Augas de Galicia insta aos concellos que se abastecen dos ríos Ulla e Tambre a establecer medidas que fomenten o aforro no consumo.

O Director de Augas de Galicia, Roberto Rodríguez Martínez, instou esta mañá aos concellos que se abastecen dos ríos Ulla e Tambre a establecer medidas que permitan acadar porcentaxes de aforro nos seus consumos. O director de Augas de Galicia presidiu esta mañá a primeira reunión de coordinación tras a declaración de alerta por seca nos sistemas 5 e 6, da Zona Centro -ao final da nota indícanse os concellos convocados-, para trasladarlles a situación concreta dos recursos hídricos e solicitar información sobre os usos e consumos de cada un dos concello, co fin de identificar e coordinar medidas necesarias para responder a posibles incidencias derivadas desta situación.

Recordou que o Plan da Seca, aprobado en 2013, é a folla de ruta que se está a seguir para paliar os efectos desta situación e sinalou que as recomendacións trasladadas en maio, sobre o fomento do consumo responsable, deben concretarse agora e deben avanzar no obxectivo de garantir o subministro actual. Rodríguez Martínez indicou que se ben é certo que moitos concellos xa adoptaron parte das medidas, é preciso que todos os municipios realicen o esforzo para sumar no obxectivo de reducir os consumos non prioritarios e aumentar os días de garantía dos recursos actuais. Tamén aclarou que existen medidas que son comúns a todos, como evitar o baldeo de rúas, o rego de xardíns…, e outras que serán obxecto de valoración, como as específicas, fixadas en función do consumo dos distintos usos non prioritarios de cada concello.

O director de Augas de Galicia aclarou que os concellos dos sistemas do Centro non presentan problemas de abastecemento, pero a realidade é que se padece unha seca hidrolóxica, isto quere dicir que os ríos destes sistemas levan menos caudal do que deberían levar nesta época -un 80%-. Neste sentido, indicou que é necesario traballar para estar preparados por se as predicións a longo prazo non se cumpren e ,ao igual que pasou co mes de outubro, caracterizado por precipitacións e que o de 2017 acabou sendo o cuarto máis seco da serie histórica- nos vindeiros meses non se rexistra a choiva suficiente que precisan os ríos.

Mantense a alerta

O director de Augas de Galicia salientou que se mantén a situación de alerta e afirmou que ??hai que ter en conta a que a esta situación se chega despois de rexistrar cinco estacións moi secas?; polo tanto ??cómpre ser prudentes e sería un erro pensar que polo paso dunha borrasca a situación mudou?.

Rodríguez Martínez salientou que será a Oficina Técnica da Seca, na súa reunión do vindeiro luns, a que analizará a situación con toda a información relativa ás últimas xornadas (estado dos encoros e comportamento da rede de aforos) e ás previsións máis inmediatas, para determinar as novas medidas e pasos necesarios; xa que se ben é certo que estas choivas tan intensas, a nivel de almacenamento de auga nos encoros, si que teñen unha repercusión inmediata, o importante é analizar como incide na recarga dos acuíferos e dos ríos, para que se recupere o sistema pouco a pouco.

Indicou que a Xunta mantén a situación de alerta por seca ata que se comprobe a consolidación da suba dos caudais base dos ríos da Conca Hidrográfica Galicia-Costa, é dicir, ata que se acaden valores de normalidade propios desta época do ano. Explicou que os ríos galegos son o que se denominan ??pouco inerciais?, é dicir responden moi rapidamente a un pico de choiva, pero aos poucos días baixan; polo que hai que esperar a que se estabilicen para ver canto ascendeu o caudal medio dos ríos e canto ten mellorado a recarga do sistema. Precisou que mudar a seca hidrolóxica que padece toda a Comunidade requirirá de máis tempo, máis recarga e de manter o consumo responsable.

Sistema 5: concellos de Ribeira, Pobra do Caramiñal, Boiro, Rianxo, Dodro, Rois, Ames, Santiago, O Pino, Touro, Arzúa, Melide, Toques, Palas de Rei, Monterroso, Antas de Ulla, Rodeiro, Dozón, Lalín, Silleda, A Estrada, Pontecesures, Valga, Catoira, Padrón, Teo, Vedra, Boqueixón, Viladecruces, Santiso e A Golada.

Sistema 6: concellos de Muros, Outes, Negreira, A Baña, Val do Dubra, Tordoia, Trazo, Cerceda, Ordes, Oroso, Frades, Mesía, Vilasantar, Sobrado, Boimorto, Noia, Lousame, Ames, Brión, Porto do Son e Santiago de Compostela.

Página oficial de Augas de Galicia

El nuevo pabellón padronés vuelve a quedar inutilizado por la lluvia.

Una vez más, el pabellón nuevo de Padrón, también conocido como el del grupo escolar, quedó inutilizado por el agua que entra en la instalación y por la condensación que tiene. Sucedió el fin de semana, tal y como denunció el grupo de Alternativa por Padrón (AxP), después de que dos equipos de fútbol tuvieran que suspender los partidos previstos.

