En 2010 se concedió licencia de rehabilitación, pero no se usó.

En el año 2010 se concedió licencia a Plácida Castro Magariños para rehabilitar el edificio que ocupaba el restaurante Casa Castaño para habilitar «cuatro viviendas y locales -se supone que comerciales- en la calle Víctor García, número 20, esquina con la calle José Novo Núñez número 1». Se hacía una vez obtenida autorización de Patrimonio de la Xunta, ya que la fachada del inmueble que da al río Ulla está protegida.

El hecho de que se presentara aquel proyecto y se concediera licencia hacía albergar ciertas esperanzas de recuperación de un edificio otrora importante que ahora afeaba enormemente el entorno, a pesar de situarse en un lugar estratégico, junto a la entrada de la villa desde Padrón. Pero la mejora no llegó a ejecutarse y siguió pudriéndose en el olvido.

Desde entonces fue motivo de interpelación en el pleno de la Corporación en más de una ocasión, se produjeron problemas con los okupas, el deterioro siguió y ayer llegaron las llamas.

Faro de Vigo

Zafarrancho de obras para mejorar las carreteras de Arousa.

Ya se sabe, las obras son un mal necesario, un incordio que hay que sobrellevar con paciencia. Cuando son en las carreteras, las obras son una molestia compartida por todos los conductores que se desesperan sobre el asfalto. Quienes transiten con frecuencia por las rutas de la orilla sur de la ría lo van a descubrir pronto, ya que el Diario Oficial de Galicia publicaba ayer la licitación de un paquete de asfaltados y repintados que se van a desarrollar en varias vías de esta zona. En ese conjunto de actuaciones tiene previsto invertir la Xunta un total de 650.000 euros.

Aún pasará algún tiempo antes de que empiecen esos trabajos: las empresas interesadas podrán presentar sus ofertas hasta el 15 de abril, y a partir de ahí empezarán a correr los siempre pesados plazos de la burocracia. En cualquier caso, las máquinas acabarán por alcanzar las carreteras previstas en Caldas, Catoira, Pontecesures, Valga, Cambados, Meis, Ribadumia, Vilagarcía y Vilanova de Arousa.

En estas vías se van a realizar trabajos de mejora del firme, a fin de «prolongar a vida útil do pavimento». Las actuaciones previstas en las carreteras arousanas forman parte de un paquete de un plan global diseñado por la Xunta y con el que se pretende actuar sobre 700 kilómetros de carreteras de titularidad autonómica.

Un plan global

Unos veinte millones de euros se destinarán a «conservar a rede viaria en óptimas condicións co fin de incrementar a seguridade viaria e proporcionar unhas vías cómodas que melloren a calidade de vida e potencien o desenvolvemento económico dos municipios galegos».

La verdad es que, tras largos años de crisis, el mantenimiento de muchas de las vías que articulan la comarca dejaba bastante que desear. Poco a poco, se han ido retomando proyectos de mantenimiento como el que ya se está ejecutando en la carretera que une Vilagarcía con Pontevedra. Esa actuación se va a realizar por fases, y la primera ya ha echado a andar. Hace una semana comenzaban en el municipio de Barro los trabajos para la construcción de una rotonda que dará acceso al polígono de Sequeiros.

Sin grandes trastornos

Hasta la fecha, las obras -las únicas que la Xunta ha adjudicado dentro del plan de mejoras previsto para esta carretera- no han causado demasiados trastornos a los conductores que utilizan esa vía.

En el tramo en el que han desembarcado máquinas y obreros se han colocado vallas y se ha eliminado un carril de circulación, pero ahí acaban, de momento, las incomodidades a las que se están viendo sometidos los conductores. Claro que la construcción de la rotonda acabará obligando a restringir el tráfico.

La Voz de Galicia

El Ayuntamiento de Valga y siete empresas dan trabajo a una treintena de personas.

Es una propuesta de «Valga Emprende», un programa que beneficia a sesenta vecinos desempleados de esta localidad, Caldas de Reis, Catoira, Moraña, Portas y Pontecesures.

El Concello de Valga, presidido por el conservador José María Bello Maneiro, ha alcanzado un acuerdo de colaboración con siete empresas de la localidad, Pontecesures y Padrón para contratar a una treintena de desempleados.

