VISITA DO DELEGADO DA XUNTA EN PONTEVEDRA

Na mañá de onte recibimos a visita do Delegado da Xunta en Pontevedra, Luís López Dieguez, e o delegado de Infraestructuras da Xunta, para falar das subvencións aos concellos destinadas á execución de obras de abastecemento, saneamento e depuración.Entre outros asuntos comentamos a problemática que xa vimos arrastrando durante tanto tempo no que se refire as canalizacións de saneamento que verten directamente ao río Ulla e que agardamos poder empezar a dar pasos en firme a fin de mellorar a imaxe do noso río e en definitiva da nosa fachada portuaria no marco das inversións que se están levando a cabo para visibilizar o potencial turístico da nosa vila.Tamén aproveitamos para amosarlle a Praza de Abastos e a Casa da Lamprea, da que confesou ser un gran apaixonado…

«¡Que nos levanten este arresto!», grito unánime en Pontecesures.

Resignación y desánimo por el cierre de Pontecesures.

«La mayor parte de los contagiados viven en otras localidades aunque estén censados en el pueblo», razonan.

Yoselin Beltré sella boletos de lotería en el bar Carabela.

Los vecinos de Pontecesures no dan crédito al cierre perimetral impuesto por el comité clínico, incluso podría decirse que están indignados porque bastan cinco positivos para que la situación perdure en el tiempo. En estos momentos son ocho los enfermos de COVID pero, afirman, «aunque figuran en el censo municipal, casi ninguno vive aquí, sino en Santiago, en Padrón..»

Todos se conocen en la localidad, incluso a los dos contagiados que residen «en una aldea limítrofe con A Estrada», es decir a varios kilómetros del núcleo urbano. Pero el pueblo amanecía desierto y así se mantuvo durante casi todo el día dibujado por persianas bajadas, terrazas recogidas y muchos avisos de restaurantes de que se sirven cafés o comida a domicilio.

Es su salvaconducto económico. En el mercado de abastos, el ambiente fue casi nulo durante toda la mañana y al mediodía el puesto de Maricarmen Batalla mostraba cajas llenas de pescadilla, chopo, doradas y rapantes de la lonja de Ribeira.

«Desde que abrimos calculo que habrán entrado en la plaza unas 10 o 15 personas y, por tanto, apenas vendí nada y todo lo que hay aquí hay que tirarlo si no se vende este fin de semana» lamentaba la conocida pescantina cesureña, una de las más afamadas cocineras de lamprea de la localidad.

Sobre su mostrador estima que hay producto por importe de 800 o 900 € «que arriesgamos cada fin de semana si no se vende» pues son productos rápidamente perecederos.

La acompañaban en el pasillo del mercado sus dos hijos que también lamentaban que Ponteceusures se encuentre en esta situación de cierre, sobre todo por la proximidad de las fiestas de San José y San Lázaro, la época que tendría que ser de mayor movimiento del trimestre por la afamada lamprea cuya exaltación se celebraba en este mes.

Una preocupación que se extiende también a otros locales de hostelería, cuyos propietarios se resignan a «vender un par de sabrosas piezas cocinadas» para familias que quieran degustarla en sus casas.

Es el caso de Yoselín Beltré, responsable del bar «Carabela», uno de los más antiguos del pueblo y que antes regentaban sus suegros. «Tengo abierto porque sellamos lotería y de paso, intento vender unos cafés para llevar o alguna comida para casa», relata con cierto pesimismo.

«Ya llevamos un año al límite y tengo dos hijos a los que hay que alimentar por lo que no queda otro remedio que buscar algún ingreso», razona a la vez que reconoce que si antes vendía 40 o 50 cafés por la mañana, ahora son cinco o seis, por lo que sus ingresos se han reducido a la mínima expresión.

