Esta vez lo hace reclamando la reposición de todas las frecuencias que los trenes de proximidad tenían antes de la pandemia, así como la potenciación del apeadero de Catoira.
Una parada, por cierto, que ocupa una posición de «estratégica» ya que no solo presta servicios a los vecinos de esta localidad que se deplazan a estudiar o trabajar, sino que también da respuesta a las necesidades de muchos habitantes de la comarca coruñesa de Arousa Norte (Barbanza).
El exconcejal independiente de Pontecesures, que en su día ejerció como cabeza visible de la comisión creada en defensa del tren de cercanías, vuelve a intervenir dirigiéndose por escrito a Javier Pérez López, el representante institucional de Renfe en Galicia.
En esa comunicación le recuerda que ya planteó en anteriores ocasiones la necesidad de poner en marcha tales servicios, «en cumplimiento de los compromisos asumidos por el Gobierno de España en el Congreso de los Diputados en relación con recuperación inmediata de todos los servicios ferroviarios» para volver a prestarlos como antes de la pandemia.
En base a ello y dando respuesta a las demandas de Sabariz, el pasado mes de noviembre el citado representante de Renfe le contestó «comunicando que estaba previsto que estos servicios de trenes cortos Vilagarcía y Santiago y viceversa, fueran repuestos en febrero de 2023».
Un plazo que se ha cumplido de ahí que Sabariz se lo haga saber a Javier Pérez López en este nuevo escrito, en el que lamenta que «todavía no sabemos nada de dicha reposición».
Pide información.
De ahí que el pontecesureño vuelva a solicitar información a este respecto para saber «si ya se conoce la fecha exacta en la que van a circular los trenes y los horarios de los mismos, haciéndo hincapié en la imporancia que tiene para toda esta comarca contar con estos servicios».
Y, como se decía anteriormente, Sabariz aprovecha esta comunicación y la demanda que conlleva para insistir ante Renfe en que «si bien estos trenes no paraban en Catoira, es fundamental que ahora lo hagan».
Lo cree así porque, «no tiene sentido que, precisamente, unos trenes de proximidad por la vía convencional, se salten esta parada», la cual «resulta fundamental no solo para los catoirenses, sino par los usuarios del tren que suben y bajan en dicha estación y que residen en comarcas como Barbanza».
Representantes de los concellos que integran Mar de Santiago en un acto en Fitur durante la edición del año pasado
El geodestino Mar de Santigao, del que forman parte los concellos de Valga, Vilanova, Catoira y Pontecesures, participará la propia semana en la feria turística Fitur, en Madrid. Para ello, preparan nuevas acciones turísticas y culturales para reforzar el posicionamiento de la marca nacional e internacionalmente.
En Fitur, Mar de Santiago presentará las líneas estratégicas con las que trabajará durante este año para continuar posicionando el Xeodestino Turístico. El acto de presentación tendrá lugar el viernes 20, en el stand de Galicia, y se centrará en promocionar los recursos culturales, históricos, paisajísticos y gastronómicos de los territorios que forman parte de la marca, siempre teniendo como eje principal la “Traslatio”, la ruta marítimo fluvial por la que se defiende que llegaron los restos del Apóstolo Santiago desde Jaffa, dando origen al hito Xacobeo y al fenómeno de las peregrinaciones. En representación del Concello de Valga estarán el alcalde, José María Bello Maneiro, y las concejalas Carmen Gómez y Malena Isorna.
Campaña provincial
Desde Mar de Santiago explican que, desde su constitución, en 2021, consiguieron crear y consolidar un producto turístico sólido y diferenciado, ofreciendo a los peregrinos la posibilidad de continuar con la experiencia Xacobea navegando y viviendo la experiencia única de la Translatio.
