El Concello de Padrón mejora la seguridad del trazado del Camino en A Ponte.

El Camino Portugués a su paso por Padrón es un poco más seguro y bonito con dos pequeñas actuaciones del Concello. Más seguro nada más entrar en el municipio, al pasar el puente sobre el Ulla en el núcleo de A Ponte, donde el Ayuntamiento instaló meses atrás una bionda de hormigón que obliga a peregrinos y viandantes a cruzar la intersección de la vía que conduce a la empresa a Finsa por un paso de peatones situado a unos metros.

Hasta la colocación de la bionda, peregrinos y viandantes cruzaban la vía nada más concluir el paso del puente sobre el Ulla, en el cruce con la vía N-550, con el consiguiente peligro. El Concello colocó el muro de protección después de que el pleno de la corporación aprobase una propuesta del BNG de Padrón, que el año pasado alertó de que lo peregrinos estaban «cruzando a estrada para a Aduana polo punto máis perigoso, xusto na intersección coa vía N-550».

El grupo nacionalista ya propuso entonces «prolongar o murete de separación da beirarrúa e a estrada ata o paso de peóns para evitar esta situación de perigo», que es lo que acaba de hacer el Concello con la colocación de la bionda de hormigón.

En otro punto del Camino Portugués entre Pazos y A Escravitude, el Ayuntamiento también realizó una obra que, en este caso, embellece el trazado, al mejorar el tramo entre Cambelas y Tarrío con un pavimento empedrado, que algunos ven excesivo pero que, en este caso, realza una zona del recorrido jacobeo ya de por sí hermosa. El Concello decidió utilizar piedra, precisamente, por ser un tramo del Camino Portugués.

El gobierno local tiene previsto continuar con la mejora del trazado hasta pasar el núcleo de Tarrío hacia Vilar, en A Escravitude, para lo que tiene un proyecto ya redactado y otro en previsión, según explicó ayer el concejal de Obras, José Ramón Pardo. En este caso también habrá zonas en las que se optará por hormigonado.

El cruce en las proximidades de la rotonda de Pazos es ahora el punto más peligroso

Resuelto el problema de seguridad para los peregrinos en el lugar de A Ponte, Padrón aún tiene más puntos que resultan peligrosos para los peregrinos y, sin duda, el cruce en las proximidades de la rotonda del hotel Scala en Pazos es el más grave de todos. Lo es pese a que el Concello solicitó hace tiempo que se adopten medidas para garantizar el cruce seguro de los peregrinos y vecinos en este punto próximo a la rotonda y, más concretamente, en la carretera AC-301 de enlace entre Padrón y Rois.

Llegados a la altura de la glorieta de la vía N-550, los caminantes siguen por la acera hasta la vía AC-301, donde se ven obligados a cruzarla sin ningún tipo de señalización para seguir su camino por el aparcadero del hotel.

Un segundo punto del Camino Portugués mejorable en cuanto a seguridad está en A Picaraña, en el cruce de la vía N-550 después de la rotonda. Los caminantes deben cruzar por un paso que no está regulado por semáforo.

La Voz de Galicia

El Concello de Padrón quiere anular todos los contenedores de basura subterráneos.

Ya retiró tres de las instalaciones y está pendiente de suprimir otras tantas: junto a la biblioteca, plazuela Cela y Murgadán.

El Concello de Padrón quiere anular todos los contenedores subterráneos de basura, a causa del alto coste de mantenimiento de los mismos. Tres de las seis instalaciones para el depósito de residuos ya están suprimidas y quedan pendientes otras tres: junto a la biblioteca, en la plazuela Camilo José Cela y en la calle Murgadán.

Así, están anulados y retirados los contenedores subterráneos que había situados junto al parque infantil, en la Rúa Longa; los de la vía N-550 en la avenida de Compostela y los de la plaza Ramón Tojo. En esta última, el Concello repuso, en su lugar, las losas de piedra de la plaza mientras que en la zona junto al parque instaló un banco decorativo y en la N-550 también repuso el firme.

Para anular y retirar los contenedores subterráneos de la calle Murgadán, en los que ya hay un aviso de que dejarán de funcionar en breve, el Concello construyó una base de cemento para crear una isla de recipientes en superficie de lado del río Sar, cerca de la pasarela peatonal que comunica la zona de O Bordel y la de A Barca.

Esta ubicación no gusta a muchos. A unos porque consideran que está «lonxe» de donde están los contenedores subterráneos en los que actualmente depositan la basura y a otros por estar situada de lado del río, de modo que aseguran que hay posibilidad de que los residuos acaben en el cauce. En cuanto a los situados en la plazuela Camilo José Cela, el Ayuntamiento busca una ubicación para los contenedores de superficie, que, un tiempo, estuvieron en el Paseo del Espolón.

Mientras no se anulan del todo en estas tres últimas ubicaciones, los contenedores de superficie están situados delante de los subterráneos, aunque ya hay alguno de estos últimos precintados y no se puede depositar la basura. De acuerdo con el Ayuntamiento, las instalaciones de los contenedores subterráneos dieron siempre problemas, de modo que su mantenimiento y reparación suponía un alto coste, salvo en el período que estuvieron en garantía, del año 2009 al 2011.

La Voz de Galicia

Los peregrinos siguen cruzando una vía en Pazos, en Padrón, sin ningún tipo de seguridad,

No hay paso de peatones pero una señal oficial del Camino, colocada recientemente, indica a los peregrinos que tienen que cruzar la carretera a la altura de la rotonda de Pazos, en el municipio de Padrón, en un tramo con gran volumen de tráfico. El Concello solicitó hace tiempo -por primera vez en enero del 2016- el pintado de ese paso de cebra, una vez que por este punto cruzan todos los peregrinos ya que está dentro de la última etapa del Camino Portugués.