Una preocupación que también se observa en otros ambientes desvinculados de la hostelería. «En los bares no tienen la culpa, porque las medidas higiénicas son máximas» explicaba uno de los operarios de la empresa «Prace» de Tomiño que participa en la mejora de la enorme plaza que se rehabilita frente al Ulla.

Los cuatro empleados aprovecharon el descanso de mediodía para comer el menú que le cocinaron en un restaurante próximo pero que tuvieron que consumir en la vía pública pues los comedores están cerrados.

«Desde que empezó la obra siempre recurrimos a los bares de Pontecesures porque es un sector que lo está pasando muy mal», sostienen al unísono.

Confían todos los consultados en que el cierre. «se prolongue lo mínimo posible» y piden al alcalde, Vidal Seage, que sea más exigente con las autoridades «para que esta situación no se convierta en una rutina».

«Esto es una ruína absoluta» , lamenta Carmen Batalla en su puesto de la pequeña plaza de abastos y que admite que se las ingenia para salir adelante día a día.

«Ahora vendemos lamprea a domicilio y la llevamos cocinada a donde sea, a Noia, a Santiago…» porque sino tendría que acabar de nuevo en el Ulla. Un lujo que los buenos clientes con seguridad nunca van a permitir.

Faro de Vigo.

«El timbal de lamprea es muy de Padrón y hay que conservarlo».

La vecina Guapecha Castaño es de las pocas personas que aún elabora la típica empanada de forma totalmente artesanal.

La lamprea es la protagonista estos días de los menús de la hostelería de Padrón, pero también lo es en el ámbito privado en el que hay grandes cocineras como la vecina Guapecha Castaño Solar, de 63 años. Es de las pocas personas que aún elabora de forma artesanal el timbal de lamprea, una empanada muy típica de Padrón. Su buen hacer ya fue reconocido por un jurado, con motivo de un concurso organizado por el Concello, en el que obtuvo el primer premio.

«Yo ya hacía la empanada de lamprea con mi madre; era a la única que quería en la cocina», cuenta Guapecha Castaño que, cada temporada, hace un buen número de timbales para la familia y amigos, siempre de forma desinteresada. «El timbal es muy típico de Padrón y ya lo hace muy poca gente de forma artesanal», subraya. Ello supone hacer todo a mano, incluida la masa, que suele ser más consistente de la normal para que aguante la salsa de la lamprea, que «se prepara en su sangre. Esa es la esencia de la lamprea: cocinada en su sangre», explica Guapecha Castaño. Ella cocina la masa y la lamprea al mismo tiempo, aunque explica que hay quien lo hace por separado.

«Hay que tener mano para hacerla y que salga tan bien; Guapecha es única haciendo el timbal», asegura su hermano Gonzalo. Todo empieza con la limpieza de la lamprea, que no es tarea fácil, pero a Guapecha hasta le gusta hacerlo, al modo que lo hacía su madre. A ella, además, le gustan, especialmente, los ejemplares capturados en el río Ulla en las pesqueiras de Carcacía.

Y para cocinar una buena lamprea hay algo básico, asegura la vecina: «cuanta más sangre suelte, mejor, porque es fundamental para hacer una buena salsa». Y para el timbal la clave está en que esa salsa, que se cocina en medio del pez casi enroscado, no se derrame y sea aguantada por la masa consistente. «No da mucho trabajo hacerla, o será que yo ya estoy acostumbrada que me sale casi sola», dice Guapecha, que también avisa: «como no espabilen para aprender, la receta se va conmigo», algo que corrobora su hermano. «A todos los Castaño nos gusta la lamprea, pero solo a ella se le da hacer el timbal», afirma Gonzalo.

Pese a prepararla tantas veces, a la cocinera no le aburre, pero dice que es un plato «de sabor muy fuerte, de comer dos o tres veces por temporada», algo que corrobora su hermano, que señala algo que es sabido de la lamprea: o te encanta o la detestas.