Desde la puesta en marcha de este proyecto, se registraron 13.000 visitas y la marca se tiene presentado a más de 100 turoperadores. Además se crearon y promocionaron más de veinte paquetes turísticos. El trabajo realizado, explican desde Valga, cristalizó el año pasado con la puesta en marcha de la excursión Mar de Santiago, con salida todos los jueves del verano. De cara a la próxima campaña, ya se trabaja en nuevas acciones turísticas y culturales que se presentarán en Fitur. También la Diputación de Pontevedra tiene previsto presentar en la feria madrileña su campaña para este año. La artesanía será la protagonista del lanzamiento de esta acción promocional, con sapos artesanales o pendientes de las colareiras de O Grove entre los signos más característicos.
A Coruña-Ferrol y Ourense-O Carballiño serán los primeros. El resto dependerá de la incorporación de nuevos maquinistas
Un día después de que el Congreso aprobara una moción del PP —con el apoyo del PSOE— para que se recuperara toda la oferta ferroviaria perdida por la pandemia, Renfe anunciaba ayer el primer paso para restituir las últimas frecuencias que quedaban por recuperar de las que fueron suprimidas tras el primer estado de alarma, en marzo del 2020. Las primeras conexiones beneficiadas serán las de A Coruña-Ferrol y las de Ourense-O Carballiño, en las que desde el día 11 circularán el 100 % de los trenes suprimidos por las restricciones de movilidad del covid.Regístrate gratis y recibe en tu correo las principales noticias del día.
La operadora pública aseguraba en un comunicado que la oferta ferroviaria en Galicia «está restablecida en su mayor parte y la voluntad de Renfe es completar la reposición de estos servicios en los próximos meses, a medida que se vaya incorporando el nuevo personal de conducción». Es decir, la reposición de servicios no depende ya de la recuperación de los niveles de demanda prepandemia, sino de la disponibilidad de maquinistas, pues se produjo un vacío en el reemplazo de las jubilaciones debido, entre otras razones, a las restricciones sanitarias para poder hacer prácticas en cabina. Los nuevos profesionales que han salido de los últimos procesos formativos y de las convocatorias de empleo se irán incorporando paulatinamente a los servicios de media distancia y esto permitirá recuperar frecuencias que llevan suprimidas más de dos años y medio.
En el caso de A Coruña-Ferrol, se pone en circulación el tren perdido que unía la ciudad naval con la estación de Betanzos-Infesta y en la conexión con A Coruña se restituyen las tres frecuencias diarias, frente a las dos que circulan en la actualidad. En el caso de los servicios entre Ourense-Carballiño y Santiago por la línea convencional se pasa de un solo tren actual a tres por sentido. También se reconfiguran los horarios «para adaptarlos a las necesidades de movilidad y cubrir más franjas horarias de desplazamiento».
El sindicato CGT reclamó recientemente a Renfe la reposición de todos los servicios suprimidos aprovechando el aumento de la demanda por los abonos gratuitos de media distancia, que se prolongarán durante todo el año 2023. Mencionaban la conexión Vigo-Ourense-León, los trenes de proximidad entre la ciudad olívica y Pontevedra y entre Vilagarcía y Santiago, así como las frecuencias suprimidas en la conexión Lugo-A Coruña. Renfe se ha comprometido a reponer todos estos servicios, pero para ello debe aumentar el número de maquinistas que están vinculados a las residencias de media distancia de Galicia.
Salvo los trenes de proximidad que aún no han sido recuperados, el eje atlántico entre A Coruña y Vigo funciona con el número de plazas máximo que puede ofertar Renfe con el material rodante y los maquinistas con los que cuenta en la actualidad. Es la fórmula para absorber el aumento de la demanda provocada por los abonos gratuitos en el eje ferroviario más utilizado de la comunidad.
La CGT también propuso a Renfe una serie de medidas para evitar los continuos retrasos que se producen en esta conexión y que suponen importantes contratiempos para los usuarios que utilizan el tren para llegar a sus puestos de trabajo. Entre ellas está la puesta en servicio del ERTMS entre A Coruña y Vigo, un sistema de seguridad que lleva ocho años en proceso de instalación y pruebas.
La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, y el vicepresidente, César Mosquera, presentaron los números del Plan Concellos para 2023, aprobado por el pleno de dicha institución a finales de octubre y que, según explicaron, sale a la luz con antelación “permitiendo así a los ayuntamientos planificar con suficiente antelación de cara al año próximo”. De los 44 millones de euros de los que está dotado el plan, 8.301.966 euros se los repartirán los once municipios pontevedreses de Área de Compostela.