Se trata de la mitad de los alumnos que participan en el programa laboral «Valga Emprende», presentado por la Administración local como una «novedosa y exitosa» experiencia que permite ofrecer formación específica a trabajadores de acuerdo con las necesidades de las empresas participantes.

Las firmas valguesas ODL, Extrugasa, Exlabesa, Urovesa y Distribuciones Lema, junto a Gama e Hijos (Pontecesures) y STAC (Padrón) participan en esta iniciativa que permitirá la inserción laboral de los ciudadanos beneficiarios, que si bien son inicialmente 27 pueden ser más a corto plazo, ya que «las empresas trasladaron al Concello su compromiso de contratar durante un periodo mínimo de tres meses a 32 desempleados participantes en el Valga Emprende», manifiestan en la Administración local.

El propio José María Bello Maneiro, acompañado de la concejala de Empleo, Carmen Gómez, se encargó de destacar las bondades de esta iniciativa empresarial, al tiempo que recordaba que «Valga Emprende» se centró hasta diciembre «en la formación transversal de los inscritos en ofimática, idiomas y técnicas de búsqueda de empleo».

Ahora llega por tanto el momento de las sesiones de formación específica, tanto a modo teórico como de forma práctica o presencial.

En este último caso la formación se desarrollará «tanto en instalaciones municipales como en las propias empresas participantes».

A modo de ejemplo, en el gobierno valgués comunican que «las prácticas de carretillero se realizarán en dependencias del Concello, las de puente mecánico en Extrugasa, las de soldadura en el instituto y las sesiones prácticas de pintura y electromecánica industrial, en Urovesa».

A esto hay que añadir que «Valga Emprende» contempla la realización de prácticas en las siete empresas participantes para que los alumnos, «distribuidos en función de sus habilidades y preferencias formativas», puedan familiarizarse con la actividad antes de la contratación.

Cabe recordar que «Valga Emprende» se puso en marcha el pasado mes de septiembre como programa integrado de formación y acceso al mercado laboral con participación de sesenta vecinos desempleados de esta localidad, Caldas de Reis, Catoira, Moraña, Portas y Pontecesures.

En la selección del alumnado también se tuvo en cuenta a los colectivos con más dificultades para encontrar trabajo.

Es un proyecto formativo avalado por la Consellería de Economía, Emprego e Industria, que permite a los alumnos participar en acciones formativas individuales y grupales adaptadas a las necesidades de cada uno de ellos, «siendo orientados laboralmente para la búsqueda activa de empleo».

Cuenta con una inversión de más de 100.000 euros procedente de la Xunta y, como queda dicho, incluye prácticas en empresas del entorno, así como estrategias de motivación de los alumnos para que se animen a buscar empleo y sepan cómo hacerlo.

En el gobierno valgués consideran que con este programa se incide en las políticas de empleo de la localidad, siendo ésta «una de nuestras líneas de trabajo primordiales», aseguran en el equipo de Bello Maneiro, donde consideran que la población «aún nota las consecuencias de la crisis económica de la última década y de la consiguiente destrucción de puestos de trabajo».

La Voz de Galicia

El alcalde de Padrón ofrece a los ediles del PGD entrar en la Xunta de Goberno Local.

El alcalde de Padrón, Antonio Fernández Angueira (PP), se ha reunido esta mañana en su despacho del Concello con el portavoz del Partido Galeguista Demócrata (PGD), Ángel Rodríguez Conde, para trasladarle personalmente su deseo de alcanzar un acuerdo estable entre los dos partidos que «permita impulsar a acción de goberno na segunda metade do mandato», según ha declarado el propio regidor.

En el transcurso de la reunión, que se prolongó durante más de una hora, Fernández Angueira le propuso a Ángel Rodríguez que, «polo ben dos intereses xerais de Padrón», tanto él como su compañero de partido, Javier Guillán, «pasen a formar parte do executivo e asuman responsabilidades de goberno». El alcalde ha reconocido que «desde o PGD son críticos con certos aspectos da xestión municipal que consideran que se deben mellorar», por lo que les ha propuesto que, «máis alá da crítica fácil pero a veces con nulo percorrido, asuman responsabilidades de goberno para tentar mellorar as cousas desde dentro», según ha contado Fernández Angueira.