Guapecha Castaño reconoce que «solo tomo la que yo preparo, aunque sé que en los restaurante también se hace bien». También opina que, a este paso, la receta del timbal de lamprea se pierde y «sería una pena. Es bonito que la gente aprenda a hacerlo; hay que conservar el timbal de lamprea porque es muy de Padrón», señala la vecina.

La Voz de Galicia

El alcalde de Pontecesures tilda de «ridícula» la ayuda de la Deputación a los hosteleros y comerciantes.

El Ayuntamiento aporta 25.000 euros para complementar las ayudas del segundo Plan de Rescate de la Xunta.

El Concello de Pontecesures aportará 25.000 euros al segundo Plan de Rescate de la Xunta de Galicia para ayudar a los hosteleros, pymes y autónomos afectados por la tercera ola de la pandemia del coronavirus. La primera convocatoria de ayudas autonómicas repartió 48.000 euros en el municipio pontevedrés.

La Deputación de Pontevedra destinará otros 8.800 euros a Pontecesures. El alcalde cesureño, Juan Manuel Vidal Seage, ha tachado de «ridícula» la cantidad de dinero destinada por la administración provincial porque «hai que ter en conta todo o tecido comercial e hostaleiro» que tiene la localidad.

Nivel máximo de restricciones

El 21 de marzo es la festividad de San Lázaro que sirve de «pistoletazo de saída» para la Fiesta de la Lamprea del río Ulla que, por segundo año consecutivo, no se podrá celebrar por la covid-19. El regidor popular lamenta que este año tocará «estar pechados, xa chove sobre mollado, hai moitos veciños coa auga no pescozo, e a situación é prácticamente insostenible».

Vidal Seage ha recibido este viernes a los hosteleros de Pontecesures que, desde hoy, vuelven a tener que cerrar sus establecimientos por la entrada en vigor de las medidas del nivel máximo de restricciones. El alcalde se ha comprometido a solicitar una reunión con la gerencia del Sergas para trasladarle que el sector está «sobrepasado« y, en varios casos, en riesgo de tener que cerrar para siempre.

Lamprea: el vampiro vampirizado,

Este pescado prehistórico es un manjar que está de plena temporada. Se alimenta de la sangre de otros animales y habitualmente se cocina en su propia sangre

Lamprea al estilo de Arbo de 'Sal Negra'.
Lamprea al estilo de Arbo de ‘Sal Negra’. JOSÉ LUIS DEL AMO

Con él no existe término medio: o es adorada o es detestada. Hablamos de la lamprea, un pez marino y fluvial de origen prehistórico (se supone que es una especie con más de 400 millones de años de antigüedad) con aspecto de serpiente que practica el vampirismo con otros animales, cuya sangre le sirve de alimento después de haberles mordido con su boca repleta de punzantes incisivos. Gastronómicamente, la lamprea ha sido considerada un alimento de papas y reyes desde tiempos de los romanos y son muchos los gourmets que esperan ansiosos la llegada del invierno para aprovechar su más bien corta temporada de consumo, que va de mediados de enero hasta finales de marzo, cuando se captura en las pesqueiras del río Miño, por lo que ahora mismo se encuentra en su momento óptimo de consumo.

Con una carne de textura muy firme y un sabor muy peculiar, la forma más habitual de prepararla es al estilo de Arbo, que no es sino una variación gallega (tierra donde este bicho es casi una religión) de una clásica receta de Burdeos, consistente en guisar la carne sobre una salsa elaborada con su propia sangre y vino tinto. Vamos, lo que viene a ser vampirizar al vampiro. Pero su versatilidad es tal que también acepta frituras, escabeches, asados o, incluso, ser convertida en fiambre. En Madrid hay unos cuantos restaurantes donde se puede tomar.