Con respecto al de este año, el Plan Concellos de 2023 crece en un millón de euros, un incremento que, según explicaron Silva y Mosquera, irá destinado íntegramente a reforzar a los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes como vía para hacer frente a los efectos de la crisis global de inflación.
En cuanto a la distribución de los recursos, explicaron que se reparten en tres líneas de financiación: la línea 1, de inversiones, que alcanza los 30,5 millones de euros; la línea 2, de gasto corriente, pago a proveedores, amortización y actividades, que estará dotada con 4 millones de euros; y la línea 3, de fomento del empleo, para la conservación y el funcionamiento de bienes y servicios municipales, que contará con 9,5 millones de euros el próximo año.
REPARTO. De los 44 millones con los que está dotado el Plan Concellos de la Diputación de Pontevedra para 2023, irán para los once municipios pontevedreses de Área de Compostela 8,3 millones de euros, un dinero que destinan, por lo general, a inversiones en obras, amortirzar deuda, reforzar servicios municipales y gasto corriente. El Ayuntamiento de A Estrada es el que recibe una mayor dotación, con 1.559.742 euros.
Le siguen otro de los grandes concellos de la zona, Lalín, que percibirá 1.528.379 €, y Silleda, que contará el próximo año con 843.568 €.
Por su parte, Caldas de Reis va a recibir 770.484 euros; Vila de Cruces obtendrá por este concepto 693.286 €; Valga contará con 586.040 €; Cuntis percibirá 580.234 €; Moraña 505.017 €; Catoira 445.972 €; Portas 402.865 €; y, finalmente, Pontecesures recibirá 386.379 euros.
Después de destacar que cada municipio recibe su aportación en base a una fórmula que tiene en cuenta su superficie, población, número de núcleos y densidad demográfica, Carmela Silva afirmó que la Diputación “respeta la autonomía local y permite a los concellos planificar con tiempo su actividad”.
ALIANZA INSTITUCIONAl. Sólo así, según resumió la mandataria provincial, es posible esta alianza institucional para que los ayuntamientos “puedan asumir sus competencias con recursos suficientes, impulsando grandes transformaciones y que la gente, viva donde vida, tenga derechos y servicios”.
Silva destacó el impacto transformador de la apuesta de la Diputación por un plan reglado de financiación municipal modélica: “Estamos haciendo lo que hay que hacer: buenas prácticas políticas, aprobando en tiempo y en forma todo lo que tiene que ver con la financiación de los municipios. Somos la administración que está más cerca de los concellos. Y no es palabrería: son datos, son proyectos y hechos”, zanjó.
En esta línea, la presidenta aludió a los informes del Ministerio de Hacienda que sitúan a la de Pontevedra como la diputación que más transfiere. “Es un esfuerzo casi sobrehumano que desde 2016 hayamos sido capaces de trasladar 340,7 millones de euros a los ayuntamientos desde una Diputación que tiene una media de 175 millones de euros de presupuesto anual”, explicó.
Finalmente, hicieron un balance de la evolución del Plan Concellos desde que se puso en marcha en 2016 hasta la actualidad, período en el que se repartieron entre los 59 municipios de la provincia de menos de 50.000 habitantes más de 340,7 millones de euros, de los que más de 156,7 millones fueron a parar a los de menos de 10.000 habitantes; más de 110,3 millones para los de entre 10.001 y 20.000 habitantes; y cerca de 73,6 millones de euros para el grupo con una población comprendida entre los 20.001 y los 50.000 habitantes.
Además, desde el ejercicio de 2016 y hasta este año los recursos del Plan Concellos hicieron posible la realización de 2.913 obras, equipamientos y actuaciones en el marco de la línea 1 de inversiones en obras, como mejoras de las calles, caminos y senderos, actuaciones en edificios municipales, abastecimientos de agua potable y saneamientos, cultura, deporte, informática, actuaciones en espacios públicos o adquisición de materiales.
