La feria de abril trajo aires sureños a Pontecesures.
La idea partió de la recién constituida asociación de hosteleros del municipio
Fiesta con aire sureño, de Andalucía. Así vibró Pontecesures el último sábado de abril. Y es que este municipio pontevedrés, más marinero que de interior, albergó por primera vez una feria de abril. La idea surgió de la recién constituida Asociación de Hostelería de Pontecesures, que preside Javier Freire Heleno.
El tiempo falló. Los claroscuros y la amenaza constante de tormenta quisieron aguar la fiesta, pero el público respondió. Y es que tras un largo invierno, y la ilusión de un verano inminente (el regalo de las temperaturas estivales de las últimas jornadas así nos lo hicieron creer), las ganas de salir pueden más que el mal tiempo.
Por el pueblo desfilaron caballos, algunos con calesas, que le dieron un toque de distinción a la exhibición. En una gran carpa, situada en el muelle, los romeros pontecesureños pudieron disfrutar de una exhibición de baile andaluz, a cargo de los profesores de baile Miguel y Triana. Sobre el improvisado escenario del muelle también mostraron su arte el grupo Los Caireles y las rumbas rocieras de Aires de Andalucía.
Además de la ambientación musical, estuvo muy presente la gastronomía, ya que se dispensaron bebidas típicas de Andalucía en la barra de la carpa.
Por la noche, la feria de abril continuó en locales colaboradores Víctor García, La Noche, La Sal, Taboga, Baila Conmigo, Tentaciones de Bes, Txukurú, A Cova, Tribal y Kompló. Las banderillas de colores adornaron los locales, mientras que los camareros y camareras iban acordes con la ambientación (sombrero, trajes estilo cordobés y faldas rocieras). Hubo regalos para los asistentes, y el sorteo de dos entradas para el Gran Premio de automovilismo de Montmeló.
TIERRAS DE SANTIAGO, 01/05/07
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