Sin profundizar en más detalles, el alcalde le ha transmitido al portavoz del PGD que, «de haber predisposición e de querer iniciar unha negociación, a proposta de saída pasaría por que os dous concelleiros do PGD se incorporaran á Xunta de Goberno Local e asumiran varias áreas de goberno».

Para Fernández Angueira, la valoración de este primer encuentro con el edil galleguista es «moi positiva», de modo que considera que «marca o comezo dunha nova etapa nas relacións entre o PP e o PGD». En este sentido, ha añadido que «hoxe falamos de aspectos da xestión municipal nos que coincidimos plenamente e doutros nos que temos máis discrepancias, pero no que estamos ambos absolutamente de acordo é que Padrón necesita un goberno máis forte para impulsar o seu traballo e ser máis áxil e eficaz á hora de dar resposta ao que precisan os padroneses», ha señalado el alcalde de Padrón.

«A reunión de hoxe creo que é un exemplo de madurez política e de normalidade, porque é unha reunión que se anunciou previamente e que se realizou con luz e taquígrafos, explicando o que se falou nela, porque, por enriba de todo, os padroneses deben saber que estamos a falar de cousas que lles importan e que teñen como obxectivo último poder mellorar a situación deste concello», ha concluido Fernández Angueira.

La Voz de Galicia

El riesgo de «maltrato animal» desaparece del escudo y el estandarte oficiales de Valga.

El Concello de Valga aprobará la semana que viene en pleno el cambio del escudo oficial y el diseño del nuevo estandarte del municipio. Aunque no es la causa de fondo que propicia o impulsa esta variación, en cierto modo también se contenta a los ecologistas, ya que desaparece de la imagen todo indicio de «maltrato animal», ya que el cordero que actualmente aparece colgado de una cuerda que lo sujeta por la barriga pasará a ofrecer una imagen mucho más portentosa, sin atadura de ningún tipo.

El nuevo diseño, logrado después de muchos años de pruebas y reuniones, parece contar con el apoyo de todos, tanto del Concello, incluida la oposición, como de la Xunta.

Trabajo de un historiador

El diseño final pertenece al historiador Eduardo José Pardo de Guevara y Valdés, profesor de Investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, director del Instituto de Estudios Gallegos Padre Sarmiento, vicepresidente de la Comisión de Heráldica de la Xunta de Galicia y miembro del Consello da Cultura Galega, entre otros cargos.

Diseñó la gran mayoría de los escudos de Galicia y ahora también el de Valga, esta vez gracias al apoyo del técnico municipal encargado del Museo de la Historia de la localidad ribereña, Santiago Chenlo Campos.

Este último explica que el cambio del escudo se produce porque el existente no cumple las condiciones de heráldica que determina la Xunta.

Desde hace años «había contactos con la Comisión de Heráldica y se elaboraron diferentes diseños previos que no llegaron a cumplir las expectativas de todos, pero después de mucho trabajo hemos alcanzado esta solución que sí parece agradar a todas las partes», esgrime Santiago Chenlo.

Desde 1816

El escudo actual data de 1816 e incluye la imagen del cordero colgando de una cuerda porque, se cree, en aquella época alguien pudo inspirarse en el emblema del Toisón de Oro, una orden de caballería fundada en 1429 por el duque de Borgoña y conde de Flandes, Felipe III de Borgoña. En este caso se usaba el cordero como imagen porque aquel animal era un símbolo de la ciudad de Brujas, que contaba con una importante industria lanar.

Pero el Toisón de Oro solo pueden emplearlo los lugares que el propio Rey autorizó, y Valga no es uno de ellos. Además de ser un símbolo que puede generar confusión.

De lo que se trata ahora es de evitarla y de homologar el escudo con base en los criterios de la Comisión de Heráldica.

Y al mismo tiempo, como reconoce el propio técnico municipal, se evitan problemas o suspicacias si alguien interpreta que el cordero atado de la barriga puede tener relación como maltrato animal.

En este sentido, parece que todos los que fueron consultados sobre el nuevo escudo coinciden en que «mejora la imagen y se evitan comentarios relacionados con el maltrato animal, ya que la nueva representación no es visualmente tan agresiva», puntualiza.