La portavoz del PSOE de Valga, María Ferreirós, denuncia abiertamente que el alcalde de la localidad, José María Bello Maneiro, mintió a ocho pequeñas empresas del municipio que solicitaron ayudas extraordinarias por la pandemia del covid. La socialista expone que fue el 9 de diciembre de 2021 cuando el Concello valgués sacó la convocatoria de ayudas de la que podían beneficiarse firmas del sector de la hostelería, comercio, agencia de viajes y similares. Esas ayudas –dice el PSOE– se financiarían con cargo a un crédito de 17.109 euros preasignado por la Diputación de Pontevedra en el marco del Plan Concellos. Según María Ferreirós el Concello presidido por Bello Maneiro no llegó a solicitar el dinero a la administración municipal.
Eso sí, señala la socialista que seis meses después de la convocatoria (el 27 de junio de este mismo año) el alcalde firmaba la resolución mediante la cual se le denegaba la ayuda a las ocho empresas que la habían solicitado. En este sentido Ferreirós asegura que “na resolución do expediente desaparece toda mención á achega provincial, dado que o Concello non chegou a tramitala”.
Explica Ferreirós que las bases de la convocatoria del Concello de Valga eran idénticas a las publicadas en su día por la Diputación para los concellos interesados. Eso sí, con una diferencia. La convocatoria de la ayuda provincial apuntaba a que las subvenciones concedidas eran totalmente compatibles con las dadas por otras administraciones. Sin embargo en la convocatoria del Concello se optó por declararlas incompatibles. De ahí que en la resolución firmada por Bello Maneiro se utilice este argumento para desestimar las ayudas a las firmas solicitantes.
Ante esta situación la portavoz socialista en Valga exige “explicacións inmediatas” al gobierno local al entender que se encuentra delante de una “cadea de mentiras ao tecido empresarial” de la localidad. Advierte Ferreirós que “o señor alcalde convocou unhas axudas a partir dunha achega da Deputación que non chegou a solicitar e tardou máis de seis meses, nun alarde de axilidade administrativa, en facer unha trapallada de resolución para denegar todas as axudas sen aclararnos se tiña crédito aprobado ou non”. Por otra parte la socialista destaca que el Concello conocía “sobradamente cando publicou a convocatoria que unha trintena de empresas de Valga xa obtiveran axudas da Xunta e que, por tanto, se estas novas axudas ían ser incompatibles, o resultado estaba cantado”.
Es por ello que entiende la socialista que “ao final, oito empresas de Valga que podían ter recibido unha inxección de máis de 17.000 euros que a Deputación lle ofreceu a Valga dando todas as facilidades quedaron a cero”.
La portavoz del PSOE asegura que solicitará todas las declaraciones sobre lo que ella considera un proceder “opaco no que os fundamentos da convocatoria dunhas subvencións non coinciden cos da súa resolución”. Advierte que las empresas solicitantes no recibieron ninguna notificación a día de hoy.
GRABADO de una bendición de locomotoras en la estación compostelana.
DE AQUEL CARRIL-CORNES al de la actualidad, Vilagarcía- Santiago, ya van 149 años de historia integrado en el Eje Atlántico vertebrador de Galicia. Es por ello que, partiendo de la base de conocer de dónde venimos para tener claro a dónde vamos, queremos recordar nuestro pasado para saber mejor nuestro destino, conociendo nuestras circunstancias y penurias a lo largo de la historia de este ferrocarril, lleno de ilusiones y quiebras, de proyectos frustrados en su tiempo trascurriendo por las distintas vicisitudes, en la que fue configurándose hasta la actualidad muy lentamente. En este trayecto atlántico se encuentran las dos terceras partes de la población gallega, con parámetros de doble vía electrificada y apta para circular a 220 km/h con trenes más confortables de viajeros y mercancías.