AxP asegura que la mala situación de este pabellón «vai a máis e cada vez chove en máis zonas», incluida la propia pista y las gradas. En principio, las deficiencias son achacables a un defecto de construcción de la cubierta de la infraestructura pero, pese a ello, para AxP el gobierno local de Padrón «non dá botado man do pavillón» para arreglar sus daños, no solo por la filtración de agua sino también por los problemas de condensación, que lo convierten en un espacio resbaladizo. Este grupo político también llama la atención sobre la «deficiente limpeza» de la instalación deportiva.

Desde el Concello explican que en su día pidieron una memoria para presupuestar el arreglo de la cubierta por un importe de 40.000 euros. También afirman que el problema se debe a un defecto de construcción en el tejado. El gobierno local asegura que la obra no se puede incluir en un plan de la Diputación, como así solicitó en su día AxP, porque al Concello no le consta la disponibilidad del pabellón, inaugurado en el año 2000 y financiado en su mayor parte por la Xunta. Por ello, el ejecutivo local quiere incluir en el presupuesto de 2018 una partida para reparar la cubierta de las instalaciones.

La Voz de Galicia

La ría de Arousa se moviliza contra la mina de Touro porque «contaminará el río Ulla».

La última vez que el sector marítimo de la ría de Arousa se unió fue para frenar la Lei de Acuicultura. Y lo consiguió. Dos años después, las cofradías de pescadores de ambos márgenes de la ría, agrupaciones de mejilloneros -incluido el Consello Regulador- y otros colectivos del sector han vuelto a hacer piña, en esta ocasión para que la Xunta no autorice la ampliación de la mina de cobre de San Rafael, ubicada en los municipios de Touro y O Pino, en plena cuenca hidrográfica del Ulla, río que proporciona el principal aporte de agua dulce a la ría de Arousa.

Bajo el paraguas de la Plataforma en Defensa da Ría de Arousa (PDRA), el sector marítimo arousano emprenderá una campaña tanto en O Salnés como en Barbanza para informar a los vecinos del «grave impacto» -tanto a nivel ambiental como productivo- que tendrá el megaproyecto minero para el Ulla y para toda la ría de Arousa, de la que viven directamente 30.000 familias. «Los vertidos de la propia actividad minera y los depósitos de almacenamiento de residuos son de tal magnitud que van a afectar a la calidad de las aguas del Ulla, y por tanto, a las de la ría de Arousa. El futuro de miles de familias está en juego y también el tejido socioeconómico de todos los pueblos y villas de la ría», advierte la Plataforma en los escritos remitidos a la Consellería do Mar y a la de Economía e Industria para que la consideren «parte interesada» en el procedimiento y así poder tener acceso a los informes de la macroexplotación minera, cuyo proyecto salió a exposición pública en pleno mes de agosto, espeta el portavoz de la Plataforma, Xaquín Rubido.

Además del reparto de folletos y de las charlas por parte de geólogos y biólogos, los colectivos presentarán mociones en todos los Ayuntamientos arousanos, y al igual que en la movilización contra la Lei de Acuicultura, intentarán que sean presentadas por los alcaldes de cada municipio. En el caso de A Illa, el patrón Juan José Rial Millán apuntó ayer que la problemática ya fue expuesta a todos los partidos isleños y que se llevará a pleno en enero.

Los pósitos y agrupaciones marítimo-pesqueras quieren dar a conocer a la población de la ría de Arousa las nefastas consecuencias que aseguran tendrá la reapertura de la mina de San Rafael.

Riesgo para la salud

Además de afectar a la calidad del agua del Ulla y de la ría, y por tanto a los sectores productivos, advierten que también se verá perjudicado el turismo e incluso la propia salud de las personas porque «el agua potable que utilizan más de 155.000 habitantes llevará los contaminantes de la mina». Recuerdan que los concellos que captan agua del Ulla por debajo de la mina son Vedra, Boqueixón, Teo, Padrón, Dodro, Rianxo, Boiro, A Pobra do Caramiñal, Ribeira, Pontecesures, Valga, Catoira y Vilagarcía.

La Plataforma en Defensa da Ría explica que para separar el cobre de las rocas molidas se utilizarán 14.825 toneladas de compuestos químicos «con distinto grado de peligro para el medio ambiente y las personas (irritantes, tóxicos, alergénicos, cancerígenos) que van a quedar indefinidamente almacenados en las balsas de lodo contaminantes».

Las cofradías arousanas añaden que los cursos de agua de la mina drenan hacia el río Ulla, lo que «significa que durante décadas toda la contaminación que sea arrastrada por el agua desde la mina irá trasladándose siempre hacia el río y hacia la ría de Arousa. Los peces jóvenes son particularmente vulnerables a los metales pesados, y también los moluscos, que son filtradores y necesitan agua de calidad». Avisan que ya con las dimensiones actuales, «después de 30 años de funcionamiento de la mina, los afluentes del Ulla están seriamente dañados, pues en sus aguas prácticamente no hay vida».