Lampreas frescas.
Lampreas frescas.SHUTTERSTOCK

José de la Cruz y Paco Pereira han convertido la lamprea en una de las señas de identidad de su Sal Negra (Mateo Inurria, 33. Tlf.: 913 450 945). La preparan al estilo de Arbo y la acompañan con manzana asada, picatostes y arroz blanco. También por la receta tradicional se decanta Carlos Torres en ese templo del producto de temporada que es La Buena Vida (Conde de Xiquena, 8. Tlf.: 915 313 149). Igual que Segundo Alonso, chef de La Paloma (Jorge Juan, 39. Tlf.: 915 768 692), que no se queda ahí y también la ofrece en fiambre, rellena de jamón, zanahoria y huevo duro.

El maestro Iñaki Camba, en su Arce (Augusto Figueroa,32. Tlf.: 915 220 440) de Chueca, tira la casa por la ventana en época de lamprea: a la bordelesa; ahumada en carpaccio; confitada; escabechada; frita o asada. Como se pueden pedir medias raciones e incluso tercios, representa una oportunidad estupenda para componerse una declinación del pescado. Una declinación, cerrada en este caso, que ofrece Juanjo López Bedmar en La Tasquita de Enfrente (Ballesta, 6. Tlf.: 915 325 449), compuesta por tres pases: a la bordelesa, frita y en escabeche.

Preparación de una lamprea a la bordelesa.
Preparación de una lamprea a la bordelesa.SHUTTERSTOCK

Capítulo aparte hay que dedicarle a los restaurantes gallegos, porque muchos se vuelcan con un producto atávicamente identificado con su tierra. Todos ellos hacen patria preparándola al estilo de Arbo. Así la sirven en el veteranísimo Casa d’A Troya (Emiliano Barral, 14. Tlf.: 914 164 455), en Villa de Foz (Gonzalo de Córdoba, 10. Tlf.: 914 468 993) o en Burela (Nardo, 2. Tlf.: 915 711 724).

Por último, un aviso a navegantes neófitos en el tema de la lamprea, que los expertos en materia tienen siempre presente. Estamos hablando de un producto que, por su limitada temporada y por su escasez, no es precisamente barato y las raciones suelen rondar siempre los 40 euros. Pero, pensándolo fríamente, qué son 40 euros por comer como papas y reyes…

El Mundo

Tiempo de lamprea con Miguel Piñeiro.

Amante de la cocina y de la buena mesa, el periodista radiofónico Miguel Piñeiro destaca la lamprea entre sus platos preferidos y entre sus especialidades. “En mi casa se utiliza una receta de hace 150 años de mi tatarabuela Apolonia para prepararla y es una exquisitez. Es parecida a la bordalesa, pero con ajo y vinagre para sacarle el bravío del pescado”, dice, detallando que “el hígado se reserva y se añade en la última parte de la cocción”.

Flamante pregonero de la última Festa da Lamprea de Pontecesures, una cita ineludible para los amantes de la buena mesa, Piñeiro dirige el periódico gratuito de pesca deportiva O Trueiro y es autor del libro Lampreas e Pesqueiras.

Durante la preparación del plato en la cocina de su propia casa, Piñeiro explicó que lleva más de 35 años preparándolo, tras aprenderlo de su madre “que hace una empanada espectacular y un timbal, algo que ya apenas se prepara en los restaurantes porque pese a ser una delicia, necesita mucho tiempo de cocinado”.

Receta lamprea

1 taza y media de aceite
-1 taza de albariño
-media taza de mencía
-1 taza escasa de vinagre
-5 dientes de ajo
-1 manojo de perejil
-sal y pimienta

Limpiar la lamprea, marcar los distintos toros, extraer el hígado y reservarlo. Ponjer el pescado en una cazuela con el resto de ingredientes y ponerla a fuego intenso hasta que hierva. Cuando empiece a hervir, bajar el fuego y echar sal y pimienta. Después, dejar que cueza lentamente y servir acompañado por arroz blanco y picatostes.

Sus recomendados

-Casa Emilio, en Catoira (Pontevedra)

-Casa Ramallo, en Rois (Padrón)

Don Quijote, en Santiago

MARTESGALICIA.ES