Ya es una realidad ese eslogan que cita que las distancias no se miden en kilómetros, sino en tiempos. Bien es cierto que con la entrada de la alta velocidad hemos sido todos más puntuales; los trenes llegan y salen todos a su hora dejando sin excusa posible los retrasos y demoras en nuestro quehacer diario, aunque motivado por las medidas de ahorro energético la demanda ha aumentado considerablemente y la ocupación roza el lleno, ante la necesidad de más plazas disponibles. Nos quedan pendientes las obras que permitan la continuidad por el sur hacia la frontera portuguesa, Oporto y Ourense con la construcción del túnel pasante de Vigo y la prolongación hacia Ferrol.
UN POCO DE HISTORIA. El siglo XIX ha estado marcado por la industrialización, las revoluciones y el despegue de ese gran invento que llamamos ferrocarril, impulsor del desarrollo económico, constituyendo el instrumento válido para mejorar las comunicaciones. Gracias a ello en pocos años hemos pasado de los carromatos, diligencias, ómnibus de caballos y mulas al tren, más cómodo, barato y rápido. Los medios de transporte en Galicia a mediados del siglo XIX eran arcaicos, sobre todo los terrestres.
Debido a nuestros orígenes celtas era más fácil relacionarnos por mar con el norte de europa que con el resto de la Península por los puertos del Padornelo, la Canda y O Cebreiro, siendo una de muchas causas del ancestral aislamiento. Por este motivo el tren ha sido y será el símbolo de progreso y desarrollo, teniendo una enorme importancia en la población reclamando a los poderes públicos el paso de los caminos de hierro por sus localidades. Surgen de esta manera los periódicos locales que proliferan entre 1840 y 1890 como el Faro de Vigo fundado en 1853, El Ferrocarril, posteriormente El Ferrocarril Gallego, entre otros. Y todo ello coincide en un momento político convulso con cambios de regímenes y de presidente de Gobierno. Nada más comenzar la década de 1860 la Sociedad Económica de Amigos del País, de Santiago de Compostela, entidad llena de inquietudes, ante la postración económica y social en la que se encontraba Galicia en aquella época, concibe la idea de hacer un tendido ferroviario entre Santiago y la ría de Padrón con el fin de dar salida e intercambio a los productos de la tierra y el mar, y también recibir otros productos necesarios para la incipiente industria Compostelana, tal y como se expresa en la Revista Económica (Jornal agrícola, artístico y comercial) publicación de la Sociedad Económica de Amigos del País.
Este ferrocarril haría realidad el viejo sueño de convertir Santiago en puerto de mar y esto suponía un renacimiento de la riqueza y progreso como la que supuso los comienzos de la era cristiana, con la llegada, también por mar, del cuerpo del Apóstol Santiago. Esa idea era de tal envergadura económica que lo primero que hace la Sociedad Económica de Amigos del País es darla a conocer al Ayuntamiento de Santiago para que en febrero de 1860 se cree una Comisión mixta Concello-Sociedad Económica denominada Junta Encargada del Proyecto de Vía Férrea de Santiago a la Ría de Padrón, presidida por Joaquín Caballero Piñeiro y que formaría parte en ella el insigne geógrafo gallego Domingo Fontán, que se encargaría de todos los trámites que esa gran empresa requerirá a lo largo de los siguientes años. Domingo Fontán corrigió posteriormente el proyecto para que la línea llegase hasta Carril, ya que el río Ulla no era navegable en bajamar, siendo únicamente en pleamar cuando podrían subir desde Carril hasta Pontecesures las barcazas. Esto suponía la duplicación del recorrido y, por lo tanto, de su inversión.
PRIMERA LÍNEA DEL FERROCARRIL GALLEGO. Y por fin, tras once años intermitentes de obras, el 15 de septiembre de 1873 es la fecha de la puesta en servicio del primer ferrocarril gallego. Con gran transcendencia para el progreso y el desarrollo socioeconómico, a las 12.45 horas se forma una batería de 4 locomotoras de vapor de la compañía: ‘Montero Ríos’, ‘Coruña’, ‘Santiago’ y ‘Jerez’, la cual en 1882 cambiaría el nombre por ‘Pontevedra’. Entre el entusiasmo popular se calcula que asistieron unas 1.500 personas. Se pusieron a la venta billetes de 1ª, 2ª y 3ª, y este primer tren comunicaría Cornes, por entonces perteneciente al ayuntamiento de Conxo, y Carril, dependiente del ayuntamiento de Santiago de Carril.