De acuerdo con el alcalde, siguen esperando una contestación a esa solicitud. Entretanto, los caminantes se exponen a un atropello al cruzar sin ningún tipo de seguridad, al tiempo que los coches tienen que frenar y detenerse al encontrar al peregrino en el medio de la vía sin ninguna señalización previa, algo que se vuelve más peligroso en las horas en las que hay menos luz, como por las mañanas, cuando los caminantes salen casi de noche para recorrer el itinerario, tal y como destaca un conductor que habitualmente circula por ese punto.

Este es, sin duda, el tramo más peligroso a su paso por el municipio y, pese a ello, parece que por ahora nadie lo remediará. En su día, desde el Concello explicaron que en este punto hay una pequeña discordancia sobre la titularidad del terreno, una vez que la vía por la que cruzan es la nueva de enlace con Rois y, por tanto, de titularidad de la Xunta, aunque el Ministerio de Fomento sostiene que está dentro del área de influencia de la rotonda situada en la N-550 y, por tanto, es competencia estatal. Pero una cuestión como la titularidad de la vía no puede estar por encima de la seguridad de los peregrinos.

La Voz de Galicia

Intentan atracar a punta de navaja una gasolinera de A Picaraña.

Eran dos jóvenes en motocicleta, pero no han logrado robar nada.

Dos individuos han intentado atracar esta mañana una gasolinera de A Picaraña, a pie de la carretera N-550, en el municipio de Padrón. Ha ocurrido a las ocho y media de la mañana, hora a la que había dos empleados trabajando, uno en el interior de la estación de servicio y otro en el exterior. En ese momento han llegado dos jóvenes en una motocicleta, uno con casco y otro sin el. Uno de ellos se dirigió al interior de la estación, donde «se puxo a dar voltas», según cuenta el empleado al que el atracador le puso una navaja en la barriga antes de pedirle todo el dinero que tuviese. 

El trabajador le dijo que él no tenía el dinero y el atracador «cabreouse», de modo que, al verse acorralado en la oficina de la estación de servicio, el empleado le aseguró que la recaudación la tenía el compañero que estaba fuera, junto a los surtidores. El atracador salió y ese empleado, al verlo con la navaja, se echó a correr hacia la carretera y, aunque fueron tras él, no consiguieron cogerlo por lo que los ladrones se fueron sin llevarse nada. «Foi un pouco surrealista», dice el empleado al que le han amenazado con la navaja que, ahora, más tranquilo, dice que «non tiñan moitas ganas de roubar».

Los empleados han avisado a la Guardia Civil, que se ha llevado las grabaciones de las cámaras y les ha informado de que en las últimas semanas han atracado cuatro gasolineras en la zona. 

La Voz de Galicia

Los camiones siguen pasando por el centro de Padrón a causa de la señalización deficiente.

¿Por qué la restricción de circulación de tráfico pesado es efectiva en el centro de O Milladoiro, en Ames, y no pasa lo mismo en Padrón? La clave puede estar en la deficiente señalización de la vía alternativa por la que deberían ir los camiones para evitar el centro del casco urbano padronés, la denominada variante.

Si en la carretera N-550 a la altura de Calo, en un sentido, y de O Milladoiro en otro, existen señales bien visibles (en color amarillo) del desvío para camiones, no sucede lo mismo en el tramo de Padrón, donde la señalización es más confusa en los paneles elevados instalados a la altura del núcleo de A Ponte. En sentido contrario, en Pazos, la indicación tampoco es rotunda a la hora de desviar los camiones.

Si bien es cierto que la circulación de vehículos pesados por el centro de O Milladoiro está prohibida, tal y como indican las señales, en Padrón es por ahora una simple recomendación de no pasar por el centro de la villa y tomar el desvío de la variante.

Cuatro años después de abrir al tráfico esta última vía, a pie de la rotonda de Pazos, se puede comprobar que los vehículos pesados que entran o salen de la misma son los menos, mientras la mayor parte circula en dirección al centro de Padrón. Según cálculos del Concello, de media cada minuto dos vehículos pesados atraviesan el casco urbano, pese a que existe una vía alternativa y gratuita. La semana pasada esa circulación fue menor, quizás por la influencia de las vacaciones de verano. Aún así, vehículos cargados con madera, camiones cisterna, bañera y tráileres, todos pasan por el centro, algunos que trabajan para empresas asentadas en el municipio que, a estas alturas, deberían conocer de sobra la recomendación de ir por la variante.

También es cierto que sí los hay que circulan por esta vía alternativa, incluidos algunos cargados de madera, tal y como se puede comprobar a pie de la rotonda del Scala. La Demarcación de Carreteras del Estado en Galicia tenía previsto, según recuerda el Concello, pedir un informe a Tráfico para determinar el volumen de vehículos pesados por el centro de la villa y, en su caso, adoptar medidas, como así hizo en el tramo de O Milladoiro, medidas que podrían pasar por una prohibición.

Otra solución aportada a nivel local pasaría por regular con semáforo todos los pasos de peatones que hay en el tramo urbano de la villa, desde Iria a Ponte, de modo que obligaría a los vehículos pesados a detenerse cada poco y, finalmente, a desistir de circular por el centro.

Entretanto, vecinos y negocios que están a pie de la vía N-550 no solo soportan el paso de estos vehículos, de especial intensidad por las mañana de lunes a viernes, sino también el ruido que conlleva la circulación continua de camiones.

La Voz de Galicia