Faro de Vigo

Los depósitos de lodos ocuparán 538 campos de fútbol.

El portavoz de la PDRA, Xaquín Rubido, acompañado de una treintena de representantes del sector marítimo arousano, advirtió ayer en la sede del Gato Negro de Carril que el proyecto presentado por la multinacional «Atalaya Mining» es «de dimensiones desconocidas para nuestro país». Y es que según los datos aportados por los colectivos, la superficie de extracción prevista es de 689 hectáreas, de las cuales 269 serán depósitos de lodos. O lo que es lo mismo: estas balsas ocuparán el espacio equivalente a 538 campos de fútbol con vallados que sumarán 6 kilómetros de largo y tendrán un mínimo de 55 metros de altura en los puntos más bajos. «Son dos bombas atómicas como las de Hiroshima y Nagasaki que destruirán la ría», alerta el patrón de A Illa. «Durante la construcción de esas balsas se estará drenando al Ulla sin ningún tipo de depuración, y solo por eso la Xunta ya tendría que rechazar el proyecto. Esa mina ocupará 123 kilómetros cuadrados. A Illa de Arousa tiene 7 km2 y O Grove, 22. Será un boquete en el centro de Galicia tremendo»,comparan desde la Plataforma.

Además, se prevé que el consumo de agua de la mina de San Rafael sea seis veces el de los ayuntamientos de O Pino y Touro juntos. «Estamos en una sequía sin precedentes. La Xunta debe decidir si enriquece a una multinacional en detrimento de la salud de miles de personas», concluyen.

Faro de Vigo

La ría de Arousa se moviliza contra la «amenaza» de la mina de cobre de Touro.

La PDRA inicia una campaña informativa y presenta mociones en los concellos para recabar apoyos contra el proyecto minero.

La Plataforma en Defensa da Ría de Arousa se ha embarcado en una nueva batalla. En esta ocasión, miran Ulla arriba y ponen sus ojos sobre el proyecto para reactivar una gran mina de cobre en los ayuntamientos de Touro y O Pino. Esa zona ya fue explotada con anterioridad y los efectos devastadores de aquella acción, dicen desde la PDRA, aún se dejan sentir en muchos ríos de la zona. En esta ocasión, la envergadura del proyecto es tal que colectivos profesionales y sociales de ambos lados del mar de Arousa están convencidos de que sus efectos llegarán a este a través del caudal del río. Y no están dispuestos a consentirlo.

Así que se han puesto en marcha. Colaborando estrechamente con los colectivos de Touro y O Pino que desde hace ya algún tiempo articulan la oposición al proyecto minero, la PDRA ha elaborado unos panfletos informativos que repartirá en los municipios situados a ambos lados de la ría. En esos mismos concellos presentarán mociones para su debate en pleno, a fin de conseguir que también las administraciones locales se posicionen en contra de este proyecto. Darán todos estos pasos mientras esperan a que la Xunta, en concreto las consellerías de Mar, de Medio Ambiente y de Industria, les concedan las entrevistas que han solicitado para abordar esta cuestión. De lo que se trata, explicaba Xaquín Rubido, Xocas, es de generar una gran movilización social contra el proyecto, a la par que convencer a la Xunta de que no puede autorizar una iniciativa que pondría en jaque el modelo económico de Arousa.

Representantes de las cofradías arousanas y del sector del mejillón comparecieron ayer en rueda de prensa para exponer todas esas acciones y para explicar, pormenorizadamente, la razón de su oposición a la mina de Touro. Y es que la iniciativa supone una amenaza, dicen, para las 30.000 personas que viven del mar arousano, y para todo el tejido social y económico que se genera a su alrededor. Por no hablar, además, del turismo.

«Este megaproxecto ten unhas dimensións descoñecidas no noso país», narra Xaquín Rubido. Supone «unha nova espada de Damocles sobre o sector do mar», argumentaba el patrón mayor de Cambados, Ruperto Costa, quien considera que la Xunta «tense que dar de conta que non pode apoiar unha actividade impulsada por unha multinacional que pode poñer en risco o modelo que lle dá de comer a moitas familias na ría de Arousa».

Desde A Illa, Juan Rial Millán habla de que autorizar la mina de Touro significaría «colocar unha bomba de reloxería» que amenaza no solo a la ría, sino a una amplia zona de la cuenca del Ulla. Alfredo Otero, representante del Consello Regulador, llamó la atención sobre que la autorización de la mina sería dar carta blanca «á apertura dun gran boquete no medio de Galicia». Y es que la zona afectada por la explotación, que se prolongaría durante al menos 16,5 años, serían cerca de 270 hectáreas de terreno. «Uns 538 campos de fútbol», decía, para ayudar a asimilar la cifra, el patrón mayor de Cambados.

Con todos esos datos en la mano, los integrantes de la PDRA consideran necesario iniciar una campaña de movilización que no cesará hasta que la Xunta certifique que el proyecto de la mina de Touro jamás saldrá del papel.

La Voz de Galicia