Este primer ferrocarril gallego sucedía 25 años después de la primera puesta en servicio del primer ferrocarril peninsular entre Barcelona y Mataró, acaecido el 28 de octubre de 1848. Dos años más tarde, el 20 de octubre de 1875, saldría de A Coruña hasta Lugo el primer convoy de la que sería la primera línea que conectaría Galicia con el resto de España, por Monforte-León y Palencia, concluida en 1883. Este primer tramo, de 42 km de hermoso recorrido, bordea la franja lateral de la ría de Arousa y la bella isla de Cortegada, así como los ríos Ulla y Sar, atravesando la vega de Padrón para continuar con las comarcas de O Ullán y Amaia.
Las infraestructuras más destacadas serían los túneles del Faramello y Conxo, así como dos puentes metálicos, uno en Conxo (A Ponte de Ferro) de 40 m de largo y 20 m de altura y otro entre Pontecesures y Padrón límite en A Coruña y Pontevedra sobre el río Ulla, denominado Insua, de 4 tramos de 125 m, sustituido por otro de hormigón en 1935 (actualmente se pueden divisar los antiguos pilotes). Contaba con siete estaciones intermedias que inicialmente fueron construidas en madera.
Cabe señalar la escuela de aprendices de Renfe en las proximidades de Carril (Salgueiral-Bamio), la cual sirvió de escuela de formación profesional durante muchos años y salida a cientos de ferroviarios en Renfe y ADIF en toda la red española. Durante muchos años transportó emigrantes, productos de los puertos, agrícolas, forestales y ganaderos, carbón sal etc. entre la ría arosana y Santiago y viceversa. Fue un tren muy tradicional; allá por donde pasaba le llamaban “el Tren de la lechera”. Existen bellas historias como el denominado Tren de Varela que conducía la locomotora “Caldas de Reyes), que con tanta humanidad paraba el Sr Varela para recoger y dejar las campesinas y lecheras del lugar. Durante el verano, muchos Compostelanos y de las comarcas por donde discurría este ferrocarril, utilizábamos con frecuencia estos trenes para gozar de las playas arosanas de la Concha y Compostela.
En 1880 se hace cargo del compostelano el inglés John Trulock y, en 1886, cambia de nombre la compañía ferroviaria pasando a ser The West Galicia Railway Company, trasladando su sede social y el consejo de Administración a Londres, aunque la Gerencia permanecería siempre en Vilagarcía. El sr. Trulock se establece definitivamente en Padrón, en donde años más tarde nacería su nieto, el literato Premio Nobel Camilo José Cela Trulock. Entre los personajes ilustres precursores de este ferrocarril que tuvieron alguna relación con la obra, aparte del abuelo de Camilo José Cela, destaca Domingo Fontán, matemático, diputado y geógrafo, natural de Portas, autor de la Carta Geométrica de Galicia, sobre la cual se sirvió para la confección de los estudios de los trazados de esta línea en 1860 por el Ingeniero inglés Thomás Rumball. Otro personaje ilustre fue Ramón Valle Inclán Bermúdez, padre de Ramón María del Valle Inclán, una de las mejores plumas de nuestra literatura. Fue secretario del consejo de administración y accionista de esta línea. Dicha línea abarca un importante patrimonio cultural y paisajístico muy próximo a las estaciones y a lo largo de su trazado, destacando la Casa Museo de Rosalía de Castro, el Jardín Botánico, la sede de la Fundación Camilo José Cela en Padrón; en Catoira las Torres del Oeste, muy recordadas todos los años en las fiestas viquingas; las playas de la Concha, Compostela y Bamio en Vilagarcía; el embarcadero fluvial de ruta Xacobea fluvial de peregrinos del Mar de Arousa en Pontecesures, la ermita de A Escravitude y la playa fluvial e área recreativa de Vilarello en Valga, suponiendo todo ello un importante atractivo turístico.