¿Cordelería o cordero?

Así pues, sigue representado el cordero en el escudo, lo cual puede tener sus orígenes en dos cuestiones diferentes, ligadas ambas a la parroquia de Cordeiro. Por un lado la cuerda representada en el escudo proviene del latín cordarium, y podría estar relacionada con la posible existencia de una cordelería en dicha parroquia, por su proximidad al río Ulla.

Pero la derivación lingüística de cordarium a Cordeiro «también nos lleva a pensar en un año u oveja joven, siendo ésta la segunda línea de investigación que explicaría la aparición del animal en el escudo».

Hay que tener en cuenta que «en 1836 se hizo una redistribución del territorio en toda España y la antigua jurisdicción, en la que se incluía Pontecesures y parte de Catoira, tenía en Cordeiro la sede administrativa central».

Fue cuando se formó el Concello y se trasladó la sede administrativa a Ponte Valga cuando se fusionaron las imágenes del cordero, el puente y el río, según relata el responsable del Museo.

Pero no solo se renueva el escudo, sino que se presenta el estandarte de la localidad, en el que parece «como si se girara el escudo», con la corona representada a modo de picos, con los colores amarillo y azul.

Elementos originales

«Ya había una propuesta de la Xunta de hace dos décadas que no parecía acertada para el gobierno local, por lo que desde entonces se mantuvieron diversas negociaciones hasta alcanzar este acuerdo», manifiesta Santiago Chenlo.

El técnico municipal se ocupó de «aportar ideas, tratando de conservar los elementos originales pero también dejando claro que la heráldica tiene un lenguaje propio y transmitiendo los conceptos de Cordeiro, de la cuerda, del puente y del río».

Termina diciendo que «hay que entender que es algo conceptual y que el nuevo escudo también busca sencillez, tanto en el diseño como en las formas y colores, y quiere ser visualmente limpio; en los diseños anteriores las cuerdas llegaban a hacer una especie de nudos y había otros elementos que visualmente entorpecían».

Faro de Vigo

Valga cuenta con una nueva propuesta de escudo y bandera municipal.

Una nueva propuesta de escudo y de bandera se llevará al próximo pleno de Valga para su aprobación. Lo hará contando, en principio, con una opinión favorable tanto del gobierno local como de la oposición y de buena parte de la asociaciones de la localidad. Lo hará tras pasar por la Xunta de Goberno del próximo lunes. Se trata de una nueva propuesta de la Comisión de Heráldica, que ha realizado una fusión entre la imágenes que expusieron hace ya dos mandatos y la versión con la que respondió el Concello tras mostrar su rechazo. Una fusión de ambas posibilidades, que mantiene como elementos clave el cordero y el puente que ya tienen presencia en el escudo actual pero no legal.

La Comisión de Heráldica señala que la imagen presentada permite «completar adecuadamente la actual representación», en referencia a las ondas que aparecen dibujadas en la parte inferior del puente. Se trata de una alusión específica a la fabricación de cuerdas, que, tal y como se recoge en la explicación enviada al Concello, es «probablemente la teoría más consistente respecto al origen del topónimo que dio nombre a la primitiva jurisdicción de Cordeiro o Cordario, de la cual se derivó el término municipal del mismo nombre, nacido en 1821 y renombrado ya definitivamente Valga a partir de la división municipal de 1836».

El cordero, por su parte, hace alusión a la otra teoría explicativa del aludido topónimo; y el puente evoca el lugar de Pontevalga, parroquia de Valga, donde tiene asiento la capitalidad del municipio. La bandera es semejante, en azul y con dos cuerdas amarillas, con sus cabos sueltos.

A pesar de que todavía está pendiente la aprobación en el pleno y en la Xunta, tras pasar previamente el período de exposición pública, el alcalde señala que lo previsible es que la propuesta salga adelante y que Valga tenga un escudo que cumpla con las condiciones que se exigen. «Se elaboró ya bajo la coordinación de la Heráldica pensando en su aprobación. Por el mismo motivo, tras tener el consentimiento de la oposición, nos reunimos con las asociaciones», señala Bello Maneiro, quien añade que, a pesar del consenso, la propuesta no despertó el mismo agrado entre todos los consultados.

La Voz de Galicia