ventas de aves en caída
«A xente non confía. Para que se fai isto? Vai vir un imposto detrás?». Esas son algunas de las preguntas sin respuesta a las que Manuel Castro lleva meses haciendo frente desde su despacho de productos agrcolas en Vilanoviña (Meis). Se las plantean particulares «que veñen comprar unhas galiñas para a casa e se atopan con que se non teñen o galiñeiro de alta no rexistro, non llas podo vender». Ahora que ya se lleva tiempo hablando del tema, las reacciones son más templadas. Pero cuando el contenido del Real Decreto 637/2021, del Ministerio de Agricultura, combinado con la Ley de Bienestar Animal comenzó a divulgarse, Manuel tuvo que hacer frente a auténticos enfados. «Moita xente vai tirar con todo, vai deixar de ter galiñas porque todos son papeis, trámites e problemas», señala. Desde su negocio, Agro Vilanoviña, lleva años contemplando como la vida y los trabajos que se desarrollan en el mundo rural se van encontrando un número creciente de obstáculos que están poniendo en jaque la continuidad de actividades tradicionales que desde siempre han complementado las economías familiares. «Con tanto papel, o rural vaise», dice con cierto tono de desconsuelo. Porque establecer la obligatoriedad de un registro de gallineros de autoconsumo puede parecer poca cosa, pero no lo es. Para empezar, muchos de los propietarios se atascan ya en el trámite. Por esa razón, y como ya ha hecho en ocasiones anteriores, establecimientos como el de Manuel Castro se encargan de facilitar el procedimiento a sus clientes. Desde mediados de diciembre se ha encargado de gestionar el registro de unos cuatrocientos gallineros. «Teño que facilitarlles as cousas», dice. Así que él se encarga de ayudar con el papeleo y remitirlo a la Xunta.
Castro reconoce que ese trabajo consume tiempo y esfuerzo. «Pero teño que facelo, porque se non, vía que se me ían ir as vendas abaixo», explica. De hecho, y a pesar de su esfuerzo, el número de pollos despachados en su establecimiento ha caído: «Se antes vendíamos entre 350 e 400 ao mes, agora andaremos nos 150», indica.
Si las ventas de animales caen, se viene abajo toda una cadena. «Porque non son solo os polos que deixas de vender, e todo o que ven detrás», dice. Ahora, por ejemplo, debería estar vendiendo una cantidad considerable de animales, porque «os polos de marzo din que son os mellores». Con ellos, piensos, comederos… «Se non se venden os polos, os pensos, os cereais, tampouco se van vender, porque todo é unha cadea… E xa estamos falando de moita xente», argumenta.
La ausencia del Breogán do Grove rebaja la participación arousana en el Campeonato de España de Invierno a su número más bajo en años. En las aguas del Guadalquivir a su paso por el CEAR de La Cartuja, 42 palistas de la comarca compiten entre hoy y mañana. Un buen puñado de ellos, con aspiraciones de medalla.
El As Torres-Romaría Vikinga de Catoira encabeza la delegación arousana, tanto por número, 16 deportistas inscritos, como por sus opciones de podio. El vilagarciano Pedro Torrado defiende título en el C1 Sub 23, Jairo Zurita y Raúl Fernández fueron subcampeón y bronce en el C1 Júnior en el 2023 e Iván Alonso cuarto en el K1 Sénior. Además, Fernando Busto aspira a uno de los tres puestos de honor del C1 Sénior ante la ausencia de los palistas del Breogán.
El Náutico Pontecesuresse presenta en la cita nacional de Sevilla con una decena de deportistas. Encabezando el equipo, Nerea Novo, flamante campeona del mundo de maratón en C1 Sub 23.
Otras dos jóvenes promesas lideran las expediciones del Náutico O Muíño y del Piragüismo Illa de Arousa. Lara Remigio, en el C1 Júnior, es la gran baza de podio del conjunto de Ribadumia, mientras que Lucía Tenreiro lo es en el caso del equipo insular, compitiendo en la misma categoría, pero en kayak.
El auditorio de Catoira acogió ayer un encuentro entre empresarios de la comarca y participantes en el programa de empleo
El programa integrado de empleo en el que participan un centenar de personas de los municipios de Catoira, Padrón, Valga, Rois, Pontecesures y Dodro ya está en marcha. Este miércoles, las personas inscritas en el mismo pudieron participar, en el auditorio de Catoira, en un encuentro al que habían sido invitadas las responsables de empleo en firmas como Finsa, Astilleros del Ulla, Ana Muñiz, Friscos, STAC o FESBA, todas ellas empresas asentadas en la comarca.
El objetivo del encuentro, en el que participaron el alcalde de Catoira, Xoán Castaño, y el de Dodro, Francisco Xabier Castro, era establecer un primer contacto entre los potenciales empleadores y las personas que se están formando. Las empresas aprovecharon para «explicar cales son as súas actividades e características propias, os perfís profesionais que buscan para cubrir os seus planteis, así como as diferentes modalidades dos seus procesos de selección de persoal, que nuns casos realizan a través de empresas de traballo temporal pola súa carga temporal, e noutros recibindo directamente currículos», según explican desde el Concello vikingo.
Las empresas destacaron su interés por «contratar xente da zona de moi diferentes características». Pero siempre «con iniciativa». Se busca personal capaz de manejar carretillas y de realizar operaciones industriales o informáticas, entre otras muchas cosas. Pero, sobre todo, se buscan, dijeron en Catoira, «persoas dispostas a formarse nos procesos de produción específicos de cada empresa e abertas a cambios e á innovación debido ás continuas modificacións nos sistemas produtivos». Según señalaron, en muchos casos no se necesitarían «coñecementos nin experiencia previa no sector a traballar, xa que se lles fornece de preparación personalizada ao chegar á empresa».
Todos estos asuntos fueron abordados en el marco del programa de empleo, que tiene como finalidad «facilitar que a veciñanza consiga un posto de traballo poñéndoa en contacto coas principais firmas do sector no territorio». En dicho programa participan alrededor de un centenar de personas que reciben orientación laboral, formación, una ayuda de diez euros por cada jornada de asistencia a las actividades… Además, «pasarán a formar parte dunha bolsa de emprego, podendo realizar prácticas non laborais en empresas».